“Colombia es el país con más conflictos ambientales del mundo”: Gloria Amparo Rodríguez
Esta investigadora de la Universidad del Rosario y magistrada de la JEP acaba de recibir el Premio a la Consolidación de la Paz Ambiental en la Práctica, otorgado por más de 380 investigadores e instituciones mundiales.
Camila Taborda - @Camilaztabor
Gloria Amparo Rodríguez recibió hace cuatro meses una carta de felicitaciones. Se trataba de un correo escrito por Carl Brunch, presidente de la Organización Environmental Peacebuilding, que reúne a más de 380 investigadores e instituciones del mundo para discutir sobre medioambiente, conflicto y paz. El mensaje era claro: ella había sido seleccionada para recibir el Premio a la Consolidación de la Paz Ambiental en la Práctica. Los jurados habían quedado “impresionados por el extenso trabajo” de esta profesora de la Universidad del Rosario, investigadora de conflictos ambientales desde hace tres décadas y magistrada de la Jurisdicción Especial para la Paz. (Lea: Francia Márquez es una de las 100 mujeres más inspiradoras e influyentes de 2019, según la BBC)
Gracias por ser nuestro usuario. Apreciado lector, te invitamos a suscribirte a uno de nuestros planes para continuar disfrutando de este contenido exclusivo.El Espectador, el valor de la información.
Gloria Amparo Rodríguez recibió hace cuatro meses una carta de felicitaciones. Se trataba de un correo escrito por Carl Brunch, presidente de la Organización Environmental Peacebuilding, que reúne a más de 380 investigadores e instituciones del mundo para discutir sobre medioambiente, conflicto y paz. El mensaje era claro: ella había sido seleccionada para recibir el Premio a la Consolidación de la Paz Ambiental en la Práctica. Los jurados habían quedado “impresionados por el extenso trabajo” de esta profesora de la Universidad del Rosario, investigadora de conflictos ambientales desde hace tres décadas y magistrada de la Jurisdicción Especial para la Paz. (Lea: Francia Márquez es una de las 100 mujeres más inspiradoras e influyentes de 2019, según la BBC)
Rodríguez es la primera persona en recibir este galardón, que será entregado el próximo 23 de octubre en la Universidad de California en Irvine, EE. UU. El Espectador habló con la experta sobre tal reconocimiento, sobre su último libro Disputas ambientales en Colombia y los retos para el país frente a la construcción ambiental de la paz.
¿Qué es paz ambiental?
La paz ambiental tiene muchos componentes. Es cuando nosotros vemos el ambiente no solo desde los ecosistemas, sino desde el uso que las comunidades hacen de los recursos naturales; cuando vemos el ambiente desde lo que sucede en las ciudades con el manejo de residuos sólidos, y cuando miramos que es posible lograr una armonía, una armonía entre la naturaleza y sus recursos naturales y las actividades que realiza el hombre. Esa integralidad es fundamental para promover desarrollo con inclusión social, un desarrollo que tenga en cuenta la protección de nuestro patrimonio natural. La paz es armonía en todos los órdenes: entre las personas, entre los Estados, con la naturaleza.
Usted conoce los conflictos ambientales del país desde 1991. ¿Cuál es su metodología?
Trabajo con la Universidad del Rosario con la línea de investigación en derecho ambiental. Tenemos un proyecto de investigación sobre conflictos ambientales y territorios étnicos y rurales o campesinos, conflictos ambientales en el sector empresarial y en el sector urbano. Hemos recopilado información con otros estudiantes e investigadores a través de una metodología que me inventé cuando estaba haciendo mi tesis doctoral. Es una ficha con casi 60 preguntas con indicadores que identifican un conflicto ambiental, es decir, cuando están involucrados de por medio recursos naturales y las condiciones de vida de las comunidades. Identifica los actores involucrados y el manejo, qué ha pasado con las confrontaciones, qué han hecho las comunidades y la autoridad, cómo se ha resuelto, y si no se ha resuelto, si hay registro de una acción judicial o de consultas populares o audiencias públicas o protestas. En qué condiciones está ahora y cuál es la propuesta que nosotros ofrecemos como investigadores.
¿Es cierto que somos el segundo país con más conflictos de este tipo?
Casi podría decir que si hiciéramos un rastreo de todos los conflictos que se han dado y los que han terminado en acciones judiciales, encontramos que somos el primer país en conflictos ambientales. En ese sentido, nosotros hemos identificado 250 casos que ya los tenemos documentados, que tienen sus expedientes. Sobre ellos tenemos información oficial, información de las comunidades y a través de ese análisis sabemos que, a pesar de nuestra riqueza natural, tenemos dificultades al entender que el patrimonio natural es también una oportunidad para un desarrollo de sostenibilidad.
¿Cuál es su solución para esa dificultad?
Un ordenamiento que implique a todos los sectores desde la integralidad. La creación de un Plan de Desarrollo que tenga en cuenta un ordenamiento cultural para entender las otras visiones de las comunidades y otros valores. Un ordenamiento que nos permita tener claro que no se puede hacer minería en páramos, que las ciudades necesitan espacios para respirar aire de buena calidad. La integralidad implica que el sector minero, petrolero, agrícola, que todos tienen que trabajar de manera coordinada y armónica para lograr el desarrollo del país, la protección ambiental y que la gente tenga una mejor calidad de vida.
El 40 % de su investigación sobre conflictos ambientales ha sido documentada gracias al trabajo de campo con las comunidades. / Cortesía Gloria Amparo Rodríguez
¿Cuál es el conflicto ambiental que más se repite?
Sobre todo la consulta previa y los territorios étnicos. El primer caso que trabajamos es el de los u’was y después están los urrás, ahí empezamos a identificar toda esta problemática. Tanto así, que la Corte Constitucional cuenta con más de 200 sentencias sobre consulta previa. Otro conflicto repetitivo son los casos relacionados con el agua, que tienen que ver con contaminación de un río o dificultades para acceder a ella. Mientras que en el tema de ambiente y paz encontramos cultivos de uso ilícito y el control del territorio, para eso o para la minería. Porque también los conflictos ambientales han tenido que ver con el conflicto armado del país.
¿Cuál es la relación entre ambos conflictos?
Especialmente el tema de cultivos de uso ilícito que desplazaron a muchas comunidades para ampliar la frontera agrícola. Luego está el tema de las fumigaciones, tenemos documentos de la Defensoría del Pueblo sobre demandas puestas por personas afectadas. A raíz de eso aparecen actores armados que amenazaban a la gente, que asesinaban y elementos de derechos humanos muy complejos frente al tema de acceder a los territorios y cultivar. El territorio más afectado durante muchos años fue la Sierra Nevada de Santa Marta, y otro territorio donde estamos haciendo una investigación que culminaremos a mediados de 2020, sobre el enfoque territorial y ambiental de la paz, donde el caso de estudio es el Putumayo, porque ha sorteado de todo: el petróleo, temas de áreas de protegida, derrames, todo.
¿Cuál es el mayor reto del país?
Entender el gran valor que tiene la biodiversidad de los recursos naturales que poseemos. Perder la oportunidad de tenerlos es poner en riesgo no solo la supervivencia de nuestro país en las personas, la pervivencia del mundo en general. Tenemos un gran reto no solo de conocer, porque ya conocemos mucho, sino valorarlo, lo que implica saber cómo aprovechar esa biodiversdidad en pos de garantizar la vida para toda la población.