Incautaron más de 60 animales silvestres de un parque recreativo de Cundinamarca
Según la CAR los animales presentaban amputaciones y otras afectaciones. Los administradores del parque dicen que contaban con los espacios aptos para proteger los animales.
Tortugas, babillas, boas, loras, un águila de montaña y un Ganso del Orinoco, hacen parte de la lista de los más de 60 animales de fauna silvestre que fueron incautados por la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) en una finca del municipio de La Vega.
Según la CAR, estos animales estaban exhibidos en peceras y corrales, y eran utilizados con fines lucrativos de recreación en el lugar denominado Payara Park. Varios de ellos presentaban amputaciones y otras afectaciones graves, de acuerdo con la información que dio la Corporación.
(Lea: Los esfuerzos de Colombia y Brasil por conservar al jaguar en un gran corredor)
“Esta es una clara afectación a la fauna silvestre y en general a nuestros ecosistemas naturales. Allí encontramos especies exóticas, que no son propias de nuestro territorio y que por haber sido extraídas de su hábitat estarán condenadas de por vida”, dijo Luis Fernando Sanabria, director de la CAR.
En respuesta a esta situación, representantes de Payara Park calificaron el operativo como un saqueo. “Iniciamos este proyecto hace unos años con las mejores intenciones, con recinto acordes a cada especie. Hoy el Payara muere. La CAR se dispuso a llevarse todos los animales”, indicó el parque a través de redes sociales.
(Lea: Desde 2018, menos colombianos se creen responsables de proteger la biodiversidad)
Sobre el caso del águila, sostuvieron que “La CAR miente cuando asegura que los animales estaban en condiciones iregulares. En el caso del águila, estaba en proceso de volver a la libertad con técnicas de cetrería, ya hacía vuelos en los bosques de nuestras montaña, aprendía a cazar y tenía un futuro en libertad. Ahora su futuro es incierto, nuestro trabajo fue excelente y su comportamiento lo afirma”.
Los animales fueron trasladados por la entidad al Centro de Atención y Valoración (CAV) de Fauna Silvestre, ubicado en el municipio de Tocaima, en Cundinamarca, donde serán valorados. Luego definirán el proceso de rehabilitación de cada caso particular.
“Cada animal será revisado médicamente de manera rigurosa. A simple vista podemos observar graves afectaciones que nos llevarán a emprender un arduo proceso con cada uno para garantizarles su integridad, pero tristemente tenemos que informar que no sabemos si algunos de ellos puedan regresar a la libertad”, explicó el funcionario.
Tortugas, babillas, boas, loras, un águila de montaña y un Ganso del Orinoco, hacen parte de la lista de los más de 60 animales de fauna silvestre que fueron incautados por la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) en una finca del municipio de La Vega.
Según la CAR, estos animales estaban exhibidos en peceras y corrales, y eran utilizados con fines lucrativos de recreación en el lugar denominado Payara Park. Varios de ellos presentaban amputaciones y otras afectaciones graves, de acuerdo con la información que dio la Corporación.
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“Esta es una clara afectación a la fauna silvestre y en general a nuestros ecosistemas naturales. Allí encontramos especies exóticas, que no son propias de nuestro territorio y que por haber sido extraídas de su hábitat estarán condenadas de por vida”, dijo Luis Fernando Sanabria, director de la CAR.
En respuesta a esta situación, representantes de Payara Park calificaron el operativo como un saqueo. “Iniciamos este proyecto hace unos años con las mejores intenciones, con recinto acordes a cada especie. Hoy el Payara muere. La CAR se dispuso a llevarse todos los animales”, indicó el parque a través de redes sociales.
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Sobre el caso del águila, sostuvieron que “La CAR miente cuando asegura que los animales estaban en condiciones iregulares. En el caso del águila, estaba en proceso de volver a la libertad con técnicas de cetrería, ya hacía vuelos en los bosques de nuestras montaña, aprendía a cazar y tenía un futuro en libertad. Ahora su futuro es incierto, nuestro trabajo fue excelente y su comportamiento lo afirma”.
Los animales fueron trasladados por la entidad al Centro de Atención y Valoración (CAV) de Fauna Silvestre, ubicado en el municipio de Tocaima, en Cundinamarca, donde serán valorados. Luego definirán el proceso de rehabilitación de cada caso particular.
“Cada animal será revisado médicamente de manera rigurosa. A simple vista podemos observar graves afectaciones que nos llevarán a emprender un arduo proceso con cada uno para garantizarles su integridad, pero tristemente tenemos que informar que no sabemos si algunos de ellos puedan regresar a la libertad”, explicó el funcionario.