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Sony, el declive de un grande japonés

A una de las marcas más emblemáticas del entretenimiento, las cifras no le cuadran por estos días.

Edwin Bohórquez Aya
07 de febrero de 2014 - 04:35 p. m.
Kazuo Hirai presidente de Sony. /EFE
Kazuo Hirai presidente de Sony. /EFE
Foto: AFP - KAZUHIRO NOGI

Conocido como uno de los fabricantes de televisores más nombrados en el globo por hacer pantallas de gran tamaño, el mismo dueño del afamado ‘walkman’, catalogado el primer aparato portátil que permitía reproducir música a través de la cinta de casete y hasta el creador de las primeras consolas de videojuegos que hoy son abrigadas bajo la marca PlayStation, Sony fue por décadas el rey de reyes del negocio tecnológico. Su imperio lo creó Masaru Ibuka y Akio Morita, desde 1946 cuando se dieron cuenta que desde su oficio, la ingeniería, estaban en la capacidad de crear productos electrónicos que facilitaran la vida de los clientes. Entonces se inventaron las primeras grabadoras, fueron al segmento completo conocido como audio, incursionaron en video, también en televisores y todo lo que de estos tres pudieses salir. Innovaron y también registraron en sus libros la división de juegos, música (con Sony Music Entertainment, Inc.) y cine (con Sony Pictures Entertainment). Como buenos japoneses, eran aplicados.

Hicieron, literalmente, de todo. Y en todo, ellos fueron primeros. En 1950 mostraron al mundo la primera cinta de grabación basada en papel con revestimiento de magnetita. Para 1955 pusieron en el mercado la primera radio de transistores. Comenzando mayo de 1960 el primer televisor portátil del mundo. En 1968 el primer televisor Triniton a color. Terminando octubre del 1971 mostraron al público el primer reproductor de videocasete. A mediados de julio de 1979 vieron nacer el primer ‘walkman’, tres años más tarde el primer reproductor de cd, en 1988 la primera cámara de fotografía casera y para 1990 descubrieron en las tiendas el primer televisor con alta definición. En octubre de 1996 vio la luz la primera cámara de fotografía digital, en 1997 su primer computador Vaio y dos años después el primer robot de entretenimiento para la venta. Era un perro. De ahí para adelante, vino todo lo que se conoce en la actualidad, porque ¿quién no ha tenido un producto Sony en sus manos?

Pero aparecieron competidores fuertes que también sabían de innovación, de mercadeo. La era digital se tomó el negocio y la competencia se tornó más fuerte que nunca. Los que ya habían estudiado y aprendido de marcas como Sony, ahora estaban haciendo lo suyo. Aparecieron los coreanos, los chinos y los taiwaneses. Ahora, con todo el protagonismo que antes tuvo Sony, compañías como Samsung y Lg son los dueños del mercado. Y ni qué decir de Apple, que está en el ‘top of mind’ del mundo entero. Hasta compañías como Huawei han creados verdaderos emporios de telecomunicaciones y cada vez buscan entrar más fuerte al entretenimiento, el ‘core business’ real de esta compañía japonesa. Bastó con asistir al Consumer Electronics Show, hace tan solo un mes en Las Vegas, Estados Unidos, para ver la fortaleza de quienes le vienen quitando mercado a Sony.

Por eso, no sorprendió la declaración Kazuo Hirai, presidente mundial de Sony, este jueves en Tokio. Su rostro no podía ocultar la tristeza de unos estados financieros pésimos que confirmaban el mal momento. Hirai reveló que la compañía perdió US$ 1.080 millones en el último año, tomó la decisión de eliminar 5.000 puestos de trabajo y saldrá del negocio de los computadores, más conocidos como Vaio, estancados durante todos los doce meses. Su lucha, dijo en una conferencia de prensa, es la reinvención en una era digital, tanto que hasta que escindirá para julio de 2014 sus operaciones en la fabricación de televisores, porque se completaron nueve resultados seguidos con números en rojo.

“Sony y Japan Industrial Partners Inc. (“JIP”) concluyeron un memorando de entendimiento confirmando la intención de las partes para que Sony venda a JIP el negocio de Computadoras Personales, actualmente operado bajo la marca Vaio”, detalla el comunicado oficial de la multinacional. Y, acto seguido, detalló que en cuanto a televisores, se enfocará “su mix de productos y se enfocará en incrementar la proporción de ventas de modelos de alta agama. Sony planea reforzar el liderazgo de la compañía en el mercado de 4K a través del fortalecimiento de su línea de productos y a su vez, reforzar también los modelos 2K con una amplia gama de colores y tecnologías de mejora de imagen”. Pero esa estrategia incluye “separar (precisamente) el negocio de televisores y operarlo como una subsidiaria”. Así las cosas, y pensando en los negocios más productivos, “la compañía ha resuelto concentrar su línea de productos móviles en teléfonos inteligentes y tabletas”.

Una reestructuración que le costará oro a la organización. Ya, dentro del presupuesto, tuvo que asignar 20.000 millones de yenes (US$197,26 millones) adicionales para cubrir los rezagos del año pasado y 70.000 millones de yenes (US$ 690,43 millones) adicionales para lo que se viene en este 2014. Una serie de decisiones que harán evidente una reducción de costos fijos anuales de más de 100.000 millones de yenes (US$986,33 millones) aproximadamente a comienzos de 2015, advirtió. ¿Lo lograrán? Por ahora Sony solo ha decepcionado a sus inversionistas, que esperaban, de acuerdo con el Financial Times hace tres meses, un beneficio de 14,800 millones de yenes y, al contrario, recibieron la noticia de una pérdida neta de 19.300 millones de yenes (US$ 197millones) en el segundo trimestre. La prueba de este declive japonés.

Por Edwin Bohórquez Aya

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