El desafío de la CREG: nombrar los comisionados en propiedad

Desde el sector eléctrico, gremios y autoridades del país se ha insistido en la necesidad de que la Comisión de Regulación de Energía y Gas, CREG, esté en capacidad de atender sus funciones de forma completa y correcta.

De un lado están los agentes del sector solicitando las definiciones técnicas que siempre han tenido por parte de esta entidad, del otro, hay poca capacidad de respuesta. El Gobierno no ha nombrado los comisionados en propiedad, como indica la Ley, cuestionando los requisitos de experiencia necesarios para ser experto comisionado. Con esa incertidumbre, el País no ha contado con las herramientas para enfrentar problemas del sector que tendrían solución pronta con una regulación oportuna.

(Lea: Educación ambiental para la conservación y restauración ambiental en Colombia)

La CREG es un exitoso caso de institucionalidad en Colombia, gracias a su gestión durante los últimos 30 años se ha construido un sector sólido, con aportes importantes en la expansión del parque generador, la regulación de participación de la demanda, el desarrollo de metodologías tarifarias, entre otros. Por ello los llamados constantes para que pueda obrar como sabe hacerlo.

En febrero de este año el Tribunal Administrativo de Cundinamarca le ordenó al presidente nombrar a los comisionados en propiedad en un plazo de 30 días, y a principios de mayo fue el Consejo de Estado quien ratificó la sentencia anterior e instó al Presidente a cumplir de manera inmediata con las designaciones. El Gobierno ha considerado suficiente nombrar comisionados en encargo. Durante el último año la CREG ha vivido varios períodos sin el quorum necesario y sin la visión de largo plazo de la situación para tomar decisiones estratégicas, ya que los encargos duran máximo seis meses. Sin continuidad ni estabilidad, es imposible avanzar por el camino correcto. Entre tanto el Ministerio de Minas y Energía expidió el 2 de julio la Resolución 40225 en la que esbozan unos lineamientos tendientes a introducir unos cambios regulatorios, que sólo la CREG puede determinar y que buscan, según su texto, la adopción de “medidas para reducción de tarifas a los usuarios regulados del servicio de energía eléctrica”.

Las reglas para el nombramiento de los comisionados en propiedad han sido claras desde la Ley 143 de 1994, cada gobierno de turno las ha cumplido y ha respetado su estructura. La forma de nombrar y la alternancia en los periodos, garantiza a cada Gobierno la designación de parte de este cuerpo, pero a su vez garantiza la independencia y estabilidad necesaria que requiere la regulación técnica. El país cuenta con los profesionales calificados para cumplir el perfil que requiere la entidad, y los integrantes del sector, exministros y expertos, han hecho innumerables llamados al Gobierno para que la estabilice con los nombramientos definitivos.

La CREG le ha dado estabilidad al sector eléctrico desde su implementación gracias a su independencia y claridad en las reglas que la rigen, si el Gobierno cumple su parte, la entidad funcionará y hará el trabajo que le corresponde para superar los retos que tiene el sector actualmente.

Desde el sector eléctrico, gremios y autoridades del país se ha insistido en la necesidad de que la Comisión de Regulación de Energía y Gas, CREG, esté en capacidad de atender sus funciones de forma completa y correcta.

De un lado están los agentes del sector solicitando las definiciones técnicas que siempre han tenido por parte de esta entidad, del otro, hay poca capacidad de respuesta. El Gobierno no ha nombrado los comisionados en propiedad, como indica la Ley, cuestionando los requisitos de experiencia necesarios para ser experto comisionado. Con esa incertidumbre, el País no ha contado con las herramientas para enfrentar problemas del sector que tendrían solución pronta con una regulación oportuna.

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La CREG es un exitoso caso de institucionalidad en Colombia, gracias a su gestión durante los últimos 30 años se ha construido un sector sólido, con aportes importantes en la expansión del parque generador, la regulación de participación de la demanda, el desarrollo de metodologías tarifarias, entre otros. Por ello los llamados constantes para que pueda obrar como sabe hacerlo.

En febrero de este año el Tribunal Administrativo de Cundinamarca le ordenó al presidente nombrar a los comisionados en propiedad en un plazo de 30 días, y a principios de mayo fue el Consejo de Estado quien ratificó la sentencia anterior e instó al Presidente a cumplir de manera inmediata con las designaciones. El Gobierno ha considerado suficiente nombrar comisionados en encargo. Durante el último año la CREG ha vivido varios períodos sin el quorum necesario y sin la visión de largo plazo de la situación para tomar decisiones estratégicas, ya que los encargos duran máximo seis meses. Sin continuidad ni estabilidad, es imposible avanzar por el camino correcto. Entre tanto el Ministerio de Minas y Energía expidió el 2 de julio la Resolución 40225 en la que esbozan unos lineamientos tendientes a introducir unos cambios regulatorios, que sólo la CREG puede determinar y que buscan, según su texto, la adopción de “medidas para reducción de tarifas a los usuarios regulados del servicio de energía eléctrica”.

Las reglas para el nombramiento de los comisionados en propiedad han sido claras desde la Ley 143 de 1994, cada gobierno de turno las ha cumplido y ha respetado su estructura. La forma de nombrar y la alternancia en los periodos, garantiza a cada Gobierno la designación de parte de este cuerpo, pero a su vez garantiza la independencia y estabilidad necesaria que requiere la regulación técnica. El país cuenta con los profesionales calificados para cumplir el perfil que requiere la entidad, y los integrantes del sector, exministros y expertos, han hecho innumerables llamados al Gobierno para que la estabilice con los nombramientos definitivos.

La CREG le ha dado estabilidad al sector eléctrico desde su implementación gracias a su independencia y claridad en las reglas que la rigen, si el Gobierno cumple su parte, la entidad funcionará y hará el trabajo que le corresponde para superar los retos que tiene el sector actualmente.