Un tratamiento verde para las aguas grises de Atlántico
Aguas grises rurales: un recurso aprovechable para tu finca, para tu mesa. Conoce cómo un humedal artificial puede ayudarte a gestionar tus vertimientos líquidos y a reutilizarlos.
Universidad del Norte de Barranquilla
Mucho se habla de la contaminación de las fuentes hídricas en el país, pero no se habla de los orígenes de esta contaminación. Es por esto, que el proyecto “Humedales Artificiales: Una Técnica Verde Para El Tratamiento De Aguas Grises”, de la Universidad del Norte, en cabeza de la microbióloga Andrea Monroy y el ingeniero Carlos Pacheco, ambos profesores e investigadores de la misma universidad, pretende usar las aguas grises como agua para riego de cultivos y lavado de pisos en casa rurales del departamento del Atlántico.
Para poder realizar esto, los investigadores definieron como solución base un sistema alternativo de tratamiento no convencional denominado humedales artificiales, que desde hace más de tres décadas se ha implementado en diferentes proyectos (natural y artificialmente) y se ha experimentado con modelos que incluyen plantas y bacterias que hacen el trabajo de “descomponedores”, hasta dejar el agua libre de sustancias contaminantes.
Con base en esta técnica, se ha diseñado un prototipo, el cual ya ha sido probado a escala laboratorio y a escala piloto in situ, obteniendo muy buenos resultados. El siguiente paso es su escalado en hogares rurales, viviendas para las cuales, el sistema esta diseñado.
Para lograr este objetivo, se hace necesaria la participación activa de la comunidad y de los actores gubernamentales, que hagan realidad la transmisión del conocimiento y la construcción de los humedales artificiales en hogares rurales del departamento. Ya se han dado algunos pasos en esta fase de implementación, aplicando a convocatorias internacionales, con el fin de atraer fondos para desarrollar el proyecto de forma efectiva.
Siempre existe la pregunta, en un país que tiene tantos recursos hídricos, ¿por qué hay que reusar las aguas? Y la respuesta es muy fácil, si se contamina el agua como recurso vital, no puede ser usado, y hay que tratarlo gastando millones de pesos en la construcción de plantas que lo hagan. Sin embargo, si las aguas contaminadas se tratan desde su origen, el costo es mucho mas bajo y la contaminación de los cuerpos de agua se reduce radicalmente.
Basado en esto, se diseñó una planta de muy bajo costo, que usa bacterias comerciales y plantas nativas de la región, sumado a un diseño de ingeniería, que permite que las aguas grises (aguas de lavaderos, lavamanos, duchas, y lavaplatos) sean tratadas llevándolas a un punto optimo de reúso. El fundamento o base del humedal es el uso natural de degradación de la materia orgánica y los procesos de filtración del agua, todo esto desde un punto de vista de uso de los recursos existentes en las zonas de aplicación de la tecnología.
Cuando se habla de los recursos de la zona, se refiere a usar las cosas que normalmente están en una casa rural como tanques, tubos, plásticos y demás, mal llamados residuos, pero que en este proyecto se denominan materiales de construcción. De esta forma se aplica la economía circular y los principios de sostenibilidad que tanto se necesitan en los proyectos de ingeniería de nuestro país.
Para continuar con el proyecto, aparte de apoyo económico, se hace necesario que la comunidad apropie la tecnología, que participe en la construcción de su humedal y en la puesta en operación, así como que se involucre en su funcionamiento y en el mantenimiento del sistema, convirtiéndose así en gestor y operador de su propio sistema de tratamiento de aguas grises.
Para lograr esto, estamos planeando la realización de grupos focales en donde se explicará a la comunidad el objetivo del proyecto y sus beneficios, logrando que los usuarios participen activamente en la implementación del tratamiento en su hogar y puedan adaptarlo a sus necesidades,. De esta forma, el proyecto pretende no solo implementarse en 30 hogares rurales, si no que se pueda aplicar a cada hogar del departamento del Atlántico.
Cabe mencionar que nuestro país tiene un recurso hídrico muy grande que esta siendo contaminado en las zonas rurales, permitiendo que aguas subterráneas transporten esta contaminación a los cuerpos de agua superficiales (lagos, ríos, estuarios) o que depositen contaminantes en los suelos a través de su paso por ellos. Es por esto que proyectos de este tipo deben ser institucionales, puesto que genera acciones preventivas y no correctivas, evitando problemas ambientales, altos gastos económicos e involucrando a las comunidades en la generación de proyectos sostenibles a través del tiempo. Lo anterior hace que se cumplan los tres pilares de la sostenibilidad, importantes para nuestro país y el mundo en general.
Mucho se habla de la contaminación de las fuentes hídricas en el país, pero no se habla de los orígenes de esta contaminación. Es por esto, que el proyecto “Humedales Artificiales: Una Técnica Verde Para El Tratamiento De Aguas Grises”, de la Universidad del Norte, en cabeza de la microbióloga Andrea Monroy y el ingeniero Carlos Pacheco, ambos profesores e investigadores de la misma universidad, pretende usar las aguas grises como agua para riego de cultivos y lavado de pisos en casa rurales del departamento del Atlántico.
Para poder realizar esto, los investigadores definieron como solución base un sistema alternativo de tratamiento no convencional denominado humedales artificiales, que desde hace más de tres décadas se ha implementado en diferentes proyectos (natural y artificialmente) y se ha experimentado con modelos que incluyen plantas y bacterias que hacen el trabajo de “descomponedores”, hasta dejar el agua libre de sustancias contaminantes.
Con base en esta técnica, se ha diseñado un prototipo, el cual ya ha sido probado a escala laboratorio y a escala piloto in situ, obteniendo muy buenos resultados. El siguiente paso es su escalado en hogares rurales, viviendas para las cuales, el sistema esta diseñado.
Para lograr este objetivo, se hace necesaria la participación activa de la comunidad y de los actores gubernamentales, que hagan realidad la transmisión del conocimiento y la construcción de los humedales artificiales en hogares rurales del departamento. Ya se han dado algunos pasos en esta fase de implementación, aplicando a convocatorias internacionales, con el fin de atraer fondos para desarrollar el proyecto de forma efectiva.
Siempre existe la pregunta, en un país que tiene tantos recursos hídricos, ¿por qué hay que reusar las aguas? Y la respuesta es muy fácil, si se contamina el agua como recurso vital, no puede ser usado, y hay que tratarlo gastando millones de pesos en la construcción de plantas que lo hagan. Sin embargo, si las aguas contaminadas se tratan desde su origen, el costo es mucho mas bajo y la contaminación de los cuerpos de agua se reduce radicalmente.
Basado en esto, se diseñó una planta de muy bajo costo, que usa bacterias comerciales y plantas nativas de la región, sumado a un diseño de ingeniería, que permite que las aguas grises (aguas de lavaderos, lavamanos, duchas, y lavaplatos) sean tratadas llevándolas a un punto optimo de reúso. El fundamento o base del humedal es el uso natural de degradación de la materia orgánica y los procesos de filtración del agua, todo esto desde un punto de vista de uso de los recursos existentes en las zonas de aplicación de la tecnología.
Cuando se habla de los recursos de la zona, se refiere a usar las cosas que normalmente están en una casa rural como tanques, tubos, plásticos y demás, mal llamados residuos, pero que en este proyecto se denominan materiales de construcción. De esta forma se aplica la economía circular y los principios de sostenibilidad que tanto se necesitan en los proyectos de ingeniería de nuestro país.
Para continuar con el proyecto, aparte de apoyo económico, se hace necesario que la comunidad apropie la tecnología, que participe en la construcción de su humedal y en la puesta en operación, así como que se involucre en su funcionamiento y en el mantenimiento del sistema, convirtiéndose así en gestor y operador de su propio sistema de tratamiento de aguas grises.
Para lograr esto, estamos planeando la realización de grupos focales en donde se explicará a la comunidad el objetivo del proyecto y sus beneficios, logrando que los usuarios participen activamente en la implementación del tratamiento en su hogar y puedan adaptarlo a sus necesidades,. De esta forma, el proyecto pretende no solo implementarse en 30 hogares rurales, si no que se pueda aplicar a cada hogar del departamento del Atlántico.
Cabe mencionar que nuestro país tiene un recurso hídrico muy grande que esta siendo contaminado en las zonas rurales, permitiendo que aguas subterráneas transporten esta contaminación a los cuerpos de agua superficiales (lagos, ríos, estuarios) o que depositen contaminantes en los suelos a través de su paso por ellos. Es por esto que proyectos de este tipo deben ser institucionales, puesto que genera acciones preventivas y no correctivas, evitando problemas ambientales, altos gastos económicos e involucrando a las comunidades en la generación de proyectos sostenibles a través del tiempo. Lo anterior hace que se cumplan los tres pilares de la sostenibilidad, importantes para nuestro país y el mundo en general.