Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
El mercado de carros usados en Colombia ha experimentado un crecimiento sostenido en los últimos años, impulsado por la búsqueda de alternativas más económicas frente a los vehículos nuevos. Sin embargo, este aumento en la demanda también ha puesto de manifiesto la necesidad de contar con criterios claros y confiables para realizar una compra segura. Ante la diversidad de opciones disponibles, desde concesionarios autorizados hasta plataformas digitales, los compradores enfrentan el desafío de identificar proveedores confiables que ofrezcan vehículos en buen estado, con documentación en regla y garantías adecuadas.
De acuerdo con el último informe de la Asociación Nacional de Movilidad Sostenible (Andemos), el sector de vehículos usados en Colombia muestra un crecimiento constante en 2024. Durante octubre se efectuaron 82.063 traspasos, lo que equivale a un incremento del 8,2 % en comparación con el mismo mes del año pasado.
En este mercado, algunas marcas destacan por su volumen de ventas. Chevrolet mantiene su posición de liderazgo al registrar 20.611 traspasos en octubre, seguida por Renault con 12.731 unidades, Mazda con 6.902, Kia con 5.726 y Toyota con 5.551.
Por otra parte, Bogotá encabeza las estadísticas regionales con 26.744 vehículos comercializados, mientras que otras ciudades como Cali, Envigado, Medellín y Sabaneta también muestran cifras significativas.
El reciente incremento en la compra de vehículos nuevos, impulsado por el éxito del Salón del Automóvil, ha abierto una ventana significativa para el mercado de carros usados en Colombia. Este panorama refleja una dinámica interesante: por cada vehículo nuevo vendido, se transfieren aproximadamente tres usados. En este contexto, Pedro Nel Quijano, presidente ejecutivo de Aconauto, sugiere que los compradores consideren acudir a los concesionarios de las marcas presentes en el país, ya que ofrecen una asesoría integral y confiable para quienes buscan adquirir un vehículo de segunda mano.
Para Quijano, los concesionarios destacan como la opción más segura para encontrar carros usados en óptimas condiciones. Los vehículos disponibles han pasado rigurosas evaluaciones que garantizan su buen estado mecánico, de carrocería y su situación legal, sin deudas fiscales ni inconvenientes judiciales. Además, estos establecimientos cuentan con equipos de expertos en diferentes áreas, quienes realizan inspecciones técnicas exhaustivas para ofrecer a los compradores confianza y tranquilidad en la inversión.
“Adicionalmente, permite ofrecer servicios de peritaje y asesoría legal que eliminan las incertidumbres propias de adquirir un vehículo usado. Estas herramientas fortalecen la confianza entre compradores y vendedores, ya que aseguran que los automotores se encuentren en óptimas condiciones tanto desde el punto de vista técnico como legal”, sostiene Quijano.
Le sugerimos: Así se deben pasar los resaltos o “policías acostados” de forma correcta
La confianza en el mercado de carros usados se construye mediante estrategias que promuevan el consumo responsable y refuercen la percepción de seguridad en las transacciones. Aconauto, destaca la importancia de emplear mensajes claros que resalten el impacto positivo de estas compras en el crecimiento económico, junto con políticas que impulsen la renovación del parque automotor a través de tecnologías modernas y sostenibles.
Por su parte, la integración de herramientas tecnológicas como las bases de datos del RUNT y Fasecolda mejora la transparencia en las transacciones. Estas plataformas permiten acceder a información detallada sobre el historial del vehículo, incluyendo antecedentes legales, deudas fiscales y registros de reclamaciones. Esta combinación de tecnología y gestión eficiente facilita una toma de decisiones más segura y confiable para los compradores.
Proceso de comercialización de carros usados
El mercado de vehículos de segunda mano sigue una serie de pasos que, aunque no siempre son evidentes para los compradores, garantizan una transacción segura y transparente. En el caso de los concesionarios, la adquisición de estos carros se realiza bajo estrictas condiciones, ya sea por retoma o por oportunidad.
Es indispensable que el vehículo esté al día con sus obligaciones legales, como impuestos, Soat, revisión técnico-mecánica (RTM) y comparendos, antes de ser considerado para la compra.
Una vez superada la revisión legal, se realiza un peritaje técnico para evaluar el estado del motor, el chasís y la carrocería. Si el vehículo cumple con los estándares comerciales, el concesionario presenta una oferta al propietario. De llegar a un acuerdo, se inicia el proceso de compraventa, que incluye los siguientes pasos:
- Diligenciamiento del formulario de traspaso de propiedad: Este documento del RUNT debe ser firmado por ambas partes, incluir las huellas dactilares y las improntas del motor y el chasís.
- Autorización mediante Mandato: Este documento permite a un gestor de tránsito realizar el trámite ante las autoridades. La firma del vendedor debe ser autenticada en notaría.
- Elaboración del contrato de compraventa: En este acuerdo se estipula el método de pago y se ajusta el valor de los servicios, como el Soat y la RTM, según los meses restantes de vigencia.
- Liberación de prenda bancaria (si aplica): Si el vehículo tiene una deuda pendiente, se elabora un documento para que el banco autorice la liberación de la propiedad, tras el pago correspondiente.
Es importante destacar que el vendedor asume el impuesto de retención en la fuente, mientras que los costos del RUNT y el servicio del gestor son compartidos entre ambas partes. Este procedimiento asegura una transacción confiable y sin contratiempos.
Le puede interesar: ¿Para qué sirven las rayas del vidrio trasero del carro y cómo activarlas?
Para mejorar la eficiencia en los trámites de traspaso de vehículos, Aconauto plantea la necesidad de integrar digitalmente a todas las Secretarías de Tránsito del país. Esta propuesta busca reducir los tiempos y costos asociados con el traslado físico de personas y documentos entre municipios. La adopción de una plataforma centralizada permitiría un acceso más rápido y seguro a la información necesaria para gestionar las transferencias de propiedad.
Según Quijano, la tecnología blockchain se presenta como una solución innovadora para este desafío. Su capacidad para encriptar datos y garantizar la unicidad de la información ofrece un nivel de seguridad ideal para procesos que involucran documentos sensibles, como las especies venales. Este sistema, ya utilizado con éxito en sectores como la banca, los seguros y la industria automotriz, permitiría realizar transacciones remotas de manera segura, eliminando riesgos de fraude y duplicidad de registros.
Por ejemplo, con blockchain sería posible efectuar el traspaso de un vehículo matriculado en una ciudad como Ibagué y vendido en Cartagena en solo minutos, sin necesidad de movilizar documentos físicos o personas. “Esto no solo optimizaría el tiempo del proceso, sino que también garantizaría la transparencia en cada etapa de la compraventa, consolidando la confianza entre compradores y vendedores”, añade Quijano.