Un oficial activo de inteligencia le contó al periodista Javier Alexander Macías, del periódico El Colombiano, que detrás del escándalo de las chuzadas que destapó el martes la revista Semana estaría un grupo de altos mandos militares conocidos como la ‘generación de los 70’.
El grupo conformado por al menos unos 10 coroneles y generales retirados, sería el que orquestó desde la pequeño local en Bogotá, una trama de espionaje a Humberto de la Calle, Sergio Jaramillo y Alejandro Éder, integrantes del equipo negociador con las Farc, en La Habana.
El objetivo de todo este montaje de inteligencia sería poner presión sobre el presidente Juan Manuel Santos para que se cambien las reglas del proceso de paz que se adelanta con las Farc o, en su defecto, se termine con los diálogos.
“Este oficial reveló que por lo menos 70 generales en retiro tienen reuniones periódicas con herramientas tecnológicas, con el responsable de esta oficina, un general (r) que se encuentra fuera del país, y que mientras estuvo en la Fuerza Pública, fue de los más acérrimos enemigos del proceso de paz con la guerrilla”, reveló el periódico.
El oficial de inteligencia contó que la oficina llevaba un buen tiempo funcionando, “el grupo fue creado durante la comandancia del general Mantilla" y precisó que Mantilla Sanmiguel habría salido del Ejército porque su cabeza fue pedida desde La Habana, Cuba.
De acuerdo con el relato revelado por el periódico antioqueño, la oficina descubierta ayer en Bogotá no es la única que existe. En un lujoso hotel de Bogotá operó otra durante varios meses y en las principales ciudades del país, entre ellas Medellín, existen otras.
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