El 6% de la población mundial es adicta al sexo

Después de intensas discusiones y debates académicos, finalmente la adicción al sexo fue incluida formalmente en la que es considerada la biblia de la psiquiatría mundial, el Manual Diagnóstico y Estadístico de Trastornos Mentales. Para quienes sufren de esta patología, caracterizada principalmente por una necesidad incontrolable de satisfacer los deseos carnales, se trata de una gran noticia, pues en muchos casos eran tildados de mentirosos y acusados de utilizar esta condición como excusa para sus infidelidades.

Ahora está claro que se trata de una enfermedad que requiere psicoterapia y en algunos casos del uso de fármacos, como cualquier otro trastorno mental. Según quedó consignado en el Manual, la adicción al sexo se define como un trastorno obsesivo compulsivo y quienes lo padecen no son capaces de controlar sus pensamientos ni sus acciones.

Patrick Carnes, uno de los psiquiatras que más defendió la declaración de esta adicción como enfermedad mental y propietario de la clínica Pine Grove Behavioural Centre de Mississippi (EE.UU.), donde Tiger Woods está recibiendo tratamiento, aseguró al conocer la noticia al periódico El Mundo, de España, que quienes sufren de esta patología son incapaces de parar su comportamiento sexual autodestructivo, al igual que un alcohólico no puede dejar de tomar.

Y aclaró que este trastorno afecta tanto a hombres como a mujeres, sin importar su condición socioeconómica. Con respecto al tratamiento que se debe seguir para manejarlo, aún hay bastantes desacuerdos entre la comunidad médica. Sin embargo, en Estados Unidos existen varias clínicas y grupos de apoyo, similares a los de alcohólicos anónimos, en donde los pacientes reciben atención psiquiátrica, asisten a terapias y en algunos casos, incluso, deben tomar medicamentos por algún tiempo para controlar la ansiedad.

A pesar de que desde hace más de 200 años en la literatura médica se han registrado casos de sexoadictos, aún se conoce muy poco sobre lo que pasa en el cerebro cuando se presenta un trastorno de hipersexualidad (nombre con el que se denomina esta adicción en el Manual Diagnóstico y Estadístico de Trastornos Mentales). Se trata de un campo controvertido en el que hasta ahora se está comenzando a indagar.

¿Soy adicto al sexo?

Si usted presenta varios de los siguientes síntomas es posible que su deseo por sentir placer se haya convertido en una enfermiza obsesión y deba acudir a un especialista para recibir tratamiento:

1. Necesidad incontrolable por satisfacer los deseos carnales.

2. Masturbarse de manera compulsiva.

3. Consumir mucha pornografía (revistas, internet, televisión).

4. Mantener varias relaciones amorosas al mismo tiempo.

5. El sexo es lo más importante en su vida.

6. Enfrentar problemas familiares por cuenta de su actitud hacia el sexo.

7. Pagar por tener sexo.

8. Preferir los encuentros sexuales de una sola noche.

Después de intensas discusiones y debates académicos, finalmente la adicción al sexo fue incluida formalmente en la que es considerada la biblia de la psiquiatría mundial, el Manual Diagnóstico y Estadístico de Trastornos Mentales. Para quienes sufren de esta patología, caracterizada principalmente por una necesidad incontrolable de satisfacer los deseos carnales, se trata de una gran noticia, pues en muchos casos eran tildados de mentirosos y acusados de utilizar esta condición como excusa para sus infidelidades.

Ahora está claro que se trata de una enfermedad que requiere psicoterapia y en algunos casos del uso de fármacos, como cualquier otro trastorno mental. Según quedó consignado en el Manual, la adicción al sexo se define como un trastorno obsesivo compulsivo y quienes lo padecen no son capaces de controlar sus pensamientos ni sus acciones.

Patrick Carnes, uno de los psiquiatras que más defendió la declaración de esta adicción como enfermedad mental y propietario de la clínica Pine Grove Behavioural Centre de Mississippi (EE.UU.), donde Tiger Woods está recibiendo tratamiento, aseguró al conocer la noticia al periódico El Mundo, de España, que quienes sufren de esta patología son incapaces de parar su comportamiento sexual autodestructivo, al igual que un alcohólico no puede dejar de tomar.

Y aclaró que este trastorno afecta tanto a hombres como a mujeres, sin importar su condición socioeconómica. Con respecto al tratamiento que se debe seguir para manejarlo, aún hay bastantes desacuerdos entre la comunidad médica. Sin embargo, en Estados Unidos existen varias clínicas y grupos de apoyo, similares a los de alcohólicos anónimos, en donde los pacientes reciben atención psiquiátrica, asisten a terapias y en algunos casos, incluso, deben tomar medicamentos por algún tiempo para controlar la ansiedad.

A pesar de que desde hace más de 200 años en la literatura médica se han registrado casos de sexoadictos, aún se conoce muy poco sobre lo que pasa en el cerebro cuando se presenta un trastorno de hipersexualidad (nombre con el que se denomina esta adicción en el Manual Diagnóstico y Estadístico de Trastornos Mentales). Se trata de un campo controvertido en el que hasta ahora se está comenzando a indagar.

¿Soy adicto al sexo?

Si usted presenta varios de los siguientes síntomas es posible que su deseo por sentir placer se haya convertido en una enfermiza obsesión y deba acudir a un especialista para recibir tratamiento:

1. Necesidad incontrolable por satisfacer los deseos carnales.

2. Masturbarse de manera compulsiva.

3. Consumir mucha pornografía (revistas, internet, televisión).

4. Mantener varias relaciones amorosas al mismo tiempo.

5. El sexo es lo más importante en su vida.

6. Enfrentar problemas familiares por cuenta de su actitud hacia el sexo.

7. Pagar por tener sexo.

8. Preferir los encuentros sexuales de una sola noche.