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La Autoridad Nacional De Acuicultura Y Pesca (Aunap) emitió la Resolución 2668 de 2024, la cual amplía en un 40% la Zona Exclusiva de Pesca Artesanal (ZEPA) en el Pacífico colombiano, alcanzando así 1,776.27 km², según informó el Centro Sociojurídico para la Defensa Territorial (Siembra).
Desde hace casi 30 años, los pescadores artesanales del norte del Pacífico chocoano, específicamente en los municipios de Juradó y Bahía Solano, se han enfrentado a una serie de conflictos que llegaron a sus costas y que han ido escalando. Por ejemplo, la pesca industrial de atún y de camarón, señala Siembra, ha interferido con la pesca artesanal (que es el sustento de las comunidades), ha generado una reducción de los recursos pesqueros y de las especies clave e incluso, estos conflictos han desencadenado hechos de violencia.
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Ante la situación, las comunidades de Juradó y Bahía Solano, representadas por la Federación de Trabajadores de la Pesca Artesanal de la Costa Pacífica Chocoana (Fedepesca) y el Consejo Comunitario Los Delfines, interpusieron una acción popular ante el Tribunal Administrativo de Cundinamarca. Su objetivo era proteger los derechos colectivos de los pescadores artesanales, además de buscar ampliar la ZEPA.
Fue hasta siete años después, en 2019 que el Tribunal falló a favor de las comunidades. En su sentencia de primera instancia concluyó la “vulneración y/o amenaza” de los derechos colectivos al goce de un ambiente sano, un equilibrio ecológico y el manejo y aprovechamiento racional de los recursos, entre otros.
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Luego, con la Sentencia 078 de 2020, el Consejo de Estado confirmó la vulneración de los derechos de las comunidades y resaltó que la pesca industrial no generaba ningún beneficio económico para las poblaciones locales, ni “de forma directa ni por regalías, y mucho menos en forma de empleo, dado que en un 53.8 % de la flota atunera desembarca sus capturas en Cartagena y Barranquilla, y la flota camaronera en Buenaventura”.
Ahora, tras múltiples reuniones de discusión y análisis de la Mesa Ampliada Interinstitucional, creada por la sentencia, se lograron acuerdos sobre la ampliación de la ZEPA. De acuerdo con la organización Siembra, al expandirse esta zona, los pescadores podrán garantizar su soberanía alimentaria, sus medios de vida y sus oportunidades económicas para su sustento.
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Además, con la ZEPA se fomentarán las prácticas sostenibles, pues integra tanto la conservación ambiental como el desarrollo económico local. También permitirá preservar ecosistemas estratégicos, “en uno de los hotspots más importantes del mundo”, asegura la organización.
Al representante de la zona pesquera ante el Gobierno Nacional, Jorge Iván Chica ha dicho que “la ZEPA ha sido un logro muy importante porque ha ayudado a que las comunidades de los municipios de Bahía Solano y Juradó podamos vivir dignamente, a que podamos seguir pescando como nuestros antepasados lo hacían, a que podamos seguir conservando nuestros ecosistemas y podamos seguir viviendo en paz”.
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