Nueva vida bajo el mar de la Antártida
Las imágenes fueron reveladas por parte del Consejo Antártico Británico.
EFE
Las imágenes incluyen peces de hielo, pulpos, cerdos marinos, arañas marinas gigantes, rayas desconocidas y estrellas de mar, descubiertas en el marco de un proyecto internacional sobre la biodiversidad y la necesidad de combatir el calentamiento global.
Científicos europeos, estadounidenses, australianos y sudafricanos se embarcaron en el James Clark Ross, barco de investigación del BAS, para recopilar está colección especial de animales marinos del mar de Bellingshausen.
El Bellingshausen está al oeste de la península Antártica, entre las islas de Alejandro I y Thurston, y los investigadores consideran que es uno de los mares del mundo que más rápidamente se calienta.
El director de la expedición, David Barnes, manifestó en un comunicado que "poca gente se da cuenta de lo rica que es la biodiversidad del océano del Sur. Incluso un barco de arrastre puede revelar una fascinante variedad de criaturas extrañas y maravillosas comparable a la que se encuentra en un arrecife de coral".
"Estos animales son potencialmente muy buenos indicadores de los cambios medioambientales, dado que muchos ocurren cerca de la superficie, que está cambiando con rapidez, pero también en aguas más profundas, que se calentarán mucho más rápidamente", dijo.
Este estudio, señaló Barnes, "nos permite entender mejor como se adaptará el medioambiente a los cambios" y constatar que "algunas especies son increíblemente sensibles a los cambios de temperatura".
La bióloga Sophie Fielding, especialista en krill -los crustáceos planctónicos semejantes al camarón que constituyen el alimento principal de ballenas, focas y pingüinos-, también constató variaciones considerables en superficies relativamente pequeñas.
"Los cambios en la superficie de la Tierra afectan directamente al océano circundante y a su fauna marina. Por ejemplo, que los glaciares se derritan, que las capas de hielo se derrumben y que la capa de hielo del invierno se reduzca tiene un impacto en la vida marina. Queremos entender ese impacto y cuáles pueden ser las implicaciones para la cadena alimenticia", señaló Fielding.
Las imágenes incluyen peces de hielo, pulpos, cerdos marinos, arañas marinas gigantes, rayas desconocidas y estrellas de mar, descubiertas en el marco de un proyecto internacional sobre la biodiversidad y la necesidad de combatir el calentamiento global.
Científicos europeos, estadounidenses, australianos y sudafricanos se embarcaron en el James Clark Ross, barco de investigación del BAS, para recopilar está colección especial de animales marinos del mar de Bellingshausen.
El Bellingshausen está al oeste de la península Antártica, entre las islas de Alejandro I y Thurston, y los investigadores consideran que es uno de los mares del mundo que más rápidamente se calienta.
El director de la expedición, David Barnes, manifestó en un comunicado que "poca gente se da cuenta de lo rica que es la biodiversidad del océano del Sur. Incluso un barco de arrastre puede revelar una fascinante variedad de criaturas extrañas y maravillosas comparable a la que se encuentra en un arrecife de coral".
"Estos animales son potencialmente muy buenos indicadores de los cambios medioambientales, dado que muchos ocurren cerca de la superficie, que está cambiando con rapidez, pero también en aguas más profundas, que se calentarán mucho más rápidamente", dijo.
Este estudio, señaló Barnes, "nos permite entender mejor como se adaptará el medioambiente a los cambios" y constatar que "algunas especies son increíblemente sensibles a los cambios de temperatura".
La bióloga Sophie Fielding, especialista en krill -los crustáceos planctónicos semejantes al camarón que constituyen el alimento principal de ballenas, focas y pingüinos-, también constató variaciones considerables en superficies relativamente pequeñas.
"Los cambios en la superficie de la Tierra afectan directamente al océano circundante y a su fauna marina. Por ejemplo, que los glaciares se derritan, que las capas de hielo se derrumben y que la capa de hielo del invierno se reduzca tiene un impacto en la vida marina. Queremos entender ese impacto y cuáles pueden ser las implicaciones para la cadena alimenticia", señaló Fielding.