Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
El gobierno ecuatoriano presentará ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya, la “memoria documental” del caso sobre los efectos nocivos en su territorio de las fumigaciones aéreas antidrogas de Colombia.
Ecuador demandó a Colombia el 3 de marzo de 2008, alegando que esas aspersiones afectaron su territorio y población. El diplomático Diego Cordóvez será el encargado de presentar los argumentos el martes. Según la Cancillería en Quito, lo más importante de este proceso es que Ecuador había agotado todos los medios diplomáticos desde el año 2000, cuando comenzó la discusión para que Bogotá suspendiera las aspersiones, “cosa que hizo hace dos años”.
“Colombia dio muestras, por varios años, de no estar dispuesta a acoger los pedidos ecuatorianos y por eso recurrimos a la CIJ, un organismo para resolver pacíficamente este asunto”, dice un comunicado del ministerio ecuatoriano.
Y es precisamente en temas como éste que analistas, periodistas y asesores del mandatario ecuatoriano, Rafael Correa, coinciden: restablecer las relaciones entre Ecuador y Colombia tomará más tiempo de lo que muchos quisieran y el camino para lograrlo no será precisamente de rosas por los muchos temas que están en debate. ¿Qué hacer? Según la analista ecuatoriana Marcela Balbi, “los dos mandatarios deberán ceder a sus cuestiones personales para dedicarse a crear una política en donde el respeto y la tolerancia primen. Por el bien de los dos países, Ecuador y Colombia deben establecer una política de gobierno y no de presidentes”.