Sistemas Agroforestales en Caquetá, una iniciativa que llamó la atención de Noruega
Información institucional.
Fondo Colombia sostenible
Delegados del Parlamento Noruego visitaron el departamento de Caquetá con el objetivo de conocer las iniciativas ambientales y productivas de familias que formaron parte del proyecto “Castaño de Monte para la Conservación”, financiado por el Fondo Colombia Sostenible, con recursos de los gobiernos de Noruega, Suecia y Suiza, bajo la administración fiduciaria del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Este proyecto, implementado por Amazon Conservation Team (ACT) y que busca combatir la deforestación en la Amazonía colombiana, ha establecido de 170 hectáreas de sistemas agroforestales (SAF) con 17,000 árboles de castaño de monte, 19,000 palmas de asaí y 34,000 plantas de plátano.
El recorrido se desarrolló en el marco de una colaboración entre Noruega y Colombia centrada en promover proyectos que contribuyan a la sostenibilidad y la conservación ambiental. Los delegados noruegos, junto con representantes de la Misión de la ONU en Colombia, visitaron dos fincas que, además de implementar sistemas agroforestales para garantizar la soberanía alimentaria de las familias, también están contribuyendo a la recuperación de corredores de conectividad, la conservación de bosques bajo acuerdos de conservación y la promoción de iniciativas de generación de ingresos, incluida la meliponicultura. (Lea: ¿Quién puede financiar la restauración y la conservación de los ecosistemas?)
Javier Cárdenas, uno de los beneficiarios del proyecto, expresó su satisfacción con la implementación de un sistema agroforestal en su propiedad: “Contar con un sistema agroforestal en nuestra finca ha sido un proceso de aprendizaje, cambiar la idea de la ganadería es difícil, pero ahora con amor y muchas ganas estoy conservando nuestro territorio, que durante mucho tiempo fue degradado con los monocultivos y la ganadería extensiva; hoy, mediante estos procesos, estamos devolviéndole algo a nuestra tierra.”
El “Castaño de Monte” se ha convertido en un símbolo de esperanza para la región y representa el compromiso conjunto de Noruega y Colombia con la sostenibilidad y la conservación ambiental. Nils Martin Gunneng, embajador de Noruega en Colombia, expresó: “En la Embajada de Noruega en Colombia, tenemos dos ejes de trabajo: la Paz y la Reconciliación, y la lucha contra el cambio climático. Estoy seguro de que estos proyectos contribuyen a ambos, ya que son un ejemplo de cómo se puede vivir de manera sostenible en el bosque.”
Además de visitar las iniciativas productivas y ambientales en las fincas, la delegación tuvo la oportunidad de reunirse con el Grupo Asociativo de Productores por la Amazonia y el Buen Vivir - PROPLAB. Esta asociación, a la que pertenecen los beneficiarios del proyecto, ha logrado la comercialización de 318,499 kilos de productos, incluyendo plátano, limón, banano, naranja y castaño de monte, generando ingresos por un total de $568,000,000. (Lea: Impulsar la ciencia e innovación, la clave para que Colombia sea potencia en bioeconomía)
Deicy Quimbaya, representante legal de PROPLAB, expresó su gratitud y destacó el enfoque de conservación y el compromiso de la comunidad: “Estoy muy contenta de mostrar a uno de los donantes del proyecto cómo sus recursos han apoyado a 170 familias, donde se ha estado trabajando en sistemas agroforestales en un territorio donde la convicción de algunos es destruir, pero para nosotros es conservar y vivir del medio ambiente.”
Por su parte, Carolina Gil, directora del programa Noroeste Amazonas de Amazon Conservation Team, la ONG que implementó el proyecto, subrayó la importancia de la experiencia de vivir el proyecto en el terreno: “Creo que la mejor manera de mostrar los resultados de un proyecto, es vivir la experiencia, acercarse a las familias campesinas y permitirles compartir su experiencia. Esto tiene un efecto profundo en la comunidad, ya que los alienta a reflexionar sobre el impacto positivo en sus vidas y en el territorio que habitan”.
Además, la especialista ambiental de la Unidad Técnica coordinadora del Fondo Colombia Sostenible, Alejandra Sánchez, reafirmó la importancia para el Fondo en fortalecer las iniciativas en región amazónica. “Hemos apoyado 8 proyectos que nos ha permitido trabajar con más de 2000 personas, entre mujeres, jóvenes, campesinos y organizaciones y en general con distintos actores que nos ha permitido apoyar procesos de restauración en más de 1000 hectáreas y apoyar también procesos de reconversión sostenible en cerca de 980 hectáreas adicionales”.
Delegados del Parlamento Noruego visitaron el departamento de Caquetá con el objetivo de conocer las iniciativas ambientales y productivas de familias que formaron parte del proyecto “Castaño de Monte para la Conservación”, financiado por el Fondo Colombia Sostenible, con recursos de los gobiernos de Noruega, Suecia y Suiza, bajo la administración fiduciaria del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Este proyecto, implementado por Amazon Conservation Team (ACT) y que busca combatir la deforestación en la Amazonía colombiana, ha establecido de 170 hectáreas de sistemas agroforestales (SAF) con 17,000 árboles de castaño de monte, 19,000 palmas de asaí y 34,000 plantas de plátano.
El recorrido se desarrolló en el marco de una colaboración entre Noruega y Colombia centrada en promover proyectos que contribuyan a la sostenibilidad y la conservación ambiental. Los delegados noruegos, junto con representantes de la Misión de la ONU en Colombia, visitaron dos fincas que, además de implementar sistemas agroforestales para garantizar la soberanía alimentaria de las familias, también están contribuyendo a la recuperación de corredores de conectividad, la conservación de bosques bajo acuerdos de conservación y la promoción de iniciativas de generación de ingresos, incluida la meliponicultura. (Lea: ¿Quién puede financiar la restauración y la conservación de los ecosistemas?)
Javier Cárdenas, uno de los beneficiarios del proyecto, expresó su satisfacción con la implementación de un sistema agroforestal en su propiedad: “Contar con un sistema agroforestal en nuestra finca ha sido un proceso de aprendizaje, cambiar la idea de la ganadería es difícil, pero ahora con amor y muchas ganas estoy conservando nuestro territorio, que durante mucho tiempo fue degradado con los monocultivos y la ganadería extensiva; hoy, mediante estos procesos, estamos devolviéndole algo a nuestra tierra.”
El “Castaño de Monte” se ha convertido en un símbolo de esperanza para la región y representa el compromiso conjunto de Noruega y Colombia con la sostenibilidad y la conservación ambiental. Nils Martin Gunneng, embajador de Noruega en Colombia, expresó: “En la Embajada de Noruega en Colombia, tenemos dos ejes de trabajo: la Paz y la Reconciliación, y la lucha contra el cambio climático. Estoy seguro de que estos proyectos contribuyen a ambos, ya que son un ejemplo de cómo se puede vivir de manera sostenible en el bosque.”
Además de visitar las iniciativas productivas y ambientales en las fincas, la delegación tuvo la oportunidad de reunirse con el Grupo Asociativo de Productores por la Amazonia y el Buen Vivir - PROPLAB. Esta asociación, a la que pertenecen los beneficiarios del proyecto, ha logrado la comercialización de 318,499 kilos de productos, incluyendo plátano, limón, banano, naranja y castaño de monte, generando ingresos por un total de $568,000,000. (Lea: Impulsar la ciencia e innovación, la clave para que Colombia sea potencia en bioeconomía)
Deicy Quimbaya, representante legal de PROPLAB, expresó su gratitud y destacó el enfoque de conservación y el compromiso de la comunidad: “Estoy muy contenta de mostrar a uno de los donantes del proyecto cómo sus recursos han apoyado a 170 familias, donde se ha estado trabajando en sistemas agroforestales en un territorio donde la convicción de algunos es destruir, pero para nosotros es conservar y vivir del medio ambiente.”
Por su parte, Carolina Gil, directora del programa Noroeste Amazonas de Amazon Conservation Team, la ONG que implementó el proyecto, subrayó la importancia de la experiencia de vivir el proyecto en el terreno: “Creo que la mejor manera de mostrar los resultados de un proyecto, es vivir la experiencia, acercarse a las familias campesinas y permitirles compartir su experiencia. Esto tiene un efecto profundo en la comunidad, ya que los alienta a reflexionar sobre el impacto positivo en sus vidas y en el territorio que habitan”.
Además, la especialista ambiental de la Unidad Técnica coordinadora del Fondo Colombia Sostenible, Alejandra Sánchez, reafirmó la importancia para el Fondo en fortalecer las iniciativas en región amazónica. “Hemos apoyado 8 proyectos que nos ha permitido trabajar con más de 2000 personas, entre mujeres, jóvenes, campesinos y organizaciones y en general con distintos actores que nos ha permitido apoyar procesos de restauración en más de 1000 hectáreas y apoyar también procesos de reconversión sostenible en cerca de 980 hectáreas adicionales”.