Formando comunicadores de vida

Nat Nat Iguarán Fajardo, wayuu de eirükü Ipuana, es miembro de la Organización Indígena de La Guajira, Yanama, gestora del Programa de Comunicación Propia Aapirawa y delegada en la Comisión Nacional de comunicación para los Pueblos Indígenas CONCIP. Desde su trayectoria organizativa y política ha aportado a la construcción e implementación de la política Pública de Comunicación desde y para los Pueblos Indígenas, en el ámbito regional y nacional.

La Organización Indígena de La Guajira Yanama es una de las organizaciones en la región con mayor experiencia en la defensa y fortalecimiento de la Educación Propia, lo que le ha permitido desarrollar propuestas y proyectos encaminados a restablecer los derechos fundamentales de los wayuu en sus propios territorios.

Yanama nace en el año de 1975 como una estrategia de preservación de la cultura Wayuu, con el objetivo de mantener el sentido de la identidad como pueblo indígena, promoviendo la educación, el wayuunaiki, las tradiciones y las costumbres como mecanismo de continuidad histórica de la Nación Wayuu.

Es así como en el año 2007, se crea el Programa de Comunicación Propia Aapirawa, desarrollando diferentes acciones en formación, creación de contenido y registro audiovisual de todos los procesos en donde Yanama logra incidir en el restablecimiento de los derechos territoriales y culturales en La Guajira y a nivel nacional, uniéndose Yanama a la construcción de lo que es hoy la Política Publica de Comunicación de y para los Pueblos Indígenas PPCPI y al Plan Nacional Unificado de TV Indígena; la cual busca fortalecer los espacios de comunicación cultural e intercultural, exigir una acción que garantice la conservación, protección y preservación del patrimonio cultural, material, inmaterial e icónico de los pueblos indígenas en Colombia.

En 2010 se realiza la Primera Mesa de Comunicación Wayuu, en el Resguardo de Provincial, Barrancas, donde se propicia un encuentro entre organizaciones y procesos de comunicación, de Colombia y Venezuela, como el Periódico Wayuunaiki, Radio Fe y Alegría, Fuerza de Mujeres Wayuu, para crear un espacio de diálogo y armonización alrededor de la apuesta por la comunicación propia, que reúna prácticas, saberes y costumbres enraizadas en los conocimientos ancestrales y la oralidad del pueblo wayuu; interactuando a través de la construcción de narrativas propias.

En 2013 nace la Red de Comunicaciones del Pueblo Wayuu Putchimaajana, y entre sus apuestas comunicativas, la Escuela de Comunicación del Pueblo wayuu, que más adelante llevaría el nombre de Jarariyu Farias Montiel, en homenaje a una de las comunicadoras reconocida como la impulsadora de la comunicación propia a través de la imprenta y miembro fundador de la Red de Comunicaciones.

Luego de dos ciclos de formación de la Escuela de Comunicación Wayuu Jayariyu Farias Montiel, donde se graduaron alrededor de 44 escuelantes, en diferentes énfasis: escritura, radio, audiovisual, en el marco de implementación de la PPCPI y con el apoyo del Ministerio de Cultura, UNESCO y otras ONG´s, se logra diseñar y poner en marcha nuevos proyectos de formación que permitieron a los escuelantes egresados afianzar conocimientos técnicos en producción de contenidos audiovisuales como parte del proceso de formación que orienta la Escuela en el territorio wayuu.

En el 2020, gracias al convenio suscrito entre Yanama y el Programa Inclusión para la Paz de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), implementado por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), se da inicio al Primer Taller de Fortalecimiento y Profundización en el desarrollo de contenidos audiovisuales.

Esta iniciativa en la que participaron más de 20 jóvenes wayuu de Colombia y Venezuela, tuvo como producto final el documental coral “Nalatirakaa Wayuu Sütpünaa Wanülüü - Vivencias Wayuu en tiempos de Pandemia”, que permitió propiciar la circulación del contenido producido desde las comunidades indígenas y por realizadores audiovisuales wayuu.

Uno de los grandes retos de la Escuela de Comunicación para el desarrollo de este proceso de formación audiovisual estuvo en la complicada situación que se presentó a nivel mundial a causa de la pandemia COVID-19 lo que originó que se cambiara la estructura operativa del taller, la implementación del proceso formativo, que iba desde la identificación de personajes y entrevistas, hasta la escritura del guion audiovisual, la producción y la posproducción de los videos.

Asimismo, el aislamiento obligatorio durante los primeros meses del proyecto fue un obstáculo a la hora de realizar los encuentros entre estudiantes y talleristas; fue todo un reto adaptarse a las nuevas tecnologías y al limitado acceso que tienen las comunidades a la señal de internet, lo que restringía la comunicación en los talleres de la Escuela de Comunicaciones, pero se logró trasmitir el mensaje con toda la realidad que vive el pueblo wayuu, además de los desafíos tecnológico.

“Para poder implementar el componente de formación que tiene la PPCPI se hace necesario las herramientas básicas en equipos y especialmente de accesibilidad, divulgación y circulación de contenidos propios de los pueblos indígenas; con el apoyo del Ministerio de Cultura se logró establecer una alianza con la OIM y USAID que nos permitió avanzar, profundizar conocimientos importantes para la construcción de narrativas propias audiovisuales, contar nuestras historias, realidades, fortalecer nuestros propios procesos desde la comunicación”, dice Nat Nat.

De esta manera, este proyecto contribuyó al proceso de formación orientado desde la Red de Comunicaciones del Pueblo Wayuu, así como los y las beneficiaras se convirtieron en replicadores del conocimiento técnico adquirido, permitiendo llevar a las comunidades los contenidos generados en el proceso de formación desde y para sus territorios.

“El comunicador wayuu debe ser integral, debe reconocer los aspectos culturales para fortalecerlos. Y desde la Escuela de Comunicaciones propiciamos esto. La Escuela ha posibilitado a los jóvenes no sólo conocer los aspectos técnicos , sino también que conozcan lo que es el ser Wayuu. Debe conocer la historia y, saber-conocer el territorio,” comenta.

Nat Nat Iguarán es una lideresa integral que reconoce que los proyectos de comunicación están ligados a la comunidad y están basados en la convicción y entrega de las y los comunicadores que hacen parte de ellos. La Escuela está fundamentada en promover que cada participante pueda transformarse y transformar sus comunidades en territorios de paz y de oportunidades.

Nat Nat Iguarán Fajardo, wayuu de eirükü Ipuana, es miembro de la Organización Indígena de La Guajira, Yanama, gestora del Programa de Comunicación Propia Aapirawa y delegada en la Comisión Nacional de comunicación para los Pueblos Indígenas CONCIP. Desde su trayectoria organizativa y política ha aportado a la construcción e implementación de la política Pública de Comunicación desde y para los Pueblos Indígenas, en el ámbito regional y nacional.

La Organización Indígena de La Guajira Yanama es una de las organizaciones en la región con mayor experiencia en la defensa y fortalecimiento de la Educación Propia, lo que le ha permitido desarrollar propuestas y proyectos encaminados a restablecer los derechos fundamentales de los wayuu en sus propios territorios.

Yanama nace en el año de 1975 como una estrategia de preservación de la cultura Wayuu, con el objetivo de mantener el sentido de la identidad como pueblo indígena, promoviendo la educación, el wayuunaiki, las tradiciones y las costumbres como mecanismo de continuidad histórica de la Nación Wayuu.

Es así como en el año 2007, se crea el Programa de Comunicación Propia Aapirawa, desarrollando diferentes acciones en formación, creación de contenido y registro audiovisual de todos los procesos en donde Yanama logra incidir en el restablecimiento de los derechos territoriales y culturales en La Guajira y a nivel nacional, uniéndose Yanama a la construcción de lo que es hoy la Política Publica de Comunicación de y para los Pueblos Indígenas PPCPI y al Plan Nacional Unificado de TV Indígena; la cual busca fortalecer los espacios de comunicación cultural e intercultural, exigir una acción que garantice la conservación, protección y preservación del patrimonio cultural, material, inmaterial e icónico de los pueblos indígenas en Colombia.

En 2010 se realiza la Primera Mesa de Comunicación Wayuu, en el Resguardo de Provincial, Barrancas, donde se propicia un encuentro entre organizaciones y procesos de comunicación, de Colombia y Venezuela, como el Periódico Wayuunaiki, Radio Fe y Alegría, Fuerza de Mujeres Wayuu, para crear un espacio de diálogo y armonización alrededor de la apuesta por la comunicación propia, que reúna prácticas, saberes y costumbres enraizadas en los conocimientos ancestrales y la oralidad del pueblo wayuu; interactuando a través de la construcción de narrativas propias.

En 2013 nace la Red de Comunicaciones del Pueblo Wayuu Putchimaajana, y entre sus apuestas comunicativas, la Escuela de Comunicación del Pueblo wayuu, que más adelante llevaría el nombre de Jarariyu Farias Montiel, en homenaje a una de las comunicadoras reconocida como la impulsadora de la comunicación propia a través de la imprenta y miembro fundador de la Red de Comunicaciones.

Luego de dos ciclos de formación de la Escuela de Comunicación Wayuu Jayariyu Farias Montiel, donde se graduaron alrededor de 44 escuelantes, en diferentes énfasis: escritura, radio, audiovisual, en el marco de implementación de la PPCPI y con el apoyo del Ministerio de Cultura, UNESCO y otras ONG´s, se logra diseñar y poner en marcha nuevos proyectos de formación que permitieron a los escuelantes egresados afianzar conocimientos técnicos en producción de contenidos audiovisuales como parte del proceso de formación que orienta la Escuela en el territorio wayuu.

En el 2020, gracias al convenio suscrito entre Yanama y el Programa Inclusión para la Paz de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), implementado por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), se da inicio al Primer Taller de Fortalecimiento y Profundización en el desarrollo de contenidos audiovisuales.

Esta iniciativa en la que participaron más de 20 jóvenes wayuu de Colombia y Venezuela, tuvo como producto final el documental coral “Nalatirakaa Wayuu Sütpünaa Wanülüü - Vivencias Wayuu en tiempos de Pandemia”, que permitió propiciar la circulación del contenido producido desde las comunidades indígenas y por realizadores audiovisuales wayuu.

Uno de los grandes retos de la Escuela de Comunicación para el desarrollo de este proceso de formación audiovisual estuvo en la complicada situación que se presentó a nivel mundial a causa de la pandemia COVID-19 lo que originó que se cambiara la estructura operativa del taller, la implementación del proceso formativo, que iba desde la identificación de personajes y entrevistas, hasta la escritura del guion audiovisual, la producción y la posproducción de los videos.

Asimismo, el aislamiento obligatorio durante los primeros meses del proyecto fue un obstáculo a la hora de realizar los encuentros entre estudiantes y talleristas; fue todo un reto adaptarse a las nuevas tecnologías y al limitado acceso que tienen las comunidades a la señal de internet, lo que restringía la comunicación en los talleres de la Escuela de Comunicaciones, pero se logró trasmitir el mensaje con toda la realidad que vive el pueblo wayuu, además de los desafíos tecnológico.

“Para poder implementar el componente de formación que tiene la PPCPI se hace necesario las herramientas básicas en equipos y especialmente de accesibilidad, divulgación y circulación de contenidos propios de los pueblos indígenas; con el apoyo del Ministerio de Cultura se logró establecer una alianza con la OIM y USAID que nos permitió avanzar, profundizar conocimientos importantes para la construcción de narrativas propias audiovisuales, contar nuestras historias, realidades, fortalecer nuestros propios procesos desde la comunicación”, dice Nat Nat.

De esta manera, este proyecto contribuyó al proceso de formación orientado desde la Red de Comunicaciones del Pueblo Wayuu, así como los y las beneficiaras se convirtieron en replicadores del conocimiento técnico adquirido, permitiendo llevar a las comunidades los contenidos generados en el proceso de formación desde y para sus territorios.

“El comunicador wayuu debe ser integral, debe reconocer los aspectos culturales para fortalecerlos. Y desde la Escuela de Comunicaciones propiciamos esto. La Escuela ha posibilitado a los jóvenes no sólo conocer los aspectos técnicos , sino también que conozcan lo que es el ser Wayuu. Debe conocer la historia y, saber-conocer el territorio,” comenta.

Nat Nat Iguarán es una lideresa integral que reconoce que los proyectos de comunicación están ligados a la comunidad y están basados en la convicción y entrega de las y los comunicadores que hacen parte de ellos. La Escuela está fundamentada en promover que cada participante pueda transformarse y transformar sus comunidades en territorios de paz y de oportunidades.