Conducción nocturna, un tema de cuidado

Si va a viajar de noche, extreme los cuidados, pues no hay sentido más importante que la vista como elemento en la prevención de accidentes.

La conducción, según la Organización Mundial de la Salud, es una actividad de altísimo riesgo y si se realiza en la noche, éste se incrementa 300%. De hecho en Colombia, según cifras del Departamento de Medicina Legal, en el último año el 50,5% de las muertes y el 44,5% de los heridos se generaron en accidentes nocturnos.

Hay que tener en cuenta que la oscuridad provoca pérdida de agudeza visual y disminución del campo visual, lo cual hace ocultar peligros visibles con luz diurna, como aquellos objetos de color oscuro, que se hacen imperceptibles en el fondo de la noche.

Otra particularidad es que en la oscuridad no se aprecian completamente ni velocidad ni movimiento, por lo que se necesita de un mayor tiempo para identificar e interpretar correctamente las señalizaciones.

Por lo tanto, la máxima velocidad en condiciones óptimas (piso seco, concentración plena y vehículo en perfectas condiciones) debe ser de 60 Km/h.

Para tener en cuenta

Aumente la distancia de seguimiento en vehículos livianos de 3 a 4 segundos y en vehículos pesados de 5 a 6 segundos.

Si aparecen síntomas de fatiga, se debe detener el vehículo inmediatamente. Descanse por lo menos 15 minutos y cambie la rutina, es decir, haga pausas activas que ayuden a aumentar el flujo sanguíneo, cada 1,5 horas.

Cuando empiece a oscurecer, se deben encender las luces, solamente los cocuyos.

Cuando nos adelanten, si llevamos luces plenas, debemos bajarlas para no deslumbrar al conductor que nos rebasó.

Tenga en cuenta que los efectos de la fatiga y el sueño son especialmente peligrosos en los últimos kilómetros del recorrido, debido a la ansiedad por llegar.

Evite temperaturas elevadas, bajando las ventanas o encendiendo el aire acondicionado.

Cuando se presente una avería del auto, se deben ubicar dispositivos retrorreflectivos y activar las luces de posición.

No tome medicamentos que generen somnolencia.

Si es posible, reduzca al máximo la intensidad de las luces del tablero, porque entre más iluminación en el interior del vehículo, menos capacidad visual al exterior se presenta.

No realice maniobras bruscas, ya que esto puede confundir a los conductores que van detrás o al lado suyo; recuerde que ellos también tienen reducida su capacidad de reacción.

Si va a viajar de noche, extreme los cuidados, pues no hay sentido más importante que la vista como elemento en la prevención de accidentes.

La conducción, según la Organización Mundial de la Salud, es una actividad de altísimo riesgo y si se realiza en la noche, éste se incrementa 300%. De hecho en Colombia, según cifras del Departamento de Medicina Legal, en el último año el 50,5% de las muertes y el 44,5% de los heridos se generaron en accidentes nocturnos.

Hay que tener en cuenta que la oscuridad provoca pérdida de agudeza visual y disminución del campo visual, lo cual hace ocultar peligros visibles con luz diurna, como aquellos objetos de color oscuro, que se hacen imperceptibles en el fondo de la noche.

Otra particularidad es que en la oscuridad no se aprecian completamente ni velocidad ni movimiento, por lo que se necesita de un mayor tiempo para identificar e interpretar correctamente las señalizaciones.

Por lo tanto, la máxima velocidad en condiciones óptimas (piso seco, concentración plena y vehículo en perfectas condiciones) debe ser de 60 Km/h.

Para tener en cuenta

Aumente la distancia de seguimiento en vehículos livianos de 3 a 4 segundos y en vehículos pesados de 5 a 6 segundos.

Si aparecen síntomas de fatiga, se debe detener el vehículo inmediatamente. Descanse por lo menos 15 minutos y cambie la rutina, es decir, haga pausas activas que ayuden a aumentar el flujo sanguíneo, cada 1,5 horas.

Cuando empiece a oscurecer, se deben encender las luces, solamente los cocuyos.

Cuando nos adelanten, si llevamos luces plenas, debemos bajarlas para no deslumbrar al conductor que nos rebasó.

Tenga en cuenta que los efectos de la fatiga y el sueño son especialmente peligrosos en los últimos kilómetros del recorrido, debido a la ansiedad por llegar.

Evite temperaturas elevadas, bajando las ventanas o encendiendo el aire acondicionado.

Cuando se presente una avería del auto, se deben ubicar dispositivos retrorreflectivos y activar las luces de posición.

No tome medicamentos que generen somnolencia.

Si es posible, reduzca al máximo la intensidad de las luces del tablero, porque entre más iluminación en el interior del vehículo, menos capacidad visual al exterior se presenta.

No realice maniobras bruscas, ya que esto puede confundir a los conductores que van detrás o al lado suyo; recuerde que ellos también tienen reducida su capacidad de reacción.