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En la tarde de este viernes (26 de mayo), la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA) emitió una resolución en la que impone requerimientos adicionales a la licencia que esa entidad le otorgó en 2015 al Ministerio de Defensa para construir una estación de guardacostas de Tercer Nivel en el PNN Gorgona. (Puede leer: El 2.º río más hondo de Colombia tiene peces desconocidos, ciegos y con microplástico)
Los nuevos requerimientos, que deberán ser presentados en los próximos dos meses, están dirigidos a temas de manejo y control de las obras que la Armada Nacional pretende desarrollar en la isla. Según Susana Muhamad, ministra de Ambiente, en los nuevos requerimientos “se incluye un programa de monitoreo de tortugas, también que se maneje la construcción del muelle de forma tal que no vaya a tener impactos acústicos a fauna que puede permanecer en el sitio y que no es estacional, como por ejemplo la fauna de las ballenas”.
La solicitud también especifica que se construya primordialmente en bajamar y considerar un protocolo en movilidad de fauna para no afectar durante la instalación de pilotes. Cabe recordar que la licencia con la que cuenta la Armada permite la construcción de un muelle de 132 metros de largo, bloques para alojamiento y tareas administrativas, una estación de Guardacostas de Tercer Nivel, un radar y un tanque de 7.000 galones para el almacenamiento de combustible. (Le puede interesar: Los problemas del sector pesquero tras 9 meses sin dirección en el gobierno Petro)
Desde finales del año pasado, como contamos en este artículo, el debate sobre la viabilidad de la construcción de una subestación de guardacostas en el Parque Nacional Natural Gorgona se había vuelto a prender, luego de que un grupo de ambientalistas le enviarán una carta al presidente, Gustavo Petro, y a la ministra de Ambiente, pidiendo que revocaran la licencia de las obras.
Como respuesta a esas inquietudes, la cartera ambiental y la vicepresidencia iniciaron una serie de reuniones en las que estuvieron involucrados las comunidades del Pacífico colombiano que se oponen a la construcción de la subestación, así como grupos ambientalistas, académicos, la Armada Nacional, que es quien está detrás de las obras, entre otras entidades como Parques Nacionales Naturales. (También puede leer: No hay suficientes peces en el mar)
En total, según Muhamad, se adelantaron cerca de 25 reuniones con los actores involucrados. Esto, según el ministerio, “responde a los principios de participación inclusiva y transparencia en el marco del Acuerdo de Escazú”.