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El Tribunal Supremo de Dinamarca condenó este miércoles a seis daneses por intento de apoyo económico a las Farc y al FPLP palestino a través de la venta de camisetas, pero los dejó en libertad al decidir que todas las penas de prisión sean condicionales.
El dictamen del Supremo ratifica la sentencia de la anterior instancia, con penas de cárcel de 60 días a 6 meses, pero convierte en condicionales, con un período de prueba de un año, las dos condenas que antes eran incondicionales, y redujo otra a 60 días.
La sentencia considera que tanto las Farc como el FPLP han cometido "ataques graves contra la población civil con el propósito de aterrorizar gravemente a la población o para desestabilizar las estructuras políticas, constitucionales, económicas y sociales fundamentales" en sus respectivos países.
La dimensión y las características de los actos de ambos grupos, de acuerdo a las pruebas presentadas durante el anterior juicio en la Audiencia Nacional, cumplen los requisitos fijados en la ley danesa, independientemente de que Israel sea o no un poder de ocupación y Colombia un estado de derecho, como afirmaban los acusados, señaló el Supremo.
La ley castiga el apoyo a grupos terroristas con hasta diez años de prisión.
En el caso de las Farc se recuerda que "han matado a civiles, los han sometido a actos de violencia grave, han realizado secuestros de políticos y de un candidato a presidente y usado granadas de poca precisión en áreas civiles, causando víctimas civiles".
El Supremo rechazó que las acciones de ambos grupos puedan ser equiparadas a la de los estados contra los que luchan, con lo que se desestimaba el argumento de la defensa de que se trata de actos de guerra.
Que los acusados no consideren a las Farc y el FPLP grupos terroristas no tiene importancia en la cuestión de la culpabilidad, puesto que eran conscientes de que las acciones de estos grupos podían estar incluidas en la legislación danesa sobre terrorismo, consta en la sentencia, acordada por unanimidad por los 7 jueces.
La decisión de convertir en condicional las dos únicas penas de cárcel que no lo eran obedece a las "dudas" provocadas al analizar la ley danesa, que insta a considerar el contexto en que se producen los hechos y obliga a que exista un estado legítimo enfrente para hablar de terrorismo.
La sentencia en el Supremo cierra un proceso iniciado en enero de 2006, cuando la firma de ropa danesa "Fighters+Lovers" anunció que destinaría una parte de lo que costaban unas camisetas a una emisora vinculada a las Fac o a un taller gráfico del FPLP.
El primer juicio, en diciembre de 2007, fue absolutorio, al considerar que ni las Farc ni el FPLP eran grupos terroristas; y el de apelación finalizó con una sentencia condenatoria para seis personas y la absolución de otra.
Los condenados consideraron "simbólica" la pena y anunciaron que recurrirán al Tribunal Europeo de Derechos humanos y que seguirán realizando acciones de solidaridad con las Farc y el FPLP.
Katrine Wilumsen, una de las condenadas, calificó la sentencia de "irracional", "estúpida" y "peligrosa" para la democracia y pidió que se reformara la ley danesa sobre terrorismo.