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Los habitantes del corregimiento de Mayorquín, en el Valle del Cauca, se llevaron una sorpresa a finales de diciembre. En sus playas apareció un elefante marino, animal que no suele observarse en Colombia y que frecuenta las costas del sur de América (La Patagonia, Tierra de Fuego y las Islas Malvinas) y las de México y Estados Unidos. (Lea: 480 millones de animales son víctimas de los incendios en Australia)
El avistamiento lo hizo un poblador que grabó con su cámara del celular al individuo. Posteriormente, biólogos de la Corporación Autónoma Regional del Valle del Cauca (CVC) confirmaron el hallazgo. Según ellos, se trata de un ejemplar que pertenece a una familia de cuatro elefantes marinos. (Lea El humo de Australia podría dar la vuelta al mundo y afectar la salud de muchas personas)
No es la primera vez que se observa esta especie en territorio colombiano. Hace un año también fue visto un elefante marino en playas chocoanas, aunque ya había muerto.
"Recomendamos que si hay un encuentro con uno de estos mamíferos se realice la grabación o toma de fotos a una distancia prudente y en silencio. Nuestros técnicos seguirán realizando monitoreos para proteger a esta familia”, dijo en un comunicado Edwar Leonardo Sevilla, biólogo marino de la CVC.
Según advierte esta corporación en un boletín, este animal es carnívoro (por lo general, se alimenta de peces y algunos crustáceos) y, aunque no se caracteriza por atacar a humanos, tiene una mordida que puede ser peligrosa.
“Probablemente, el hecho de ver elefantes marinos en las costas del Pacífico colombiano se deba algunos cambios climáticos en áreas marinas”, dice la corporación.