El fiscal General, Eduardo Montealegre, defendió nuevamente su posición para la búsqueda de un modelo minimalista de aplicación de justicia en el marco del proceso de paz que se adelanta con la guerrilla de las Farc y el Gobierno de Juan Manuel Santos.
Para el jefe del ente investigador es menester la búsqueda de un tipo de justicia transicional tanto para militares, como para guerrilleros, en lo que tiene que ver con los crímenes de guerra. Sin embargo, hizo la salvedad que los denominados ‘falsos positivos’ no pueden ingresar en esta categoría.
“No creo que pueda existir un traslado automático de los beneficios que obtengan los guerrilleros en el marco del proceso de paz y que mecánicamente se traslade a miembros de la Fuerza Pública. Por eso creo que debe haber un tratamiento diferencial, además es una exigencia constitucional y es hora que el país empiece a pensar cuál sería ese tratamiento”, precisó el jefe del ente investigador en un debate sobre los derechos de las víctimas.
En uno de los puntos más candentes del encuentro relacionado con los alcances de los beneficios que se le otorgarán a los guerrilleros que firmen la paz, el Fiscal General aseguró que la Constitución Política es clara cuando señala que solamente aquellos condenados por delitos de lesa humanidad no pueden participar en política, mientras que los sentenciados por otras conductas no tienen ningún impedimento.
En este sentido aseguró que es menester la creación de tribunales especiales para el juzgamiento de guerrilleros, los cuales les otorgaran los beneficios establecidos en el Marco Jurídico para la Paz. “Tenemos que buscar formas de equilibrio entre los derechos de las víctimas y el derecho a la sociedad que quiere vivir en paz”.
Montealegre, quien ha sido constante en su discurso, asegura que el modelo de justicia retributiva no es el mejor cuando se habla de un proceso de este tipo. “Se hace más justicia cuando nos centramos en un modelo de justicia basado en los máximos responsables” de los crímenes de guerra y de lesa humanidad. Por esto resaltó en la necesidad de crear un modelo de investigación dirigido a identificarlos.
Ante esto resaltó que no siempre las altas penas son sinónimo de justicia, hecho por el cual se deben buscar otro tipo de alternativas para lograr el máximo beneficio de las víctimas y de los victimarios. Acá la figura de la reconciliación, la reposición y la garantía de la no repetición surge y es la mejor.
“Es necesario ponderar costo beneficio en términos de protección de derechos fundamentales para el país (…) La paz tiene unos costos, pero el proceso de paz no está fundamentado en la impunidad”, aseguró el Fiscal General.