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Desde el lunes (26 de diciembre), los pescadores de la cuenca baja del río Sogamoso han denunciado, a través de videos, la mortandad de cientos de peces y la sequía en la que se encontraba el río, según ellos, por cuenta del cierre de las compuertas de la hidroeléctrica que lleva el mismo nombre del municipio santandereano y que es operada por Isagen. (Puede leer: Las piangueras transforman su arte en el Pacífico para proteger los manglares)
“(...) Hoy 26 de diciembre vea como lo secaron, en plena subienda secan el río para que la gente de aguas abajo no tengan ese sustento que esperamos todos los días del río”, dice uno de los pescadores de la región mientras muestra el que sería el cauce del río totalmente seco.
En otro, Pablo Gil Rincón, presidente de la Asociación de Pescadores del corregimiento de Puente de Sogamoso, un municipio a poco más de 45 kilómetros aguas abajo de la hidroeléctrica, muestra unos alevines de choca (Chaetostoma brevilabiatum), que se encuentran bajo unas rocas apenas húmedas y que, según dice, morirán en pocas horas porque el sol terminará de secar la poca agua que hay.
Según Gil le dijo a El Espectador, la choca, ese pez que señala en su video, es la especie que más afectada se ve por las sequías, y con ella, la seguridad alimentaria de miles de personas que se dedican a la pesca artesanal en los municipios aguas abajo del embalse de Topocoro. Tanto para Gil, como para su compañero de pesca, la culpable de esta sequía es Isagen, la empresa a cargo de Hidrosogamoso, el proyecto hidroeléctrico. “Al cerrar las compuertas, los peces quedan empozados y generan unas mortandades”, apunta el pescador, quien agrega que en estas épocas de subienda, es decir, cuando los peces empiezan a migrar, la situación es aún peor. (También puede leer: Groenlandia: glaciares se están derritiendo 100 veces más rápido)
Sin embargo, a través de un comunicado, la empresa desestimó los señalamientos que se han hecho a través de redes sociales. “La empresa informa que se ha cumplido en todo momento con el caudal ecológico, cifra que está expresada en valores de metros cúbicos de agua por segundo (80 m3/seg para el río Sogamoso), lo anterior dado a las bajas afluencias registradas el día de ayer producto de la temporada seca que se viene presentando en el mes de diciembre”, precisó en el documento.
Aunque la empresa reconoce que es cierto que algunos brazos del río Sogamoso se han secado, considera que es por cuenta del cambio de estación que está viviendo el país, más no por su operación. “Reiteramos que en todo momento ISAGEN ha cumplido los lineamientos de la licencia ambiental y durante el día de ayer se tuvieron brigadas de rescate de peces según lo establecido por la Autoridad Ambiental”. (Puede interesarle: Los drones podrían mantener a salvo a bañistas y tiburones al mismo tiempo)
Mientras tanto, la Corporación Autónoma de Santander (CAS), cree que tanto lo señalado por los pescadores, como lo dicho por Isagen, puede estar influyendo en la situación que se vive actualmente. Alexcevith Acosta Sánchez, director general de la CAS, manifestó que han identificado dos factores que pueden estar produciendo los bajos niveles del río y, por ende, la mortandad de los peces.
La primera de ellas, aseguró Acosta, es que, como dice la empresa, por el inicio de la temporada seca, “los niveles de los ríos Sogamoso, todos los tributarios a él, así como el Magdalena, empiezan a reducirse”. Sin embargo, “la apertura y cierre de compuertas pueden estar afectando alguna situación específica”, apuntó el director de la CAS. De esto último, ya están notificadas tanto Isagen, como la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA) que es la entidad encargada de hacerle seguimiento a la licencia de operación de Hidrosogamoso. (Le puede interesar: El Parque Johnny Cay de San Andrés estará cerrado por fin de año. ¿Cuándo abre?)
De hecho, en la noche del 26 de diciembre, la Anla le envió un oficio a Isagen en la que le solicitó, entre otras cosas, un “informe del evento en el que presuntamente se presentó disminución de caudal en el río Sogamoso y mortandad de peces en el sector La Cascajera entre los días 25 y 26 de diciembre de 2022, en el cual se incluyan las causas y la descripción de las medidas implementadas junto con las evidencias respectivas de estas, con especial énfasis en las actividades para la protección de la fauna íctica”.
La empresa tendrá hasta el 2 de enero para enviar este informe, así como otros dos en los que deberá indicar los eventos de apertura y cierre de compuertas del vertedero desde el 19 de mayo hasta la fecha, precisando los caudales descargados. En un tercer documento deberá reportar los registros de medición de caudales “de generación y caudales totales” en el río Sogamoso desde mediados de mayo. Por último, Isagen también deberá adjuntarle a la Anla las respuestas que le han brindado a los representantes de la comunidad de La Cascajera, donde se originaron las actuales denuncias. (Puede leer: Descubren un nuevo tipo de bacteria en los delfines rosas de la Amazonia brasileña)
Aunque los niveles del río volvieron a la normalidad en la mañana de este martes (27 de diciembre), como aseguran tanto Isagen y los pescadores, estos últimos le hacen un llamado a la empresa y a las autoridades nacionales y departamentales para establecer un diálogo que les permita superar esta situación que, dicen ellos, se presenta cada dos o tres meses desde hace ocho años, cuando la hidroeléctrica entró en funcionamiento.