La nueva área protegida que será clave para la conservación de aves en el Chocó

Se declaró un área protegida para el cuidado de aves endémicas en Colombia, o sea aquellas que solo se encuentran en nuestro país. Se trata de la reserva natural Las Tángaras, a 5 kilómetros del municipio Carmen de Atrato, Chocó, donde habitan alrededor de 557 especies, como la Tángara de Tatamá (Bangsia aureocincta) y la Tángara Aurinegra (Bangsia melanochlamys), ambas endémicas en nuestro país. Además, hacen parte de la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN), que agrupalas especies de todo el mundo que se encuentran en diferentes categorías de amenaza.

Se declaró un área protegida para el cuidado de aves endémicas en Colombia, o sea aquellas que solo se encuentran en nuestro país. Se trata de la reserva natural Las Tángaras, a 5 kilómetros del municipio Carmen de Atrato, Chocó, donde habitan alrededor de 557 especies, como la Tángara de Tatamá (Bangsia aureocincta) y la Tángara Aurinegra (Bangsia melanochlamys), ambas endémicas en nuestro país. Además, hacen parte de la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN), que agrupalas especies de todo el mundo que se encuentran en diferentes categorías de amenaza.

La Fundación ProAves, que se dedica a la conservación de aves y anfibios en Colombia, administraba la reserva desde 2009, y no fue sino hasta el pasado 26 de enero que se le dio la categoría de área protegida. Estos son lugares destinados a conservar ecosistemas estratégicos como páramos, llanuras, bosques húmedos tropicales y manglares. Hay distintas categorías para definirlas, como Parques Nacionales Naturales o Reservas Nacionales Naturales, pero, al final, resguardan recursos de los que dependen millones de especies, además de los seres humanos.

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En Colombia, los Parques Nacionales son tal vez la forma más conocida de áreas protegidas, especialmente porque 36 de los 59 que existen tienen vocación ecoturística. Eso quiere decir que tienen una amplia gama de oferta para visitantes, con actividades como senderismo, buceo y avistamiento de especies. Sin embargo, aunque podemos decir que todos los Parques Nacionales son áreas protegidas, también podemos afirmar que no todas las áreas protegidas son Parques Nacionales Naturales.

Las Tángaras, por ahora, solo fue considerada como área protegida. Aunque tiene un total de 3.600 hectáreas, apenas se declararon 2.316 porque la reserva está partida por la vía Medellín Quibdó. Según Arnold Alexander Ricón López, director de CodeChocó (la entidad gubernamental que administra y maneja los recursos naturales de ese departamento), el área contará con un “esquema de protección que permitirá el uso de sus recursos de manera responsable, beneficiando a las comunidades negras y campesinas aledañas”. Además, según ProAves, la reserva también se encuentra cerca a varios resguardos de comunidades indígenas Embera.

Un anuncio importante para Chocó

Chocó tiene una superficie que ronda los 4,7 millones de hectáreas, pero solo el 3,7 % de ellas están protegidas en forma de tres Parques Nacionales: Katíos, Utría y Tatamá. También hay una Reserva Forestal Protectora Nacional llamada Río León, y cinco pequeñas reservas naturales de la sociedad civil que suman 136 hectáreas, según cuentas de Conservación Internacional, organización sin ánimo de lucro que se alió con ProAves para que fuera posible la declaratoria de área protegida de Las Tángaras.

Su director, Fabio Arjona, resaltó las particularidades que hacen que Las Tángaras sea especial: desde los cuatro afluentes que tiene cerca (el río Atrato y las quebradas La Sánchez, Aguanegra y la Sevillana), hasta el hecho de que sea la primera protección oficial del bosque subtropical chocoano, que además posee un rango de elevación vital para que allí habiten especies endémicas y en peligro de extinción, pues muchas se encuentran en bosques húmedos entre los 900 y 2.100 metros de altura. “Por ejemplo, más de 50 especies de aves endémicas del área biogeográfica del Chocó solo se encuentran en ese rango de altitud”, afirma Arjona.

Pero, además de aves, Las Tángaras cuenta con una importante presencia de 26 anfibios, de los cuales 9 son endémicos del país, como el sapito narizón (Rhinella lindae), y la rana cohete (Silverstoneia nubicola). Allí también habitan el oso de anteojos (Tremarctos ornatus) y el mono cariblanco (Cebus capucinus), ambas en estado vulnerable de extinción.

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Parte de una iniciativa más grande

En junio de 2023, la Fundación ProAves firmó un memorando junto a otras entidades como Conservación Internacional y la Asociación de Corporaciones Autónomas Regionales y de Desarrollo Sostenible (ASOCARS). En él, buscaban declarar 27 reservas naturales en Colombia que, según ProAves, todavía no están bajo ninguna figura de área protegida oficial, sino que hacen parte de intentos por preservar el medio ambiente por parte de organizaciones sin ánimo de lucro y de la sociedad civil.

Esas reservas se encuentran en la región Caribe, Amazónica, Nororiental, Noroccidental, Central y Suroccidental de nuestro país. “Son más de 4.600 hectáreas, 115 especies de flora, 26 especies de mamíferos y 167 especies de aves. Esta zona se convertirá en un corredor ecológico de conectividad y conservación de estas especies, ya que algunas son endémicas y otras están bajo categorías de amenaza”, dijo en su momento Olga Lucía Alfonso Iannini, directora general de Cortolima, entidad clave para que la primera de esas reservas, el Parque Natural Regional Loros Andinos en Roncesvalles, Tolima, fuera declarada como área protegida durante diciembre de 2023. Las Tángaras es la segunda en alcanzar el objetivo.

Por ahora, tras el anuncio, Las Tángaras será el primer parque regional que cuente con un albergue exclusivamente dedicado a la observación de aves y ecoturismo. “Este importante suceso para la conservación permitirá continuar preservando bajo una figura de área protegida pública de carácter regional, una extensión significativa de bosques nublados de la Cordillera Occidental, que contiene una alta diversidad y es el hábitat de varias especies de anfibios, aves y plantas endémicas de Colombia, muchas de ellas amenazadas de extinción por acciones como la deforestación”, afirmó Conservación Internacional en un comunicado.

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