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Al cierre del primer semestre de 2024, los vehículos de bajas y cero emisiones en Colombia han mostrado un desempeño positivo, destacando el crecimiento en las ventas de vehículos eléctricos e híbridos. Según datos del Registro Único Nacional de Tránsito (RUNT), el mercado de vehículos eléctricos ha experimentado un aumento del 73,6% en comparación con el mismo período del año anterior, alcanzando las 3.178 nuevas matrículas. Este crecimiento ha sido impulsado por un incremento del 48% en las ventas de vehículos eléctricos durante junio, que marcó un récord histórico para esta categoría.
Por su parte, el informe más reciente de la Andi y Fenalco revela que en julio de 2024 se vendieron 778 vehículos eléctricos, lo que representa un crecimiento del 267% frente al mismo mes de 2023.
Este notable crecimiento en el mercado de vehículos eléctricos subraya un punto importante: la instalación y el mantenimiento de puntos de carga en Colombia, convirtiéndose en un factor clave para promover la adopción de esta tecnología en el país. Con el aumento del interés en la movilidad sostenible, es esencial comprender los costos y los pasos técnicos involucrados en la instalación de estos puntos de carga en las residencias.
Para instalar un punto de carga para carros eléctricos en una propiedad residencial en Colombia, es necesario seguir ciertos pasos y cumplir con requisitos específicos. Enel X, línea de negocio de Enel Colombia, requiere que el cliente solicite la autorización a la administración del predio para permitir el acceso de la cuadrilla encargada de realizar una verificación inicial de la capacidad de la instalación eléctrica. Una vez completada esta verificación, se enviará una oferta comercial al interesado, quien deberá aprobarla antes de que se proceda con la instalación.
Para un cargador estándar Juicebox de 7kW, el predio debe cumplir con los siguientes requisitos: disponer de un medidor de energía propio, tener una acometida eléctrica bifásica (208 – 220 VAC) y contar con una disponibilidad de potencia mínima de 9 kW. Esto implica que la propiedad no puede estar en construcción ni tener instalaciones eléctricas pendientes de regularización con el operador de red. “Si el predio no cumple con alguno de estos requisitos, Enel X ofrece asesoría para realizar las obras civiles o eléctricas necesarias para completar la instalación del punto de carga”, señalan los voceros de Enel X.
La instalación de puntos de carga para vehículos eléctricos puede llevarse a cabo tanto en predios comerciales como residenciales, siempre que se cumplan las condiciones mínimas de potencia eléctrica (al menos 9 kW) y acometida eléctrica bifásica (208 – 220 VAC). En el caso de instalaciones en hogares unifamiliares, únicamente se requiere el permiso del cliente. Sin embargo, para la instalación en edificios de propiedad horizontal, es necesario obtener la aprobación de la administración del edificio, dado que el proceso implica el paso del cargador a través de zonas comunes de la copropiedad.
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Según Enel X, para habilitar el acceso a la movilidad eléctrica en los hogares, la compañía ofrece una gama de equipos de recarga para vehículos eléctricos, que incluyen potencias de carga de 7 kW, 9 kW y 11 kW en corriente alterna (AC) para conectores tipo 1, tipo 2 y GBT. Estos equipos permiten cargar un vehículo eléctrico utilizando la energía eléctrica doméstica, con un tiempo de carga promedio de alrededor de siete horas, dependiendo del equipo y las capacidades de almacenamiento del vehículo. Los puntos de recarga domésticos se deben conectar al medidor de energía del hogar, y el consumo asociado se reflejará en la factura de energía del cliente, variando según el uso del vehículo.
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Incremento en la factura de energía
Según explica Enel X, el aumento en el cobro de la factura de energía dependerá del uso del vehículo eléctrico, lo que a su vez está influenciado por el tiempo de carga, el modelo del vehículo, el tamaño de la batería y el tipo y potencia del cargador. Un vehículo eléctrico típico tiene una autonomía promedio de 400 km con baterías de 60 kWh, lo que equivale aproximadamente a la distancia entre Bogotá y Cali. Si un cliente promedio en Bogotá recorre alrededor de 40 km diarios, una carga completa de su vehículo podría durar hasta una semana. Para estimar el impacto en la factura de energía, se debe multiplicar la capacidad de la batería por el costo promedio del kilovatio en el predio.
De acuerdo con Jorge Rojas, profesional comercial de EPM, el consumo de kilovatios por parte de un vehículo eléctrico aumenta con el uso, lo que provoca un incremento en el valor de la factura de energía eléctrica. En promedio, los vehículos eléctricos medianos pueden recorrer entre 4.5 y 5.5 kilómetros por cada kilovatio almacenado en sus baterías. Así, un vehículo que recorra 40 kilómetros diarios utilizará aproximadamente entre 142 y 200 kilovatios al mes, una cifra comparable al consumo mensual de un hogar de tres personas.
“Con este uso, se estima que la factura de energía podría aumentar entre un 60% y un 100%, e incluso al doble en algunos casos. Sin embargo, este aumento podría representar hasta un 40% del costo mensual de llenar el tanque de un vehículo similar que funcione con gasolina”, destaca Rojas.
¿Cuál es el costo promedio de instalación de un punto de carga para carros eléctricos en Colombia?
Según Enel X, los clientes interesados en instalar una infraestructura de carga eléctrica deben tener en cuenta que el costo de la instalación aumenta con la distancia entre el medidor de energía y el punto de carga. En otras palabras, el precio total se calcula en función de la distancia desde el tablero de medidores, que factura el consumo energético, hasta el lugar de estacionamiento donde se instalará el cargador. Actualmente, para una instalación lineal sin obras civiles y con una acometida de 20 metros, el costo puede ser de aproximadamente $3.6 millones de pesos más IVA, excluyendo el costo del equipo de recarga.
Una vez instalado, un punto de carga para vehículos eléctricos requiere un mantenimiento básico que incluye la limpieza exterior del equipo y la revisión de las conexiones. Además, es importante inspeccionar la acometida para verificar los valores eléctricos, detectar puntos calientes y asegurar que las conexiones estén en buen estado. Se recomienda realizar este mantenimiento al menos una vez al año para garantizar un funcionamiento seguro y eficiente del sistema de carga.
A su turno, Rojas señala que, una vez recibida la solicitud del cliente, esta se procesa en un plazo de dos días. Durante este tiempo, se coordina la fecha para la visita técnica y la entrega de la cotización para los trabajos eléctricos. Posteriormente, si el cliente decide proceder con EPM, la ejecución de los trabajos se realiza en un período no mayor a cinco días.
La instalación de un punto de carga para vehículos eléctricos en una residencia debe cumplir con el reglamento de instalaciones eléctricas de Colombia (RETIE). Cada red de carga interna tiene características específicas que dependen de factores como el tipo de vehículo, el cargador, el tipo de conexión y la distancia entre el cargador y el medidor. La red eléctrica destinada al cargador debe estar exclusivamente para este equipo, sin que otras luminarias u aparatos eléctricos utilicen dicha red.
El costo estimado para la instalación de un punto de carga varía considerablemente debido a factores como el tipo de residencia (casa o apartamento), la distancia entre el medidor de energía y el lugar de estacionamiento, y el tipo de cargador requerido. En promedio, el costo para la red eléctrica y las protecciones necesarias para instalar el cargador puede oscilar entre 2 y 7 millones de pesos.
“Actualmente, no existen subsidios para la instalación de puntos de carga domésticos o privados para vehículos eléctricos dirigidos a personas naturales. No obstante, algunas inversiones en estos puntos de carga y en vehículos eléctricos podrían ser elegibles para beneficios tributarios. Además, el Ministerio de Minas y Energía, mediante la Resolución CREG 171 de 2021, exime del pago de la contribución a las redes de energía destinada exclusivamente a la carga de vehículos eléctricos”, añade Rojas.