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La Policía Metropolitana de Bogotá capturó al cabecilla de una peligrosa banda delincuencial, que no sólo tenía influencia en la capital del país, sino en diferentes ciudades.
El capturado tenía pendientes siete órdenes de captura por delitos diversos como Homicidio, Secuestro Extorsivo Agravado, Hurto Calificado y Porte Ilegal de Armas de Fuego, no obstante, las investigaciones más recientes dan cuenta de su dedicación al fenómeno delictivo de la Extorsión.
Una de las últimas acciones criminales que llevó a que los investigadores del Gaula le siguieran los pasos de cerca para lograr su ubicación y posterior captura, se desarrolló en la carrera 18 con calle 3, barrio Eduardo Santos, donde se encontraba preparando una nueva estructura de extorsión y secuestro en la capital del país.
Carlos Arturo Baquero, de 50 años, de acuerdo con las primeras investigaciones presenta un prontuario delictivo desde los 15 años y en sus antecedentes pesan actividades de “boleteo” y secuestro a empresarios y reconocidos comerciantes; inclusive este delincuente aceptó ante el Juez de Garantías haber extorsionado a narcotraficantes, paramilitares, cabecillas de bandas criminales y representantes de “pirámides”.
Esta detención desvertebra una importante banda delincuencial que solo realizaba “trabajos” cuando sabían que la suma a recibir por extorsión o secuestro superaba los 1.000 millones de pesos.
La banda de alias “El Gordo” no sólo tenía su actividad delincuencial en Bogotá sino en diferentes ciudades del país, de hecho, uno de sus hijos que fue capturado hace tres meses y está cumpliendo una condena de 25 años por los mismos delitos.
Una de sus últimas actividades dan cuenta que arribó a una residencia en compañía de otros sujetos simulando ser miembros del CTI y de la Policía Nacional, bajo esta lógica los falsos funcionarios intimidaron a la víctima con armas de fuego y le increparon sobre la existencia de una “caleta” que presuntamente existía en la vivienda.
Pasadas unas horas, y al ver que no podían hallar la “Caleta”, los delincuentes le afirmaron a la víctima que de no pagar 500 millones de pesos, se vería sometido al secuestro de toda su familia, ante la gravedad de los hechos, el ciudadano decidió entregar a los extorsionistas 100 millones de pesos con la promesa de que entregaría el resto del dinero días más tarde.
La dinámica delincuencial de Baquero, alias “El Gordo” consistía en la mayoría de casos a ubicar personas que estuviesen involucrados en casos de narcotráfico, lavado de activos y similares, una vez los identificaba se hacía pasar por funcionario del DAS o de la Fiscalía para indicarles que en caso de no pagar el monto exigido, él podría adelantar procesos de extradición o capturas inmediatas por las presuntas investigaciones.
Carlos Arturo Baquero Cruz fue dejado a disposición de la Fiscalía Séptima Especializada de la Unidad Nacional contra el Secuestro y la Extorsión, donde se allanó a cargos.