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Tranquilo y con determinación, el príncipe jordano Ali Bin Al Hussein juega la carta de la juventud, la ilusión y la transparencia para conseguir un liderazgo nuevo al frente de la Federación Internacional de Fútbol (FIFA), un sueño que persigue sin descanso.
A sus 39 años, este medio hermano del rey Abdalá II de Jordania, que tiene rango de general en el ejército de su país, tiene una buena imagen en los ámbitos deportivos, que ha impulsado su candidatura.
Según su entorno, el príncipe está decidido a cumplir su misión de arrebatar la presidencia de la FIFA a Joseph Blatter, hasta ahora intocable, y para ello conjuga ímpetu juvenil, una gran dosis de osadía y un amplio presupuesto, que espera que sean suficientes para ganar la elección presidencial el viernes.
Es actualmente vicepresidente de la FIFA y miembro del comité Ejecutivo de la Confederación Asiática de Fútbol (AFC). Dirige además la Federación Jordana de Fútbol y ocupa otros puestos de responsabilidad en el deporte.
Al anunciar su candidatura, el príncipe Ali explicó que quería devolver la ilusión y la ética al organismo que dirige el fútbol mundial, salpicado en demasiadas ocasiones por acusaciones, sospechas o directamente casos de corrupción.
"La FIFA debe ser una organización de servicio y un modelo de ética", insiste, intentando trasladar sus valores personales al organismo.
"Tenemos que ser más abiertos, más transparentes en la forma en la que vemos las cosas. No hay nada que esconder en mi opinión y no debería haberlo", añadió.
Entre sus caballos de batalla en los últimos años ha estado el impulso del fútbol femenino y del juvenil. En 2012 creó el Proyecto de Desarrollo del Fútbol Asiático (AFDP, con ánimo no lucrativo), para desarrollar este deporte entre los jóvenes y reservar un lugar destacado a las mujeres.
La AFDP apoyó, con éxito, la campaña para levantar la prohibición a que las mujeres jugaran con el rostro cubierto.
El príncipe Ali se presenta como "un ferviente defensor del fútbol femenino" e insiste en que está "decidido a abordar todas las cuestiones pertinentes para conseguir que todas las niñas y las mujeres puedan jugar a este bello juego a través del continente (asiático)", según declaraba en 2011.
- Formación en EEUU y Gran Bretaña -Nació el 23 de diciembre de 1975 de un tercer matrimonio del rey Hussein con la reina Alia, una jordana de origen palestino que murió en un accidente de helicóptero en 1977.
Estudió en Estados Unidos, donde en 1993 se diplomó en la Salisbury School, en el estado de Connecticut.
Como la mayor parte de los miembros de la familia real jordana, ingresó luego en la Academia Militar Real de Sandhurst, en Gran Bretaña, de la que salió en 1994.
Ha servido como jefe de la seguridad especial del rey de 1999 a 2008 y tiene rango de general en el ejército jordano. Su pasión por el deporte se divide entre el fútbol y la lucha grecorromana.
Desde 2004, el príncipe Ali está casado con la experiodista argelina Rym Brahimi, con la que tiene una niña y un niño, con los que no ha dudado en posar en la promoción de su campaña electoral para la FIFA.