Así va la delimitación del páramo de Santurbán en un municipio minero de Santander

Después de cuatro años de múltiples reuniones, California, un municipio minero de Santander que conforma el Páramo de Santurbán, logró los primeros acuerdos de la delimitación de este ecosistema, que abastece de agua a al menos 2,5 millones de personas de 20 municipios, entre ellos Bucaramanga y Cúcuta.

Después de cuatro años de múltiples reuniones, California, un municipio minero de Santander que conforma el Páramo de Santurbán, logró los primeros acuerdos de la delimitación de este ecosistema, que abastece de agua a al menos 2,5 millones de personas de 20 municipios, entre ellos Bucaramanga y Cúcuta.

Tras tres días de reuniones (21, 22 y 23 de junio), las comunidades, autoridades locales y nacionales acordaron tres de los seis puntos que se deben tener en cuenta en este proceso que permite conocer cuál será la nueva área del páramo, y las actividades que se podrán realizar allí, y de esta manera conservar el ecosistema. (Lea: Deforestación en tierras indígenas provocó emisión de 96 millones de toneladas de CO2)

Respecto al primer punto (que denominaron ineludible), se decidió que el área de páramo en California quedará tal y como ya estaba establecida en la Resolución 2090 de 2014. Es decir, que no habrá ningún cambio en ese sentido.

“Logramos un consenso frente al primer ineludible que tiene que ver con la delimitación del área de páramo. Allí no se habilitará minería. Esto ya es una prohibición legal, pero había una expectativa de algunas comunidades de correr un poco la línea para realizar esta actividad y finalmente se logró un consenso de que no se hará minería en el área”, explicó Sandra Yolima Guerra Castañeda, asesora del Ministerio de Ambiente.

La actual delimitación del Páramo de Santurbán fue demandada por un grupo de ciudadanos, quienes consideraron que en 2014 no hubo suficiente participación de las comunidades en el proceso que lideró el Ministerio de Ambiente. (Lea: Lo que debe saber sobre el tratado que busca eliminar la contaminación plástica)

En 2017, la Corte Constitucional ordenó realizar una nueva delimitación. En el documento citó a la Asociación Interamericana para la Defensa del Ambiente (AIDA), que indicaba que “la delimitación, tal como fue realizada, violó los derechos a la participación y acceso a información, debido a que la comunidad del área metropolitana de Bucaramanga no fue convocada apropiadamente, ni sus opiniones e insumos fueron tenidos en cuenta”.

En la sentencia T 361, la corte le ordenó al MinAmbiente diseñar o crear un programa de reconvención o sustitución de labores, pues en los municipios de Vetas, California y Suratá, el Instituto Alexander von Humboldt, encargado de realizar los estudios para sustentar la delimitación, registró que la minería de oro es la principal ocupación en esas ciudades.

“La principal problemática de California es el desarrollo de la minería en condiciones de ilegalidad, y eso genera contaminación, especialmente en las fuentes hídricas, que terminan yendo al afluente del río Suratá, que es el que suministra agua al Acueducto Metropolitano de Bucaramanga”, explica Fabio Maldonado, director del Gran Pacto Social de California, una entidad conformada por 39 líderes del municipio que han estado acompañando el proceso de delimitación. (Lea: Científicos, preocupados por una enfermedad que está afectando a las orcas)

Para darle una posible solución a esta problemática, las autoridades se comprometieron a crear una comisión encargada de diseñar planes, programas y proyectos para mejorar o sustituir las actividades que puedan afectar el ecosistema, luego de conversar con los dueños de los predios del páramo en los que hay actividades económicas de agricultura, ganadería y minería.

En el caso de los mineros que desarrollen su actividad en área no permitida, el gobierno deberá ofrecerles una alternativa que por el momento no es clara. En este proceso también deberá participar el Ministerio de Minas y Energía, y el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, tanto en la fase de formulación como en la de ejecución, de acuerdo con la Corte.

“Se le debe dar solución a la minería desde la formalización de la actividad, porque es la única manera de controlarla. Eso se puede resolver con la aplicación de mejores tecnologías y la inyección de recursos”, agrega Maldonado.

El último punto que se acordó tiene que ver con los parámetros de protección de las fuentes hídricas que se encuentran en Santurbán, que hace referencia al ineludible 4. Durante el encuentro, las comunidades aceptaron la propuesta del Ministerio de Ambiente, pues dicen que, “como el Gobierno está buscando hacer todo el ordenamiento alrededor del agua, entonces en el tema de la protección no hay discusión”. (Lea: La presión humana en Colombia hizo que estos animales se volvieran más nocturnos)

A finales de junio, la comunidad y las autoridades se volverán a reunir en California para definir los tres puntos restantes: financiación de los proyectos que se propongan, fiscalización y coordinación para monitorear que los acuerdos se cumplan.

Aunque la nueva delimitación debía estar lista en 2018, este proceso ha tenido diferentes dificultades. Una de ellas fue la pandemia que imposibilitó la realización de las reuniones de concertación.

En esta nuevo proceso, además de los 30 municipios que conforman el Páramo de Santurbán, deben participar 10 más de las áreas metropolitanas de Bucaramanga y Cúcuta, pues son beneficiarios del agua que provee este ecosistema. Aunque ha habido avances, de los 40 municipios que hacen parte del proceso, solo siete han logrado la delimitación.