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Los diferentes químicos que arrojamos al planeta, que van desde plásticos hasta antibióticos, ya amenazan la estabilidad del ecosistema global , lo que, por su puesto, pone en vilo la seguridad de la humanidad. Esto concluye un estudio publicado en la revista Environmental Science and Technology y realizada por investigadores con sede en Suecia, Reino Unido, Canadá y Dinamarca. El nivel de contaminación química es tan alto que ya se cruzó un “límite planetario”, un concepto que usan los científicos para conocer cuando los cambios provocados por los humanos en la Tierra son tantos que la empujarán por fuera del entorno de estabilidad que se ha logrado en los últimos 10.000 años.
Entre los más de 350.000 compuestos químicos sintéticos que arrojamos al planeta, entre los que están también los materiales industriales y los pesticidas, el que más preocupa, según el estudio, son los plásticos. Estos, aseguran, ya se encuentran desde la cumbre del Everest hasta lo más profundo de los océanos. Además, le siguen otros productos tóxicos, como los bifenilos policlorados, que se usan en algunos motores y cables eléctricos, así como plaguicidas y agroquímicos, y que permanecen bastante tiempo en el ambiente. (Le sugerimos: Bahía de Buenaventura, sumergida en microplásticos)
Según señaló Patricia Villarrubia Gómez, investigadora asistente, candidata a PhD del Centro de Resiliencia de Estocolmo y quien participó en la investigación, a The Guardian, desde 1950 la generación de productos químicos aumentó cincuenta veces y se prevé que la situación se tripliqué para 2050. “El ritmo en el que las sociedades están produciendo y liberando nuevos productos químicos al medio ambiente no es consistente con permanecer dentro de un espacio operativo seguro para la humanidad”, aseguró.
Para conocer si el incremento de estos productos estaba poniendo en riesgo a la humanidad, el equipo combinó los datos de la tasa de producción de materiales químicos en el mundo y su impacto en el medio ambiente. Así encontró que, al nivel con el que se están produciendo y desechando estos productos, los ecosistemas no tienen cómo manejarlos o descomponerlos. Terminan existiendo en cantidades tóxicas.
De hecho, la profesora Bethanie Carney, de la Universidad de Gotemburgo (en Suecia) y parte del estudio, recordó también a The Guardian que la masa total de plásticos en el planeta es mayor a la masa de todos los mamíferos vivos. (Lea también: Un glaciar que resiste ante el cambio climático)
Si la comunidad científica acepta esta propuesta, la contaminación por químicos sería el quinto límite planetario que se habría superado, de los nueve que existen. Los otros límites planetarios ya superados son el calentamiento global, le destrucción de hábitats salvajes, la pérdida de biodiversidad y la contaminación excesiva por nitrógeno y fósforo.