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Desde la madrugada del viernes (20 de enero) cientos de campesinos, mineros, agricultores y comerciantes habitantes de páramos en Santander bloquearon las vías que de la capital del departamento llevan a San Gil y a Cúcuta. El motivo de la protesta radicaba en que consideraban que los procesos de delimitación del páramo de Almorzadero y Santurbán han afectado sus actividades económicas. (Puede leer: ¿Funcionó el cuestionable experimento de lanzar semillas desde un helicóptero?)
Hasta Pamplona (Norte de Santander), donde se adelantaba uno de los bloqueos, llegaron varios funcionarios del gobierno nacional para reunirse con los líderes de las movilizaciones y buscar una salida a las protestas que afectaron la movilidad en la región.
La comisión de alto gobierno, que estuvo encabezada por Sandra Vilardy, viceministra de Políticas y Normalización Ambiental del Ministerio de Ambiente, y Lilia Clemencia Solano, viceministra para el Diálogo Social, la Igualdad y los Derechos Humanos del Ministerio del Interior, se reunió en horas de la tarde del sábado (21 de enero) con algunos de los líderes de las protestas y lograron llegar a un acuerdo. (Le puede interesar: Estiman, por primera vez, la cantidad de dióxido de carbono que captura el planeta)
“Logramos acordar que el diálogo esté por encima cualquier conflicto y vamos a responder de manera articulada las preocupaciones que tienen. Es una buena noticia para reabrir la vía”, señaló al finalizar el encuentro Solano.
Además, como solicitaban los parameros que adelantaban los bloqueos, se acordó que el presidente Gustavo Petro visite la región en los próximos días y se reúna con las comunidades. “El presidente hará presencia en el territorio de los páramos y el próximo 3 de febrero estará para una gran conversación con los campesinos que habitan esta región”, apuntó Solano. (También puede leer: Gobierno adelanta compra de predios para damnificados de La Mojana y Cauca)
Entre las inconformidades que han manifestado los parameros, se encuentra el hecho de que los procesos de delimitación de los páramos de Almorzadero, así como el de Santurbán, que aún no concluye, no ha tenido en cuenta las actividades económicas que estas comunidades han realizado históricamente.
Piden, por ejemplo, que la delimitación se lleve a cabo teniendo en cuenta sus intereses y “que defina claramente las condiciones en que, campesinos y mineros, asentados en este territorio y dueños de la tierra, vamos a poder seguir haciendo aprovechamiento de nuestros recursos naturales, y conservando el páramo como hasta ahora lo hemos hecho”.