"No es justo para las familias de estos jóvenes que esperaban el apoyo de ellos para su subsistencia, encontrar que fueron asesinados y después presentados como miembros de la guerrilla muertos en combate", dijo la senadora en un comunicado.
Dijo que la decisión de retirar del servicio activo a 25 miembros del ejercito entre ellos a tres Generales, varios Coroneles y algunos suboficiales, por presuntas violaciones a los derechos Humanos y la desaparición de varios jóvenes, es una muestra más, de la importancia de incluir en la Ley de Víctimas que se debate en la Comisión Primera de la Cámara de Representantes, a todas las víctimas de los agentes del Estado.
La congresista acompañó la decisión del Presidente Uribe y las Fuerzas Armadas de retirar a los militares presuntamente implicados en la desaparición de los jóvenes de Soacha, que aparecieron muertos en Ocaña (Norte de Santander).
"Fue una medida embarazosa para el Gobierno pero necesaria para salvaguardar la imagen de las institución armada; sin embargo la investigación debe llegar al fondo porque al parecer ahí no están todos los que son, ni son todos los que están", anotó la senadora.