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El pasado 17 de julio en los municipios Quetame y Guayabetal, en Cundinamarca, se registró una avalancha que provocó la muerte de 22 personas, dañó dos puentes clave en esa zona y destruyó 20 viviendas. Un día después, el Servicio Geológico Colombiano (SGC), instaló un puesto de monitoreo en el lugar para analizar las condiciones y, así, poder tomar las medidas de prevención pertinentes. (Lea: Avanza la instalación del puente temporal en Quetame: ANI)
En su más reciente boletín, el servicio realizó algunas sugerencias a las autoridades, como delimitar las zonas que se deben desalojar en el área urbana de Quetame y Chipaque (en Guayabetal); adquirir datos geofísicos en estos cascos urbanos que permitirán un mejor entendimiento de las condiciones del subsuelo; y generar imágenes aéreas y modelos digitales del terreno en las quebradas Naranjal y Marcelita, y el río Contador.
Con los datos obtenidos en estas tres diferentes estrategias, los expertos, añade el servicio, podrán generar modelaciones de eventuales avenidas torrenciales, las cuales son fundamentales para diseñar y construir cualquier tipo de infraestructura en la zona.
Las avenidas torrenciales, que fue lo que ocurrió en zona rural de Quetame, “es un flujo de detritos, es decir, un tipo de movimiento en masa detonado por un incremento en las lluvias en un corto periodo, el cual, en este caso conllevó al desbordamiento de la quebrada Naranjal y del río Contador”, explica la entidad. (Les puede interesar: Hasta aquí hemos llegado: panorama de los problemas en la vía al Llano)
De acuerdo con el servicio, “en caso de que las lluvias continúen, podrían ocurrir nuevos movimientos en masa”. Además, dice, “las condiciones en Quetame y en sus zonas de alrededor siguen siendo inestables”.
Para evitar una tragedia como la del pasado 17 de julio, el SGC recomienda:
1. Instalar un Sistema de Alerta Temprana (SAT) para monitorear las quebradas Naranjal y del río Contador, que permita hacer un control de la evolución de estos cursos de agua y especialmente la posible generación de avenidas torrenciales que puedan afectar la infraestructura en la zona.
2. Continuar monitoreando los procesos de movimientos en masa en el área urbana del municipio de Quetame, para evaluar su evolución y así definir zonas que deben de ser evacuadas.
3. Que el área definida para la construcción de los reasentamientos cuente con estudios detallados de amenaza. (Lea también: Quetame: anuncian ayudas a comerciantes, mientras avanza la instalación del puente)
4. Generar los actos administrativos necesarios para que, en el área de la tragedia, se modifique la reglamentación del uso de suelo y se evite el establecimiento de viviendas en zonas de amenaza alta por avenidas torrenciales.
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