Colmotores dio el gran salto

Era un paso obligado y se tenía que dar. Pasar de ensamblador a fabricante fue un proyecto que GM Colmotores puso a rodar en 2009 y que el pasado martes comenzó a consolidarse con la primera piedra del edificio de Zoficol (Zona Franca Industrial de Colmotores), en donde operarán, a partir de 2013, las dos prensas para el proceso de estampado de piezas de dos nuevos modelos de la marca Chevrolet, que se darán a conocer en su momento.

Frente a la entrada en vigencia de diferentes tratados de libre comercio y la posibilidad de que se firmen otros, Chevrolet tenía dos caminos: convertirse en importador (quizás el más fácil) o dar el salto hacia su plan de reconversión industrial, en el que además de la fabricación de las piezas está contemplada la mecanización de algunos procesos y la incorporación de nuevas tecnologías en su planta de Bogotá.

Y optaron por lo segundo, como lo dijo Jaime Ardila, presidente de GM para Suramérica. “Nosotros producimos en los lugares que vendemos. Somos importadores donde no hay ninguna alternativa, y Colombia no es el caso. Éramos conscientes de que teníamos que dar el salto tecnológico para ser más competitivos, pues el ensamble ya no lo es en el país. O dábamos el paso o nos teníamos que volver importadores”.

Entre tanto, Santiago Chamorro, presidente de GM Colmotores, afirmó que “traer conjuntos CKD (piezas desarmadas) era más barato que importar y los costos de la logística eran inferiores, pues existía una protección arancelaria y además nuestra moneda era más débil. Pero esto cambió y teníamos que dar el salto para ser más competitivos”.

Para el efecto, GM Colmotores invertirá $380 mil millones, y uno de los compromisos con el Gobierno es crear en la zona franca 150 nuevos empleos directos. En la zona de soldadura, como explicó Mario Caballero, vicepresidente de manufactura, entrarán a operar seis nuevos robots (deben comenzar a hacerlo a finales de abril), ocho en la zona de pintura y 10 en la zona franca, que tendrá un área de 41.300 metros cuadrados.

Las prensas, de origen coreano (una de 2.250 toneladas y otra de 1.000 toneladas), están en período de prueba en ese país. Con la operación de Zoficol, GM Colmotores estará en capacidad de producir 60.000 vehículos cada año, con piezas estampadas de origen local.

En la zona franca se realizarán dos procesos nuevos: el estampado de paneles que hasta hoy no se realiza en el país y el grafado. El primero de ellos consiste en moldear láminas de acero para dar la forma a paneles o piezas de la carrocería y el segundo en tomar los paneles de acero y unirlos mediante un proceso de doblaje perimetral con la ayuda de los 10 robots.

En Zoficol, cuyo capital es 100% de Colmotores, se fabricarán hasta 11 tipos de paneles diferentes, entre los que se cuentan tapa de baúl, tapa de motor, techos, laterales, puertas y guardabarros.

Uno de los invitados especiales al acto del descubrimiento de la primera piedra de Zoficol fue el presidente Juan Manuel Santos, quien dijo que “GM Colmotores ha marcado una huella en las familias colombianas y lo que es bueno para ellos es bueno para el país”.

Era un paso obligado y se tenía que dar. Pasar de ensamblador a fabricante fue un proyecto que GM Colmotores puso a rodar en 2009 y que el pasado martes comenzó a consolidarse con la primera piedra del edificio de Zoficol (Zona Franca Industrial de Colmotores), en donde operarán, a partir de 2013, las dos prensas para el proceso de estampado de piezas de dos nuevos modelos de la marca Chevrolet, que se darán a conocer en su momento.

Frente a la entrada en vigencia de diferentes tratados de libre comercio y la posibilidad de que se firmen otros, Chevrolet tenía dos caminos: convertirse en importador (quizás el más fácil) o dar el salto hacia su plan de reconversión industrial, en el que además de la fabricación de las piezas está contemplada la mecanización de algunos procesos y la incorporación de nuevas tecnologías en su planta de Bogotá.

Y optaron por lo segundo, como lo dijo Jaime Ardila, presidente de GM para Suramérica. “Nosotros producimos en los lugares que vendemos. Somos importadores donde no hay ninguna alternativa, y Colombia no es el caso. Éramos conscientes de que teníamos que dar el salto tecnológico para ser más competitivos, pues el ensamble ya no lo es en el país. O dábamos el paso o nos teníamos que volver importadores”.

Entre tanto, Santiago Chamorro, presidente de GM Colmotores, afirmó que “traer conjuntos CKD (piezas desarmadas) era más barato que importar y los costos de la logística eran inferiores, pues existía una protección arancelaria y además nuestra moneda era más débil. Pero esto cambió y teníamos que dar el salto para ser más competitivos”.

Para el efecto, GM Colmotores invertirá $380 mil millones, y uno de los compromisos con el Gobierno es crear en la zona franca 150 nuevos empleos directos. En la zona de soldadura, como explicó Mario Caballero, vicepresidente de manufactura, entrarán a operar seis nuevos robots (deben comenzar a hacerlo a finales de abril), ocho en la zona de pintura y 10 en la zona franca, que tendrá un área de 41.300 metros cuadrados.

Las prensas, de origen coreano (una de 2.250 toneladas y otra de 1.000 toneladas), están en período de prueba en ese país. Con la operación de Zoficol, GM Colmotores estará en capacidad de producir 60.000 vehículos cada año, con piezas estampadas de origen local.

En la zona franca se realizarán dos procesos nuevos: el estampado de paneles que hasta hoy no se realiza en el país y el grafado. El primero de ellos consiste en moldear láminas de acero para dar la forma a paneles o piezas de la carrocería y el segundo en tomar los paneles de acero y unirlos mediante un proceso de doblaje perimetral con la ayuda de los 10 robots.

En Zoficol, cuyo capital es 100% de Colmotores, se fabricarán hasta 11 tipos de paneles diferentes, entre los que se cuentan tapa de baúl, tapa de motor, techos, laterales, puertas y guardabarros.

Uno de los invitados especiales al acto del descubrimiento de la primera piedra de Zoficol fue el presidente Juan Manuel Santos, quien dijo que “GM Colmotores ha marcado una huella en las familias colombianas y lo que es bueno para ellos es bueno para el país”.