Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
Desde hace unos días, los científicos y biólogos de Canadá han estado desconcertados por la aparición en un tramo de 100 kilómetros de un río del oeste de los cuerpos de 11 ejemplares de esturiones, una especie de pez en peligro de extinción. (Lea: En video: el pez de cabeza transparente que habita en la profundidad del océano)
El primer cuerpo fue hallado por el biólogo Nikolaus Gantner y dos de sus colegas a principios de septiembre, cuando navegaban por el río Nechako. Días después de ese descubrimiento, encontraron los restos de otros 10 ejemplares.
Para los investigadores, la muerte de estos ejemplares es misteriosa, pues el equipo no ha encontrado ningún signo de trauma en sus cuerpos, ni evidencia de exposición química, enfermedad o muerte inducida por la pesca con caña, que es una de sus principales amenazas.
Los científicos explican algunas de las características de esta especie, como sus barbillas, que son en forma de bigotes y cuelgan de su hocico; además de su torso conformado por placas óseas y que parece un pez prehistórico. El más grande jamás registrado alcanzó los 20 pies de largo.
Steve McAdam, biólogo que ha hecho parte de este equipo, señala a The Guardian que “sea lo que sea, afecta al esturión más grande, no a otras especies. Está limitado a un lugar en el tiempo y el espacio. Eso nos da algunas pistas”. (Puede leer: Detectan contaminación con mercurio, plomo, arsénico y cadmio en peces del río Cauca)
Esta no es la primera vez que McAdam hace parte de un grupo que trata de establecer la muerte de algunas especies de peces. Por ejemplo, en 1993 y 1994, en la parte baja del río Fraser, hace dos años se encontraron 36 peces muertos. “La serie de pruebas que siguieron a esa mortandad no fueron concluyentes”, añade.
A diferencia de este caso, dice McAdam, en esta oportunidad pueden analizar los cuerpos antes de que se produzca la descomposición y destruya pistas valiosas para reconstruir el caso. Por eso, han pedido ayuda al público, ya que, los peces, al ser tan importantes en la cultura, son parte del plan de estudios de las escuelas locales.
Los esturiones, advierten los investigadores, son una especie que está en peligro de extinción. Entre sus amenazas está la sobrepesca, los proyectos de drenaje y la construcción de represas. Desde 2001, en Columbia Británica han trabajado para impulsar su conservación. Entre las estrategias está la construcción de criaderos. (Lea también: El único pez de agua dulce extinto de Colombia que ayuda a buscar hasta Leonardo DiCaprio)
Ahora, dicen los investigadores, es fundamental determinar la causa de la muerte de estos ejemplares, pues “nunca hemos hecho el experimento de eliminarlos por completo y ver cuán importantes son los esturiones para un ecosistema”, anota McAdam.
🌳 📄 ¿Quieres conocer las últimas noticias sobre el ambiente? Te invitamos a verlas en El Espectador. 🐝🦜