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Después de terminar algunos de sus platos, Scott Overland hizo un descubrimiento que no esperaron en todas las vacaciones: “esperábamos traer de vuelta una camisa o un pocillo, pero no esperábamos traer algo así con nosotros”, comenta.
Mientras masticaba, Scott sintió un objeto duro y crujiente en su boca. En un inicio, la familia pensó que era un pedazo de dulce. Al analizarla detenidamente, los turistas se percataron que la piedra era perfectamente redonda y encajaba por completo con la ostra. “Era de un color brillante lavanda, casi morado”, afirma el padre de familia.
“No habíamos escuchado de ostras produciendo perlas, entonces no sabíamos que era una posibilidad”, confiesa. Comenzaron a buscar en Google, para conseguir información sobre lo que podría ser el elemento que tenían en las manos. Así, descubrieron que era una perla morada.
Según un artículo de New York Post, la probabilidad de encontrar perlas en las ostras suele ser profundamente reducida. Solo una ostra entre 10,000 tiene las posibilidades de albergar una perla. Además, algunas ostras tardan hasta 10 años en formar una, y la mayoría de estas suelen dañarse, por lo que no tienen ningún tipo de valor en el mercado. El color de las perlas que aparecen en las ostras suele ser verde, plateado o dorado oscuro, por lo que la perla morada suele ser todavía más extraña. De hecho, la perla que encontró Scott Overland estaba en perfectas condiciones, por lo que tenía un alto valor en el mercado.
Si bien algunos resultados de búsqueda arrojaban la idea que podría estar entre 600 y 1.600 dólares, la familia tenía presente que el valor de las perlas podía variar dependiendo de su tamaño y forma. Por ello, decidieron consultar con los expertos del Gemological Institute of America, un instituto especializado en investigar y proteger la compra y venta de joyería y piedras preciosas. En ese momento, su alegría fue mayor, porque el experto les comentó que el valor de la ostra era de 4 mil dólares. Esto significan 18 millones de pesos colombianos.
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“No esperábamos traer una perla con nosotros”, comenta. Y afirma que sus dos hijos estaban bastante emocionados, por lo que, en el corto plazo decidieron no vender la perla hasta que la familia comenzara a necesitar el dinero. Cabe resaltar que es bastante extraño encontrar perlas en las otras, pues, en su gran mayoría, las perlas son cultivadas en criaderos especializados.
Las ostras suelen reservarse para banquetes de alto estatus, debido a su precio y al ser el molusco más apreciado. Además, debido a su valor energético y a su riqueza en ácidos grasos, suele ser considerado un alimento altamente nutritivo. Otros de sus beneficios son el prevenir la presencia de anemias y su capacidad para mantener sanos los huesos.