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El Espectador publicó este domingo una investigación sobre la primera mina de “tierras raras” que quieren hacer en Colombia. El proyecto, llamado Minastyc, está siendo impulsado por la minera canadiense Auxico Resources Inc. en el Vichada, a solo unos kilómetros de Puerto Carreño, la capital. (Le recomendamos: La mina de “tierras raras” que quieren hacer frente a un refugio de biodiversidad)
A través de comnuicados de prensa, la empresa anunció que, tanto la Agencia Nacional de Minería, como Corporinoquía, la autoridad ambiental regional, entregaron los permisos necesarios para iniciar la explotación de estos minerales en el país. Con este paso, Auxico se convertiría en la primera empresa en extraer tierras raras en Colombia. Sin embargo, como contamos en esta investigación, el proyecto genera varias inquietudes: las tierras y los permisos para extraer los minerales no están a nombre de la empresa, las comunidades indígenas vecinas están inconformes y las millonarias ganancias que presentan en los informes internacionales no cuadran del todo con lo que podría extraerse de allí. Para entender mejor esto, resolvemos algunas inquietudes sobre los minerales.
¿Qué son las tierras raras?
Aunque los minerales conocidos como “tierras raras” suenan menos familiares que otros como el cobre o el oro, lo cierto es que están en innumerables productos que utilizamos en el día a día: las baterías recargables, los equipos electrónicos, los cables de fibra óptica, los celulares y hasta los jets. También se usan en sistemas de defensa (armas) y de telecomunicaciones. En palabras sencillas, son un grupo de 17 elementos de la tabla periódica que tienen propiedades geoquímicas similares y que, generalmente, se encuentran juntos en las formaciones geológicas.
A pesar de su nombre, estos elementos son relativamente abundantes en la Tierra. La “rareza” es encontrarlos en las cantidades y concentraciones suficientes para que sean de “utilidad comercial”, es decir, que ameriten una inversión económica. Su extracción y refinamiento suele ser muy costoso, porque, al tener propiedades similares, son muy difíciles de separar.
Técnicamente, los minerales de tierras raras, también conocidos como “semillas de tecnología” se encuentran en un grupo de 15 lantánidos, mas el escandio y el itrio. Y se dividen en ligeros o pesados, estos últimos son menos comunes, lo que los hace también más valorados.
Con todas estas variables, el proyecto Minastyc, en Colombia, proyecta extraer un millón de toneladas métricas en 17 años, una cantidad suficiente como para llenar 50.000 volquetas con tierras raras.
¿Para qué se utilizan las tierras raras? ¿Por qué son importantes?
Como cuenta este estudio, antes de la producción de los primeros televisores, a mediados de la década de 1960, las tierras raras tenían relativamente pocos usos, pero a medida que se desarrollaron nuevas tecnologías, su demanda aumentó. Desde entonces se han impulsado las inversiones y los proyectos para encontrar nuevas fuentes de extracción de estos minerales.
El primer reporte anual del mercado de la Agencia Internacional de Energía, publicado en julio de 2023, reveló que el mercado de minerales para ayudar a impulsar vehículos eléctricos, turbinas de viento, paneles solares y otras tecnologías claves para la transición energética se ha duplicado en tamaño durante los últimos cinco años. Las tecnologías de energía limpia están impulsando una gran demanda de minerales como litio, cobalto, níquel y cobre, pero también de tierras raras. Solo entre 2017 y 2022, señala el informe, la demanda de estas últimas aumentó x 2.5 veces.
Al combinarse con otros metales, producen aleaciones que potencian los usos de los minerales con los que se combinan. La empresa Auxico ha anunciado que, sin tierras raras, no habría, por ejemplo, vehículos eléctricos.
“El titanio es tan resistente como el acero, pero pesa aproximadamente la mitad. Es dos veces más resistente que el aluminio, pero sólo un 60% más pesado. El titanio se combina con hierro, aluminio, vanadio, níquel, molibdeno y otros metales para producir aleaciones de alto rendimiento. Los motores a reacción, las naves espaciales, los equipos militares, los cojinetes, los chalecos antibalas y otros productos de alta tecnología necesitan piezas fabricadas con estas aleaciones”, aseguran en un comunicado.
Asimismo, son fundamentales para la transición energética. Y mientras el despliegue de energías renovables alcanza nuevos récords, los minerales necesarios para esa transición también se convierten en un foco importante de interés. Actualmente, uno de los mayores debates relacionados con estos minerales, tene que ver con la diversidad del suministro.
¿Quién produce “tierras raras”?
Como su extracción y procesamiento es tan complejo, el mercado de las tierras raras ha estado dominado por China, que desde los años 90 empezó a establecer el monopolio alrededor de estos minerales.
En 2022 y 2023, China siguió siendo el mayor productor y procesador de REE del mundo, representando el 70% de la producción y el 90% del procesamiento. Myanmar es un importante exportador de minerales de tierras raras a China.
A nivel mundial, se están desarrollando varios proyectos de procesamiento, incluso en los Estados Unidos (MP Materials) y Canadá (SRC), y en 2022, los gobiernos de Estados Unidos, Australia y Canadá financiaron plantas nacionales de minería y procesamiento de tierras raras. En 2023, el gobierno japonés proporcionó financiación adicional para construir una instalación de producción y separación de tierras raras pesadas, con el objetivo de diversificar los suministros de estos minerales fuera de China. Por solo nombrar un ejemplo, más del 90 % de tierras raras que importa la Unión Europea proviene de ese país asiático.
La difícil producción de tierras raras
Como se mencionó, la producción y procesamiento de tierras raras no es tarea sencilla. Con el aumento de los precios de las tierras raras hace una década, y su popularidad para nuevas tecnologías, se impulsó la apertura de cientos de nuevos proyectos mineros en todo el planeta. Sin embargo, no más de cinco llegaron a producción. Solo uno logró pasar de la extracción de mineral al procesamiento y separación a gran escala.
Se trató de un proyecto australiano que solo pudo alcanzar la escala comercial con el apoyo financiero del gobierno japonés.
“Una razón importante por la que los centros de procesamiento se concentran principalmente en China, es porque las características químicas de las tierras raras dificultan la separación. Como consecuencia, se necesitan conocimientos especiales, las plantas de procesamiento son costosas y los costos operativos elevados”, asegura un informe de la organización IRENA.
Como mencionamos más arriba, estos minerales son muy difíciles de separar entre sí porque tienen naturalezas químicas muy similares. “Para extraer las tierras presentes en los concentrados minerales, el mineral que contiene tierras raras debe descomponerse mediante técnicas hidrometalúrgicas y pirometalúrgicas que utilizan ácidos y álcalis, generando lixiviados. El concentrado se seca y se tuesta con ácido sulfúrico y posteriormente se lixivia nuevamente con ácido sulfúrico. Este lixiviado se trata con hidrocarbonato de amonio para extraer las tierras raras. Estos se tratan con cloruro de hidrógeno y se extraen nuevamente”, explican. Durante el proceso, se requiere el uso constante de químicos y se generan numerosos residuos tóxicos.
¿Qué es Auxico Resources?
Fundada en 2014 en Montreal, Auxico Resources Inc. se ha dedicado a la adquisición, exploración y desarrollo de proyectos mineros en México, Brasil, Colombia, Bolivia y la República Democrática del Congo. Ahora, con el proyecto en Vichada, que se encuentra a solo 15 kilómetros la capital, Puerto Carreño, espera ubicarse en el top tres de las mineras de tierras raras más grandes del mundo. “De acuerdo con nuestros geólogos, Carreño se puede convertir en una potencia minera de estos minerales. En este momento se estaría posicionando como el tercero en el mundo”, aseguró Harold Barbosa, vicepresidente de Auxico para Latinoamérica, el pasado 22 de septiembre ante la Asamblea Departamental de Vichada.
Esta empresa se ha centrado en la producción de minerales críticos y metales de alto valor, incluidos el niobio, el tantalio, los metales del grupo del platino (como el platino y el iridio) y los elementos de tierras raras. La compañía asegura que es el agente comercial exclusivo de concentrados de tierras raras de la República Democrática del Congo, y busca ser un importante proveedor de minerales críticos y elementos de tierras raras para las economías occidentales.
Sumando el proyecto de Colombia, Auxico asegura que tiene acceso a cerca de 4 millones de toneladas de dichos minerales, y que cuenta con “los depósitos más grandes fuera de China”.
¿Cuál fue el permiso que otorgaron a Auxico Resources en Colombia?
Según Corporinoquía, la autoridad ambiental que entregó la licencia para explotar estos minerales en Vichada, cerca a Puerto Carreño, el permiso otorgado es para la “explotación y beneficio de minerales de Niobio y sus concentrados, Tantalio y sus concentrados, Vanadio y sus concentrados, Circonio y sus concentrados, Estaño y sus concentrados y Oro y sus concentrados”. Asimismo, aseguran que, aunque el proyecto tiene un área de 189 hectáreas (un poco más grande que el Parque Simón Bolívar, en Bogotá), la licencia temporal que tiene Minastyc, actualmente, solo les permite extraer minerales de un área de tres hectáreas.
Para que Corporinoquía entregara el permiso fue necesario, primero, que la Agencia Nacional de Minería (ANM) otorgara al proyecto Minastyc el título minero, aprobando su Plan de Obras y Trabajo. Actualmente, el título y el permiso ambiental de Minastyc no están a nombre de Auxico, sino de un ciudadano colombiano, campesino, habitante de la zona rural de Puerto Carreño. Además, el área para extraer los minerales se encuentra en un área importante para la conservación de la biodiversidad, rodeada de reservas naturales y resguardos indígenas. Puede conocer más detalles de la investigación en este enlace.