Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
El páramo de Sumapaz, que bordea a Bogotá, fue un punto estratégico en la guerra entre las Farc y el Estado colombiano por más de 50 años. Por allí, ocultos entre la niebla y los frailejones circulaban de un lado, combatientes de los frentes 51 y 53, y también miembros de la Fuerza de Tarea del Sumapaz y el Batallón de Alta Montaña ‘Antonio Arredondo’ (Bamar). Hoy, el mismo ecosistema, lentamente se convierte en un símbolo de paz.
Los mismos soldados que tiene la tarea de mantener la seguridad del lugar, le roban tiempo a sus tareas en la milicia para apoyar un proyecto de gran envergadura impulsado por entidades como Parques Nacionales, la CAR, Universidad de los Andes y el Jardín Botánico. La idea de la iniciativa es trasplantar, germinar y sembrar frailejones en zonas deforestadas y/o erosionadas del páramo que suministra parte del agua que consumen los bogotanos.
A más de 3.600 metros de altura, con temperaturas promedio de hasta menos seis grados centígrados, el Cabo Segundo Alfredo Vargas, Tecnólogo en Control y Gestión Ambiental, y la Doctora Eloisa Lasso, Investigadora y Profesora de Ciencias Biológicas de la Universidad de los Andes, son quienes imparten las órdenes en esta batalla contra el deterioro del páramo. El proceso comienza con la recolección de la flor del frailejón ya polinizada para extraerle la semilla. Luego se siembran en un vivero construido por los mismos soldados con el fin de hacerles un proceso de germinación controlado, "buscando las mejores características de crecimiento, de manera que estas plantas se entreguen al páramo en las mejores condiciones para la producción de agua".
A lomo de mula llevan las plantas germinadas hasta los lugares elegidos para la siembra. Hasta hoy, como lo informó el la Agencia de Noticias del Ejército Nacional, ya tienen cerca de diez mil frailejones. La restauración de un páramo es un proceso lento. Un frailejón tan solo crece entre 1 y 2,5 centímetros al año. Cuando sean adultos, cada una de estas plantas gracias a llegará a captar hasta 35 litros de agua líquida al día; agua que van expulsando a los embalses como también almacenando en su cuerpo hasta 40 veces su peso.