Movimiento Defendamos la paz acusa al Gobierno de inventar “fantasmas” para hundir la JEP

Iván Duque, presidente de Colombia, junto a Patricia Linares, presidenta de la JEP. / EFE

En un comunicado, el movimiento Defendamos la paz, integrado por varis sectores políticos del país, acusó al gobierno de Iván Duque Márquez de inventar “fantasmas” alrededor de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) con el fin de hundirla y rechazaron lo que calificaron como una “nueva campaña de mentiras y presiones” que intenta distorsionar el debate de fondo e influir en la votación en el Senado obre las objeciones a la ley estatutaria.

“El Gobierno ha sacado de la manga dos falsos argumentos. El primero dice que la ley estatutaria de la JEP facilita los llamados ‘colados’ para lo cual refrita una vieja información de octubre de 2018 que sólo demuestra que el sistema, tal como está, funciona bien. El segundo pretende engañar a la opinión diciendo que la JEP acaba con la extradición de narcos. ¡Ni lo uno ni lo otro!”, señala la comunicación.

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Según los defensores de la implementación del Acuerdo, la JEP cuenta con el sistema de filtros “más estricto que ha existido en la historia” y que está contenido en el decreto 1674 de 2016. “La ley evita que el alto comisionado de un gobierno hostil a la paz pueda, de manera arbitraria, pasar por encima de la JEP y excluir vía resolución a los excombatientes de las Farc que quisiera y destruir la seguridad jurídica del Acuerdo de paz”, explican.

Sobre la extradición, señalan que el artículo 156, objetado por el presidente Duque, no es un “mico”, ya que está incluido tanto en el texto original aprobado en el Congreso como por la Corte Constitucional.

“Es falso que el artículo elimine la extradición de narcos porque se refiere claramente a terceros y agentes del Estado que sean sujetos de la JEP y, por tanto, aceptados como agentes del conflicto (…) No elimina, sino que condiciona la extradición a decir la verdad”, argumenta Defendamos la paz.

Según el movimiento, la JEP ha rechazado 43 peticiones de garantías de no extradición al considerar que los solicitantes no las merecen. Hace un llamado para que “se respete la independencia del Senado y a que, a la mayor brevedad, se debata y se decida, sin presiones ni mentiras acerca de las objeciones presidenciales”.