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“Un gran paso para Israel; un momento de gran orgullo”. Con esas palabras, Benjamín Netanyahu, primer ministro de ese país, celebró el lanzamiento que se llevó a cabo esta mañana en Estados Unidos. En Cabo Cañaveral, en el estado de Florida, despegó el módulo no tripulado "Bereshit", el cual busca cumplir una misión histórica: convertir a Israel en el cuarto país en llegar al satélite. (Por primera vez decodifican el genoma del tiburón)
"El verdadero combustible de esta nave espacial es la audacia y el ingenio israelí”, aseguró Netanhayu que vio el despegue en una sala de control de la sede de la Industria Aeroespacial Israelí (IAI). (Lea Un sistema para que personas discapacitadas puedan acceder a Twitter)
Con un presupuesto de apenas US$100 millones (unos 300 mil millones de pesos), la nave, que empezó a planearse desde hace 8 años, recorrerá unos 6,5 millones de kilómetros hasta llegar al satélite. La idea es que alunice el próximo 11 de abril. (Lea "Utilizar bolsas de plástico para comprar fruta y verdura me parece una locura")
"Hace ocho años nos aventuramos en este viaje que ahora está cerca de completarse, en dos meses, cuando aterricemos en la Luna. Estamos haciendo historia y orgullosos de ser parte de un grupo que ha soñado y hecho realidad una visión que comparten muchos países del mundo pero que hasta ahora solo tres han conseguido", había dicho días atrás Morris Kahn, el presidente de SpaceIL, la empresa responsable del proyecto para resumir la iniciativa que tendrá una misión puramente educativa.
El Bereshit, que en hebreo significa Génesis, pesa 585 kilos y mide unos 1,5 metros. Fue lanzado al espacio por un cohete Falcon 9 de la empresa Space X y necesitará siete semanas para alcanzar la velocidad que requiere para su encuentro con el satélite. En este tiempo girará alrededor de la Tierra
A bordo lleva varios elementos: archivos digitales del tamaño de una moneda, una Torá (Pentateuco, los primeros cinco libros de la Biblia), dibujos hechos por escolares israelíes, una copia del himno nacional y una bandera de Israel, así como literatura, fotos y canciones israelíes.
Además, tiene una cápsula del tiempo con SpaceIL, la única empresa israelí en participar en el concurso de Google Lunar XPRIZE Competition, que fue convocado en 2015 con un premio de 30 millones de dólares (26,4 millones de euros) y proponía llevar a la Luna un vehículo espacial no pilotado por humanos.
Google decidió cancelar el concurso en marzo de 2018, pero SpaceIL junto con la IAI continuaron con el proyecto tras reunir los cien millones de dólares necesarios.
Una vez en la superficie lunar, el Bereshit medirá el campo magnético del satélite y enviará de manera simultánea imágenes y vídeos. Está equipado con varias cámaras, sensores magnéticos y transmisores.
*Con información de agencias