Con el Atlético Bucaramanga en la Primera B nadie creyó posible que en 2010 se llenara el estadio Alfonso López. Mucho menos que 25 mil personas ovacionaran a un equipo.
Pero eso pasó el lunes en la noche, cuando la afición local aplaudió a rabiar a las integrantes de la selección sub 20 de Colombia, que se clasificó para el Mundial de la categoría en Alemania y que esta noche jugará la gran final del Suramericano ante Brasil.
Y el nombre que más corearon fue el de Yoreli Hazleidi Rincón Torres, nacida hace casi 17 años en Piedecuesta y, lógicamente, la preferida de los hinchas santandereanos.
Luce el número 10 en la espalda y su talento en la cancha no tiene límites. Por eso sus compañeras siempre la buscan para darle el balón y le perdonan incluso algunos excesos de individualismo.
Yoreli, como la mayoría de sus compañeras, conformó la selección sub 17 que logró el título continental y que estuvo en el Mundial de Nueva Zelanda hace dos años. “Hemos cambiado la historia del fútbol femenino, estamos demostrando que acá hay talento y que sí se pueden lograr cosas grandes”, dijo emocionada después de la victoria ante Paraguay, en la semifinal.
Ahora quiere ganarle a Brasil y dedicarle la victoria a su hermano Daniel, a su papá Élber, quien tiene una fábrica de balones, y sobre todo a su mamá, Graciela, quien curiosamente también jugaba fútbol y fue su inspiración. “Era recalidosa”, recuerda su hija.
La armadora nacional, de excelente panorama de juego y buena pegada en la media distancia, admite que superar a las verdeamarillas será complicado, pero que ella y sus compañeras están muy optimistas: “Llevamos cinco triunfos seguidos y aunque hay algo de cansancio, vamos a dejarlo todo para salir campeonas. La meta era clasificar al Mundial y ya lo logramos, pero el título sería el broche dorado”.
En el duelo preliminar, desde las 6:00 p.m., Paraguay y Chile definirán el tercer lugar del torneo.