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Colombia, representada por la ministra de Ambiente, Susana Muhamad, propuso en el Comité Ministerial del Corredor Marino de Conservación del Pacífico Este Tropical, fortalecer la soberanía y gobernanza de los países que conforman esta iniciativa latinoamericana y crear un tratado vinculante ratificado por todos los países y que apunte a la conservación de este corredor marino regional.
El Comité Ministerial del Corredor Marino de Conservación del Pacífico Este Tropical (o CMAR, por sus siglas en español) es una instancia de coordinación y gestión integrada por los ministros de ambiente de Colombia, Costa Rica, Ecuador y Panamá. Este comité tiene como objetivo principal la conservación y el uso sostenible de los recursos marinos y costeros en el Pacífico Este Tropical, una región que abarca importantes ecosistemas marinos y áreas protegidas de estos cuatro países latinoamericanos.
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El CMAR promueve la cooperación para la conservación de la biodiversidad marina, el manejo sostenible de las pesquerías, y la protección de hábitats críticos como los arrecifes de coral y manglares. Además, el comité busca enfrentar amenazas como la pesca ilegal, la contaminación y el cambio climático, desarrollando estrategias y políticas coordinadas para preservar este corredor marino de alta biodiversidad y riqueza.
Muhamad propuso en la última sesión, realizada en Costa Rica, “un tratado vinculante legalmente que genere que el CMAR no sea solo un acuerdo de voluntades, sino una responsabilidad de Estado importante. El tratado va a negociar la estructura institucional, trasnacional del CMAR”, dijo, mostrándose optimista de poder cerrar las negociaciones y compartir la noticia durante la COP16 de Biodiversidad que organiza Colombia y que tendrá lugar entre el 21 de octubre y el 1 de noviembre próximo en Cali.
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“Si los pueblos, los Estados trabajamos en cooperar para cuidar la naturaleza, estamos construyendo vínculos de paz”, agregó la ministra. Este corredor marino cubre más de 500.000 hectáreas y, además de todo lo dicho, es una ruta migratoria importante para tortugas marinas, ballenas, tiburones y mantarrayas. El tratado vinculante que está impulsando Colombia iría en línea del valor de la biodiversidad, la conservación y el uso sostenible y de repartición equitativa de los recursos genéticos.
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