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El saliente director del Instituto Nacional de Salud, Luis Eduardo Mejía, advirtió que en Colombia el 70% de los laboratorios que toman muestras de citología no cuentan con el control necesario. Un descuido que ha derivado en que al menos el 10% de las cerca de 1.200.000 muestras que se toman en el país cada año se consideren insatisfactorias.
La citología o test de Papanicolau es la herramienta más efectiva con que cuentan los médicos para prevenir el cáncer de cuello uterino. Aunque no se trata de un examen infalible, cuando se realiza en condiciones de estricto control de calidad, puede llegar a detectar hasta el 95% de los cánceres cervicales en estados tempranos de su desarrollo. Esto permite tratar a las mujeres de manera eficaz y segura.
Errores peligrosos
Se cree que gracias a esta técnica, que comenzó a popularizarse desde 1940, el porcentaje de muertes por esta variedad de cáncer, ha decrecido hasta un 70%. Sin embargo, aún faltan un gran camino por recorrer. Sólo en Colombia, cada año se diagnostican 5.000 nuevos casos de cáncer uterino y 2.300 mujeres mueren por esta razón.
Para Edgar Parra, director del Laboratorio de Patología del Instituto Nacional de Salud, uno de los mayores riesgos cuando se realiza mal una citología es decirle a una mujer que no está en riesgo cuando sí lo está. Es decir, que una citología mal hecha puede enmascarar la presencia de un cáncer que se manifestará meses más tarde cuando ya es imposible frenar su desarrollo.
Con el propósito de disminuir el número de citologías mal realizadas, el Instituto Nacional de Salud en conjunto co el Ministerio de la Protección Social vienen implementando desde hace más de un año un programa de control de calidad. Un 30% de los 420 laboratorios de patología y citología existentes en Colombia ya participan de la iniciativa del Gobierno.
Periódicamente, y en colaboración con las Secretarías de Salud de los departamentos, se realizan talleres de capacitación para los profesionales encargados de realizar citologías. Martha Díaz, del Instituto Nacional de Salud, comentó que en estos talleres “nos hemos encontrado con personas que llevan 10 o 15 años realizando citologías y nos dicen, después de recibir la capacitación, que no sabían que las muestras se tomaban de esta otra manera”.
El director del Instituto Nacional de Salud anunció el lanzamiento de la “Guía de control de calidad para la toma, procesamiento e interpretación de citologías de cuello uterino” que se convertirá en la hoja de ruta para que los laboratorios mejoren la calidad de sus servicios. Un programa de software, Cervixsoft, complementa las guías y será distribuido gratuitamente.
El médico Edgar Parra recomienda a las mujeres que cuando acudan a una instititución de salud para practicarse una citología, comprueben si está habilitada por la Secretaría de Salud. Y además, que sigan la recomendación de realizarse la prueba al menos una vez al año.