Hay que ver con pinzas los datos que sugieren que el Atlántico se enfría
La primera disminución en la temperatura de la superficie del mar, de acuerdo con las cifras de la NOAA, fue en julio de 2024, siendo ligeramente más frías que las reportadas en julio de 2023. Este valor le puso fin a una racha de 15 meses de temperaturas oceánicas récord.
En los últimos días, circuló una noticia que señalaba que el Atlántico se estaba enfriando a una velocidad récord, una variación que estaba siendo analizada por los científicos. Esta información se basó en los registros de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA por sus siglas en inglés) que mostraban una variación drástica de las temperaturas en el océano Atlántico en los últimos tres meses, pasando de temperaturas cálidas a frías.
Sin embargo, esta disminución en la temperatura del Atlántico se debe revisar con cuidado. Lo primero que es importante aclarar es que el último cambio de temperatura se reportó justo antes de una transición prevista hacia un fenómeno de la Niña mucho más frío, el cual se prevé que se dé en el Océano Pacífico. Según la NOAA, después de un poco más de un año de presentarse un calor récord en la tierra y en el mar, se registraron temperaturas más frías en esta zona.
Además, según los registros de la NOAA, La primera disminución en la temperatura de la superficie del mar fue en julio, siendo ligeramente más frías que las reportadas en julio de 2023. Este valor le puso fin a una racha de 15 meses de temperaturas oceánicas récord.
Estos reportes se presentaron luego de que el fenómeno de El Niño perdiera impacto en el Pacífico, pues, según la NOAA perdió fuerza en mayo y, sus predicciones, estiman que es probable que entre septiembre y noviembre se presenten las condiciones de La Niña, que serán más frías de lo normal.
Además, en esta zona se prevé El Niño-Oscilación del Sur (ENOS) que, de acuerdo con la NOAA, se caracteriza por ser “un fenómeno climático natural a gran escala que conlleva fluctuaciones en la temperatura del océano en las regiones central y oriental del océano Pacífico ecuatorial”.
Michael McPhaden, científico de la NOAA, en entrevista con el medio New Scientist, señala que, así como sucede en el Pacífico, en el Atlántico también se registraron condiciones del fenómeno de El Niño inusualmente cálidas durante gran parte de 2023. Además, dice McPhaden, las temperaturas de la superficie del mar a principios de este año fueron las más cálidas en décadas.
“Este fue el último episodio de una serie de acontecimientos en un sistema climático que lleva varios años descarrilado”, anota. Lo inusual, añade, es que precisamente en estos últimos tres meses, las temperaturas en esa parte del Atlántico, por primera vez desde 1982, se enfriaron más rápido.
A los ojos de Franz Philip Tuchen, investigador de la Universidad de Miami en Florida (Estados Unidos), este cambio repentino fue una sorpresa. “La principal razón es que los fuertes vientos alisios que normalmente impulsan tal enfriamiento no se han desarrollado. Hemos repasado la lista de posibles mecanismos, y hasta ahora nada encaja”, asegura a New Scientist.
Los investigadores señalan que existe una posibilidad de que los dos posibles fenómenos de La Niña influyan en los patrones meteorológicos de todo el mundo debido a sus efectos sobre la temperatura y la humedad. “Podría haber un tira y afloja entre el Pacífico que intenta enfriarse y el Atlántico que intenta calentarse”, apunta McPhaden.
Pero, otros investigadores del clima explican que estas variaciones se deben revisar con pinzas. Leon Simons es uno de ellos. En su cuenta de X cuenta que, en su opinión, no es lo que parece sobre un enfriamiento récord del Atlántico tropical.
“Es una parte muy pequeña del Atlántico tropical que está mostrando una rápida disminución de la temperatura superficial del mar y lo hace a partir de una línea de base récord”, añade y aclara que, en este momento, en el Atlántico se está registrando un calentamiento, principalmente por la desulfuración del transporte marítimo.
Por último, Simons asegura que en las latitudes medidas del hemisferio norte se están produciendo cambios mucho más notables Un ejemplo de estas variaciones es lo que sucede en el Mediterráneo, donde se presenta el 20% del comercio marítimo del mundo.
* Nota del editor: El título de esta nota fue modificado el 23 de agosto a las 10:30 de la mañana para precisar que, si bien se ha registrado una disminución en la temperatura del Atlántico, es un patrón que se debe revisar con cuidado. Además, se añadió la cita de un investigador del clima que explica que esta disminución se está presentando en una pequeña parte del Atlántico.
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En los últimos días, circuló una noticia que señalaba que el Atlántico se estaba enfriando a una velocidad récord, una variación que estaba siendo analizada por los científicos. Esta información se basó en los registros de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA por sus siglas en inglés) que mostraban una variación drástica de las temperaturas en el océano Atlántico en los últimos tres meses, pasando de temperaturas cálidas a frías.
Sin embargo, esta disminución en la temperatura del Atlántico se debe revisar con cuidado. Lo primero que es importante aclarar es que el último cambio de temperatura se reportó justo antes de una transición prevista hacia un fenómeno de la Niña mucho más frío, el cual se prevé que se dé en el Océano Pacífico. Según la NOAA, después de un poco más de un año de presentarse un calor récord en la tierra y en el mar, se registraron temperaturas más frías en esta zona.
Además, según los registros de la NOAA, La primera disminución en la temperatura de la superficie del mar fue en julio, siendo ligeramente más frías que las reportadas en julio de 2023. Este valor le puso fin a una racha de 15 meses de temperaturas oceánicas récord.
Estos reportes se presentaron luego de que el fenómeno de El Niño perdiera impacto en el Pacífico, pues, según la NOAA perdió fuerza en mayo y, sus predicciones, estiman que es probable que entre septiembre y noviembre se presenten las condiciones de La Niña, que serán más frías de lo normal.
Además, en esta zona se prevé El Niño-Oscilación del Sur (ENOS) que, de acuerdo con la NOAA, se caracteriza por ser “un fenómeno climático natural a gran escala que conlleva fluctuaciones en la temperatura del océano en las regiones central y oriental del océano Pacífico ecuatorial”.
Michael McPhaden, científico de la NOAA, en entrevista con el medio New Scientist, señala que, así como sucede en el Pacífico, en el Atlántico también se registraron condiciones del fenómeno de El Niño inusualmente cálidas durante gran parte de 2023. Además, dice McPhaden, las temperaturas de la superficie del mar a principios de este año fueron las más cálidas en décadas.
“Este fue el último episodio de una serie de acontecimientos en un sistema climático que lleva varios años descarrilado”, anota. Lo inusual, añade, es que precisamente en estos últimos tres meses, las temperaturas en esa parte del Atlántico, por primera vez desde 1982, se enfriaron más rápido.
A los ojos de Franz Philip Tuchen, investigador de la Universidad de Miami en Florida (Estados Unidos), este cambio repentino fue una sorpresa. “La principal razón es que los fuertes vientos alisios que normalmente impulsan tal enfriamiento no se han desarrollado. Hemos repasado la lista de posibles mecanismos, y hasta ahora nada encaja”, asegura a New Scientist.
Los investigadores señalan que existe una posibilidad de que los dos posibles fenómenos de La Niña influyan en los patrones meteorológicos de todo el mundo debido a sus efectos sobre la temperatura y la humedad. “Podría haber un tira y afloja entre el Pacífico que intenta enfriarse y el Atlántico que intenta calentarse”, apunta McPhaden.
Pero, otros investigadores del clima explican que estas variaciones se deben revisar con pinzas. Leon Simons es uno de ellos. En su cuenta de X cuenta que, en su opinión, no es lo que parece sobre un enfriamiento récord del Atlántico tropical.
“Es una parte muy pequeña del Atlántico tropical que está mostrando una rápida disminución de la temperatura superficial del mar y lo hace a partir de una línea de base récord”, añade y aclara que, en este momento, en el Atlántico se está registrando un calentamiento, principalmente por la desulfuración del transporte marítimo.
Por último, Simons asegura que en las latitudes medidas del hemisferio norte se están produciendo cambios mucho más notables Un ejemplo de estas variaciones es lo que sucede en el Mediterráneo, donde se presenta el 20% del comercio marítimo del mundo.
* Nota del editor: El título de esta nota fue modificado el 23 de agosto a las 10:30 de la mañana para precisar que, si bien se ha registrado una disminución en la temperatura del Atlántico, es un patrón que se debe revisar con cuidado. Además, se añadió la cita de un investigador del clima que explica que esta disminución se está presentando en una pequeña parte del Atlántico.
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