Universidad de Cambridge investigará sus vínculos con la esclavitud
Uno de los centros de estudios de la institución pretende entender la relación de académicos de la universidad con la política racial de la Gran Bretaña imperial.
Agencia Anadolu
El Centro de Estudios Africanos de la Universidad de Cambridge, una de los centros académicos más prestigiosos del Reino Unido, investigará sobre los beneficios que pudo tener la universidad por el mercado esclavista y otras prácticas de trabajo forzado en la época colonial del país.
También investigará cómo las becas que ofrecía el centro educativo pudieron haber reforzado, validado o quizás desafiado el pensamiento racista de ese momento.
"Es justo que Cambridge investigue su propia historia y beneficio del trabajo forzado. No podemos cambiar el pasado, pero tampoco debemos tratar de escondernos de él", dijo Stephen John Toope, vicerrector de la Universidad. Además, agregó que el proceso debe ayudar a la Universidad "a reconocer su papel durante esa fase oscura de la historia de la humanidad".
Esta investigación, la primera de su tipo en el Reino Unido y Gales, estudiarán los vínculos históricos con la trata de esclavos y explorarán si la Universidad debe pagar reparaciones. No obstante, no es claro lo que se pueda descubrir, pero es razonable asumir que, como muchas grandes instituciones británicas durante la era colonial, la Universidad se habría beneficiado directa o indirectamente del mercado esclavista.
"Los beneficios pueden haber sido financieros o a través de otros obsequios. Pero el panel está igualmente interesado en la forma en que académicos de la Universidad ayudó a formar la opinión pública y política, apoyando, reforzando y a veces refutando las actitudes raciales que son repugnantes en el siglo XXI." explicó Toope.
La esclavitud fue una práctica común a lo largo de la era colonial del Reino Unido que se extendió desde el siglo XVI hasta finales del siglo XVIII durante la edad de oro del Imperio Británico, que en un momento gobernó a un cuarto de la población mundial.
La ley de abolición de la Esclavitud de 1833 liberó formalmente a 800.000 africanos que habían sido propiedad legal de ciudadanos británicos.
El Centro de Estudios Africanos de la Universidad de Cambridge, una de los centros académicos más prestigiosos del Reino Unido, investigará sobre los beneficios que pudo tener la universidad por el mercado esclavista y otras prácticas de trabajo forzado en la época colonial del país.
También investigará cómo las becas que ofrecía el centro educativo pudieron haber reforzado, validado o quizás desafiado el pensamiento racista de ese momento.
"Es justo que Cambridge investigue su propia historia y beneficio del trabajo forzado. No podemos cambiar el pasado, pero tampoco debemos tratar de escondernos de él", dijo Stephen John Toope, vicerrector de la Universidad. Además, agregó que el proceso debe ayudar a la Universidad "a reconocer su papel durante esa fase oscura de la historia de la humanidad".
Esta investigación, la primera de su tipo en el Reino Unido y Gales, estudiarán los vínculos históricos con la trata de esclavos y explorarán si la Universidad debe pagar reparaciones. No obstante, no es claro lo que se pueda descubrir, pero es razonable asumir que, como muchas grandes instituciones británicas durante la era colonial, la Universidad se habría beneficiado directa o indirectamente del mercado esclavista.
"Los beneficios pueden haber sido financieros o a través de otros obsequios. Pero el panel está igualmente interesado en la forma en que académicos de la Universidad ayudó a formar la opinión pública y política, apoyando, reforzando y a veces refutando las actitudes raciales que son repugnantes en el siglo XXI." explicó Toope.
La esclavitud fue una práctica común a lo largo de la era colonial del Reino Unido que se extendió desde el siglo XVI hasta finales del siglo XVIII durante la edad de oro del Imperio Británico, que en un momento gobernó a un cuarto de la población mundial.
La ley de abolición de la Esclavitud de 1833 liberó formalmente a 800.000 africanos que habían sido propiedad legal de ciudadanos británicos.