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A finales de abril, La Corporación para el Desarrollo Sostenible del Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina (Coralina), la autoridad ambiental del Archipiélago, alertó sobre una enfermedad en los corales de Seaflower de la cual no se tenían registros en el país. Se trataba de la enfermedad de pérdida de tejido de coral, considerada como la principal amenaza para los arrecifes de coral del Gran Caribe. (Puede leer: La enfermedad que llegó al mar de Colombia y puede acabar con los corales)
A inicios de octubre, como contamos en esta nota, la enfermedad había sido detectada en al menos siete puntos del Archipiélago de San Andrés y Providencia, por lo que Coralina declaró a la Reserva de la Biósfera y al Área Marina Protegida de Seaflower en “alerta máxima”. Hace unos días, autoridades ambientales, expertos en corales y ONG pidieron acciones urgentes para manejar la emergencia.
Ante ese llamado, el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible publicó este jueves (20 de octubre) una serie de lineamientos para prevenir y controlar la enfermedad de “Perdida de Tejido en Corales Duros en Colombia”, también conocida como SCTLD por sus siglas en inglés. Las medidas se desagregan en tres etapas: prevención, intervención y monitoreo. (Le puede interesar: Pensaban que este gusano solo estaba en el mar, pero lo encontraron en un río colombiano)
Las primeras acciones de prevención están dirigidas a establecer vínculos con centros de investigación internacionales que tengan experiencia en el manejo de la enfermedad, así como en la construcción de talleres y sesiones de capacitación locales para “aumentar la capacidad de comunicación, detección y monitoreo de la enfermedad”. En este grupo de medidas, también se ordena el cierre de sitios de buceo “infectados para prevenir la transmisión de la enfermedad a sitios no infectados”. El Ministerio también pidió generar un stock de colonias de coral en condiciones ex situ con el fin de crear bancos de diferentes especies representativas.
Respecto a la intervención, la cartera señaló que se deben realizar las acciones necesarias para garantizar los recursos financieros para poder atender de manera oportuna los corales afectados. Así mismo se deberá avanzar en la elaboración de protocolos de intervención, tarea que será desarrollada en asocio con entidades internacionales y nacionales. El ministerio también apunta que la remoción de colonias afectadas y el tratamiento con antibióticos serán acciones a tener en cuenta para tratar la enfermedad. (También puede leer: Criar larvas de coral: un nuevo esfuerzo para salvar los arrecifes en Colombia)
Por último, el ministerio estableció cuatro tareas de monitoreo que están enfocadas, principalmente, a evaluar la efectividad de los tratamientos que se están empleando. Según Susana Muhamad, ministra de Ambiente, los lineamientos señalados buscan “monitorear, tratar y prevenir de manera efectiva esta nueva enfermad que amenaza nuestros corales. Lo que buscamos es que no haya propagación de la Enfermedad de Pérdida de Tejido en Corales Duros”.
La cartera señaló que estos lineamientos fueron elaborados con base en los planes de acción establecidos por países que tienen experiencia en el tratamiento de la enfermedad, así como por organizaciones internacionales para la conservación de arrecifes coralinos y especialistas nacionales.