Mariposas en Texas, en riesgo por la construcción del muro de Trump
El Centro Nacional de Mariposas alertó que el muro podría eliminaría por completo esta reserva medioambiental. La barrera invadiría el curso del Río Grande, en el condado de Hidalgo.
-Redacción Medio Ambiente / EFE
El Centro Nacional de Mariposas informó este jueves que el muro que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quiere construir a lo largo de la frontera con México dividiría en dos partes la reserva medioambiental de Texas, lo que podría originar su desaparición. (Puede leer: El fondo del mar está pasando de blanco calizo a marrón oscuro)
Esta hipótesis surgió luego de que la Patrulla Fronteriza (CBP) revelara los planos, en los que se puede observar que el muro tendrá una extensión de 70 kilómetros e invadiría el curso del Río Grande en el condado de Hidalgo, donde se encuentra el Centro Nacional de Mariposas, en la ciudad de Mission (Texas).
La reserva medioambiental de Texas surgió en 2004 por medio de la Asociación Norteamericana de Mariposas (NABA), y tiene una extensión de 40 hectáreas en las que habitan un centenar de especies de mariposas. Allí cuentan con un jardín botánico y con una amplia variedad de plantas.
"Va a ser una tierra de nadie, una zona de ejecución de la Patrulla Fronteriza. Lo despejarán todo, no es que este área se vaya a convertir en el Jardín del Edén, va a ser eliminado", dijo la directora ejecutiva del Centro, Marianna Trevino Wright, en declaraciones a la radio pública NPR. (Lea: Los koalas desaparecen a un ritmo más rápido que la población mundial de animales)
Por esta razón, un grupo de científicos denunció en julio que la construcción del muro es una amenaza negativa sobre el medioambiente y pondría en peligro algunas de las regiones con mayor diversidad biológica del continente, porque fragmentaría los hábitats de la vida silvestre.
A raíz de esta denuncia, una coalición de organizaciones de defensa de los derechos medioambientales presentó, el 18 de octubre, una demanda en Texas contra el Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
Mientras sale la respuesta de la demanda, los grupos, entre ellos el Centro Nacional de Mariposas, se movilizó para protestar contra las medidas interpuestas por el DHS ya que, según ellos, el departamento renuncia a una docena de leyes ambientales que impedían construir la barrera fronteriza.
Por su parte, la administración del presidente Trump defiende que el sector texano del Valle de Río Grande es una zona de alto flujo de inmigrantes, que pasan de manera ilegal. Este año trataron de entrar al país norteamericano al menos 23.757 menores no acompañados y 63.278 familias. (Lea también: China legaliza el comercio de productos a base de tigre o rinoceronte)
El Centro Nacional de Mariposas informó este jueves que el muro que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quiere construir a lo largo de la frontera con México dividiría en dos partes la reserva medioambiental de Texas, lo que podría originar su desaparición. (Puede leer: El fondo del mar está pasando de blanco calizo a marrón oscuro)
Esta hipótesis surgió luego de que la Patrulla Fronteriza (CBP) revelara los planos, en los que se puede observar que el muro tendrá una extensión de 70 kilómetros e invadiría el curso del Río Grande en el condado de Hidalgo, donde se encuentra el Centro Nacional de Mariposas, en la ciudad de Mission (Texas).
La reserva medioambiental de Texas surgió en 2004 por medio de la Asociación Norteamericana de Mariposas (NABA), y tiene una extensión de 40 hectáreas en las que habitan un centenar de especies de mariposas. Allí cuentan con un jardín botánico y con una amplia variedad de plantas.
"Va a ser una tierra de nadie, una zona de ejecución de la Patrulla Fronteriza. Lo despejarán todo, no es que este área se vaya a convertir en el Jardín del Edén, va a ser eliminado", dijo la directora ejecutiva del Centro, Marianna Trevino Wright, en declaraciones a la radio pública NPR. (Lea: Los koalas desaparecen a un ritmo más rápido que la población mundial de animales)
Por esta razón, un grupo de científicos denunció en julio que la construcción del muro es una amenaza negativa sobre el medioambiente y pondría en peligro algunas de las regiones con mayor diversidad biológica del continente, porque fragmentaría los hábitats de la vida silvestre.
A raíz de esta denuncia, una coalición de organizaciones de defensa de los derechos medioambientales presentó, el 18 de octubre, una demanda en Texas contra el Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
Mientras sale la respuesta de la demanda, los grupos, entre ellos el Centro Nacional de Mariposas, se movilizó para protestar contra las medidas interpuestas por el DHS ya que, según ellos, el departamento renuncia a una docena de leyes ambientales que impedían construir la barrera fronteriza.
Por su parte, la administración del presidente Trump defiende que el sector texano del Valle de Río Grande es una zona de alto flujo de inmigrantes, que pasan de manera ilegal. Este año trataron de entrar al país norteamericano al menos 23.757 menores no acompañados y 63.278 familias. (Lea también: China legaliza el comercio de productos a base de tigre o rinoceronte)