El panorama de la seguridad hídrica en la Región Central

El próximo 1° de diciembre se llevará a cabo el evento Seguridad Hídrica en la Región Central: Agua para la vida en donde se darán a conocer los productos y apuestas del plan de seguridad del recurso hídrico en la RAP-E Región Central, compuesta por Bogotá, Cundinamarca, Boyacá, Meta, Tolima y Huila.

En septiembre del 2014, Bogotá, Cundinamarca, Boyacá, Tolima y Meta, conscientes de la importancia vital del agua, se asociaron en torno a unos objetivos comunes. Cinco años después, el departamento del Huila se unió a la Región Administrativa y de Planeación Especial (RAP-E) Región Central, para unirse a los esfuerzos de sustentabilidad ecosistémica y manejo de riesgos; seguridad alimentaria y desarrollo rural; competitividad y proyección internacional; infraestructura de transporte, logística y servicios públicos; y gobernanza y buen gobierno, que han sido los ejes de trabajo desde su inicio.

Dentro del trabajo que se ha desarrollado a lo largo de este tiempo, los integrantes de la Región Central identificaron que, la región Andina —donde se ubican todos los departamentos integrantes a excepción del Meta que hace parte de la Orinoquía — han sido las zonas del país en donde se ha reducido en mayor medida la disponibilidad de agua. Un panorama que se agravará si se consideran los efectos que el cambio climático tendrá en el país como la afectación sobre los regímenes de lluvia y las temporadas de sequía, entre otros.

Si no se generan cambios que promuevan el uso eficiente del recurso hídrico en los sectores productivos y doméstico, la reducción de la disponibilidad del agua podría generar “afectaciones a los sistemas humanos y naturales, desencadenando conflictos por su uso, con consecuencias sociales y económicas”, según el Departamento Nacional de Planeación (DNP).

Esos cambios son aún más urgentes si se tiene en cuenta que se estima que la temperatura en la región aumenta 0.031°C cada año. Este incremento, significa que en los próximos 30 años la Región Central aumentará su temperatura un grado Celsius, lo que llevaría a que en las próximas tres décadas exista la probabilidad de que la oferta hídrica se reduzca entre un 10% y 23%.

Si además del aumento en la temperatura, consideramos las dinámicas poblacionales, el panorama plantea un futuro aún más crítico. Según cifras del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), en la Región Central habitan más de 15 millones de personas. En los próximos diez años esta aumentará en dos millones más y para el 2050 serán casi 20 millones de habitantes. Este aumento también supone unos retos como la provisión de agua y la contaminación de esta, entre otros.

Conscientes de todos estos retos, los integrantes de la Región Central, en cooperación con el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), construyeron el Plan de Seguridad Hídrica (PSH) que busca, a través de una mirada holística e integral, entender los desafíos territoriales del agua. Son cuatro los objetivos que se buscan alcanzar con este plan. En primer lugar, una disponibilidad de agua que sea adecuada, en cantidad y calidad, para el abastecimiento humano, los usos de subsistencia, la protección de los ecosistemas y la producción.

“La capacidad —institucional, financiera y de infraestructura— para acceder a y aprovechar los recursos hídricos de forma sustentable y manejar las interrelaciones y externalidades entre los diferentes usos y sectores, de manera coherente: nexo entre agua, energía, alimentación y salud”, es el segundo objetivo. El tercero consiste en tener un nivel aceptable de riesgos (asociados a los recursos hídricos) para la población, el medio ambiente y la economía. Y, por último, tener ecosistemas hídricos saludables, resilientes y protegidos, constituye el último objetivo.

Para entender mejor los desafíos a los que se enfrenta la región, así como conocer el estado actual de las 78 zonas hidrográficas que se encuentran en la Región Central, la RAP-E diseño un índice de seguridad hídrica que “permita contar con un referente para el seguimiento del estado de la seguridad hídrica y de los cambios en el corto, mediano y largo plazo”. Para la construcción de este índice se tuvieron en cuenta cinco dimensiones: (i) las circunstancias relacionadas con la gobernanza; (ii) el estado del recurso hídrico; (iii) la salud de sus ecosistemas asociados; (iv) la situación frente a la gestión del riesgo y resiliencia; y (v) su relación con factores socioeconómicos y productivos.

Si bien con cada uno de estos componentes se obtuvieron resultados independientes, la integración de los cinco factores en el índice, permitió observar que 12 de las 78 cuencas de la Región Central, que proveen agua a más de 14 millones de personas, se encuentran en estado crítico. Además, se laboró el mapa ELSA para la seguridad hídrica en la región central de Colombia que muestra, como recomendación, las áreas que deberían priorizarse para la protección, gestión y restauración, con el fin de lograr la seguridad hídrica de forma más eficaz.

Para conocer los productos y apuestas del Plan de Seguridad Hídrica de la Región Central RAP-E, se llevará a cabo el evento Seguridad Hídrica en la Región Central: Agua para la vida, que se celebrará el próximo miércoles 1° de diciembre de 2:00 p.m. a 4:00 p.m. y que contará con la transmisión por Facebook Live de la campaña BIBO y de El Espectador.

En el evento, donde también se darán a conocer las conclusiones del análisis multidimensional de la seguridad hídrica regional y sus desafíos, participarán Carlos Correa, ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible; Claudia López, alcaldesa de Bogotá; Fernando Flórez Espinoza, director de la RAP-E Región Central; y Sara Ferrer, Representante residente del Programa de las Naciones Unidas para el desarrollo PNUD.

Además, se llevará a cabo un panel sobre la responsabilidad que los distintos actores y sectores tienen con la seguridad hídrica. Este será moderado por la exministra de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial, Cecilia Rodriguez, y contará con la participación de Brigitte Batiste, rectora de la Universidad EAN; Karen Sereno, de la Corporación Ambiental Caminando el Territorio; Ernesto Guhl, ex decano de ingeniería y ex vicerrector de la Universidad de los Andes; Olga Lucia Patín, Procuradora Delegada para Asuntos Ambientales y Agrarios; y Luis Enrique Dussan Lopez, Gobernador del Huila.

Encuentre aquí la agenda del evento:

El próximo 1° de diciembre se llevará a cabo el evento Seguridad Hídrica en la Región Central: Agua para la vida en donde se darán a conocer los productos y apuestas del plan de seguridad del recurso hídrico en la RAP-E Región Central, compuesta por Bogotá, Cundinamarca, Boyacá, Meta, Tolima y Huila.

En septiembre del 2014, Bogotá, Cundinamarca, Boyacá, Tolima y Meta, conscientes de la importancia vital del agua, se asociaron en torno a unos objetivos comunes. Cinco años después, el departamento del Huila se unió a la Región Administrativa y de Planeación Especial (RAP-E) Región Central, para unirse a los esfuerzos de sustentabilidad ecosistémica y manejo de riesgos; seguridad alimentaria y desarrollo rural; competitividad y proyección internacional; infraestructura de transporte, logística y servicios públicos; y gobernanza y buen gobierno, que han sido los ejes de trabajo desde su inicio.

Dentro del trabajo que se ha desarrollado a lo largo de este tiempo, los integrantes de la Región Central identificaron que, la región Andina —donde se ubican todos los departamentos integrantes a excepción del Meta que hace parte de la Orinoquía — han sido las zonas del país en donde se ha reducido en mayor medida la disponibilidad de agua. Un panorama que se agravará si se consideran los efectos que el cambio climático tendrá en el país como la afectación sobre los regímenes de lluvia y las temporadas de sequía, entre otros.

Si no se generan cambios que promuevan el uso eficiente del recurso hídrico en los sectores productivos y doméstico, la reducción de la disponibilidad del agua podría generar “afectaciones a los sistemas humanos y naturales, desencadenando conflictos por su uso, con consecuencias sociales y económicas”, según el Departamento Nacional de Planeación (DNP).

Esos cambios son aún más urgentes si se tiene en cuenta que se estima que la temperatura en la región aumenta 0.031°C cada año. Este incremento, significa que en los próximos 30 años la Región Central aumentará su temperatura un grado Celsius, lo que llevaría a que en las próximas tres décadas exista la probabilidad de que la oferta hídrica se reduzca entre un 10% y 23%.

Si además del aumento en la temperatura, consideramos las dinámicas poblacionales, el panorama plantea un futuro aún más crítico. Según cifras del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), en la Región Central habitan más de 15 millones de personas. En los próximos diez años esta aumentará en dos millones más y para el 2050 serán casi 20 millones de habitantes. Este aumento también supone unos retos como la provisión de agua y la contaminación de esta, entre otros.

Conscientes de todos estos retos, los integrantes de la Región Central, en cooperación con el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), construyeron el Plan de Seguridad Hídrica (PSH) que busca, a través de una mirada holística e integral, entender los desafíos territoriales del agua. Son cuatro los objetivos que se buscan alcanzar con este plan. En primer lugar, una disponibilidad de agua que sea adecuada, en cantidad y calidad, para el abastecimiento humano, los usos de subsistencia, la protección de los ecosistemas y la producción.

“La capacidad —institucional, financiera y de infraestructura— para acceder a y aprovechar los recursos hídricos de forma sustentable y manejar las interrelaciones y externalidades entre los diferentes usos y sectores, de manera coherente: nexo entre agua, energía, alimentación y salud”, es el segundo objetivo. El tercero consiste en tener un nivel aceptable de riesgos (asociados a los recursos hídricos) para la población, el medio ambiente y la economía. Y, por último, tener ecosistemas hídricos saludables, resilientes y protegidos, constituye el último objetivo.

Para entender mejor los desafíos a los que se enfrenta la región, así como conocer el estado actual de las 78 zonas hidrográficas que se encuentran en la Región Central, la RAP-E diseño un índice de seguridad hídrica que “permita contar con un referente para el seguimiento del estado de la seguridad hídrica y de los cambios en el corto, mediano y largo plazo”. Para la construcción de este índice se tuvieron en cuenta cinco dimensiones: (i) las circunstancias relacionadas con la gobernanza; (ii) el estado del recurso hídrico; (iii) la salud de sus ecosistemas asociados; (iv) la situación frente a la gestión del riesgo y resiliencia; y (v) su relación con factores socioeconómicos y productivos.

Si bien con cada uno de estos componentes se obtuvieron resultados independientes, la integración de los cinco factores en el índice, permitió observar que 12 de las 78 cuencas de la Región Central, que proveen agua a más de 14 millones de personas, se encuentran en estado crítico. Además, se laboró el mapa ELSA para la seguridad hídrica en la región central de Colombia que muestra, como recomendación, las áreas que deberían priorizarse para la protección, gestión y restauración, con el fin de lograr la seguridad hídrica de forma más eficaz.

Para conocer los productos y apuestas del Plan de Seguridad Hídrica de la Región Central RAP-E, se llevará a cabo el evento Seguridad Hídrica en la Región Central: Agua para la vida, que se celebrará el próximo miércoles 1° de diciembre de 2:00 p.m. a 4:00 p.m. y que contará con la transmisión por Facebook Live de la campaña BIBO y de El Espectador.

En el evento, donde también se darán a conocer las conclusiones del análisis multidimensional de la seguridad hídrica regional y sus desafíos, participarán Carlos Correa, ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible; Claudia López, alcaldesa de Bogotá; Fernando Flórez Espinoza, director de la RAP-E Región Central; y Sara Ferrer, Representante residente del Programa de las Naciones Unidas para el desarrollo PNUD.

Además, se llevará a cabo un panel sobre la responsabilidad que los distintos actores y sectores tienen con la seguridad hídrica. Este será moderado por la exministra de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial, Cecilia Rodriguez, y contará con la participación de Brigitte Batiste, rectora de la Universidad EAN; Karen Sereno, de la Corporación Ambiental Caminando el Territorio; Ernesto Guhl, ex decano de ingeniería y ex vicerrector de la Universidad de los Andes; Olga Lucia Patín, Procuradora Delegada para Asuntos Ambientales y Agrarios; y Luis Enrique Dussan Lopez, Gobernador del Huila.

Encuentre aquí la agenda del evento: