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Luego de casi 20 años de impunidad, la Fiscalía ha empezado a tomar medidas para esclarecer el asesinato de David Núñez Cala, secretario de Obras de la Alcaldía de Barrancabermeja, quien, con 32 años, a las 6:00 a.m. del 5 de abril de 1991, mientras se desplazaba en su camioneta hacia su oficina, sucumbió ante las balas de un grupo de sicarios. Hace unos días, trascendió que por este crimen había sido capturado en ese municipio David Ravelo Crespo, secretario general de la Corporación Regional para la Defensa de los Derechos Humanos (Credhos). Las pesquisas, sin embargo, no lo incluyen sólo a él.
En reciente decisión conocida por El Espectador, un fiscal antiterrorismo envió este expediente a la Corte Suprema para que investigue la presunta participación de José Aristides Andrade en el homicidio. Andrade, de 62 años de edad, fue congresista durante 16 años y hoy disfruta de su pensión como ex parlamentario. Fueron las declaraciones que entregó en Justicia y Paz el ex comandante paramilitar Mario Jaimes Mejía o El Panadero las que hicieron que el proceso se desempolvara de los anaqueles de la Fiscalía.
En versión libre, Jaimes Mejía relató que en abril de 1991 —cuando no era miembro de las autodefensas sino del frente 24 de las Farc— varios miembros de la guerrilla se reunieron para discutir las aspiraciones que David Núñez Cala tenía de llegar a la Alcaldía del puerto petrolero. Según El Panadero, José Aristides Andrade, quien pertenecía al mismo movimiento político de Núñez Cala, el Frente de Izquierda Liberal Auténtico (Fila), señalaba al entonces secretario de Obras de Barranca de ser colaborador de ‘Los Masetos’, un grupo paramilitar que actuaba en los Santanderes y el Magdalena Medio.
El Panadero agregó que en otra reunión en la que estuvieron Andrade y David Ravelo, se volvió a discutir el inconveniente que representaría para las Farc la llegada de Núñez Cala a la Alcaldía por sus supuestos nexos con ‘Los Masetos’. “La única solución era darle de baja”, señaló el ex jefe ‘para’. En ese encuentro Andrade, presuntamente, se comprometió con las Farc a aportar dinero para su comando urbano. Fremio Sánchez Carreño, otro de los participantes en el homicidio, dijo bajo juramento que Ravelo era comandante político de las Farc y que a Andrade sólo lo había visto cuando discutían el destino de Núñez Cala.
Familiares y amigos de David Núñez Cala, no obstante, refutaron que éste hubiese tenido nexo alguno con los paramilitares. Entre ellos Horacio Serpa, hoy gobernador de Santander y entonces director del movimiento político Fila. Horas después de la muerte de Núñez Cala, según relató Antonio Núñez Cala (hermano de David), Serpa declaró a los medios que las Farc habían sido las responsables del crimen del ingeniero Núñez Cala. “Esa noche del velorio en la funeraria llegó el doctor Aristides y regó el cuento de que a David lo había matado Daniel Fuentes Esparza”, contó Antonio Núñez. Fuentes Esparza era el contrincante de David Núñez Cala en la carrera por la Alcaldía de Barranca.
El pasado 14 de septiembre, ante la detención de Ravelo, la Alcaldía del puerto solicitó a la Fiscalía celeridad en la investigación. “Ravelo Crespo se ha caracterizado por ser un acérrimo defensor de los Derechos Humanos en Barrancabermeja y en el Magdalena Medio”, se leía en el comunicado. Andrade declaró ante la Fiscalía que nunca tuvo relación con grupos ilegales, pero, para el organismo investigador, las declaraciones de El Panadero y Fremio Sánchez —quienes se acogieron a sentencia anticipada en este caso—, así como algunas otras evidencias, merecen que las pesquisas continúen hasta esclarecer quiénes ordenaron el asesinato de David Núñez Cala.