El "Karma" de Henrik Fisker
Diseñó automóviles icónicos para Aston Martin y BMW. Ahora, con el Karma, su propio modelo, espera partir en dos el mercado de los híbridos a como dé lugar.
El Espectador
No tendría causas para que su proyecto fracase, pero Henrik Fisker sabe que si no quiere convertirse en otro emprendedor en quiebra, deberá hacer la diferencia en el competido mercado de los automóviles eléctricos.
Se las verá con marcas de nicho como Tesla, que lleva siete años en el negocio, o gigantes como GM y Toyota; y una decena de fabricantes independientes regados por todos los continentes. Pero Fisker tiene con qué: posee liderazgo corporativo, dinero en el bolsillo y una buena idea en un mundo cambiante y más preocupado por la sustentabilidad del planeta. Su carta de presentación es amplia e incluye el diseño del Aston Martin V8 Vantage, del Aston Martin DB9 y del BMW Z8. "Fisker Automotive es un fabricante estadounidense de vehículos híbridos eléctricos con la misión de redefinir el automóvil de lujo con una dedicación inquebrantable por la sostenibilidad", expresa.
Para él, las sensuales líneas de un Aston Martin, la musculatura de un BMW Z8 o la agresividad de un Ferrari, nos mueven antes de encender el motor. Sucede, dice, porque más que medios de transporte, son objetos de deseo, y aunque su modelo Karma seguramente lo será, Fisker no planea convertirse en un jugador de nicho ni en un constructor de "juguetes" para los más ricos. El Karma es la punta de lanza de una compañía que, asegura, alejándose de la dependencia del petróleo y usando alta tecnología, muy pronto les disputará clientes a marcas como Porsche.
Según predicciones de los analistas, Estados Unidos será el mayor mercado de híbridos eléctricos del mundo en 2015, cuando deberán estar rodando más de 15 millones de vehículos de este tipo por calles y carreteras de la Nación; mientras que Alemania, que anhela tener un millón en 2020, o Japón, que espera que la mitad de los autos que se vendan en el mercado local para entonces sean eléctricos, también apuestan porque el futuro del transporte será verde.
Pero Fisker sabe que no es suficiente catalogarse como defensor del medio ambiente para convencer a los consumidores de que se suban en vehículos eléctricos. Por eso, apuesta por una fórmula que ha catalogado "ecochic", que se compone de un auto inspirador, poderoso, de alto desempeño, gran diseño y con mucha alma.
La fabricación del Karma, que combina un motor de gasolina tradicional con uno eléctrico, iniciará en 2012 y para 2014 la fábrica deberá estar en su capacidad máxima, calculada entre 75.000 y 100.000 vehículos por año con un precio que iniciará en 88.000 dólares.
Fantasía o realidad, Fisker resuelve las dudas en su oficina en Irvine (California).
¿Cuál es la filosofía de Fisker Automotive y los valores de la marca?
Nuestra filosofía no es otra que crear con pasión autos con conciencia ambiental, estilo y rendimiento. Lo más importante es que tenemos una pasión por el diseño y la ingeniería de vehículos hermosos que inspira a aquellos que con su propia pasión conducen coches sensuales y responsables. Integramos esta filosofía en todo el desarrollo de nuestros vehículos, así, por ejemplo, en su interior usamos madera recuperada, lo que significa que no se cortan los árboles.
¿Fisker es una compañía de verdad? Le pregunto porque muchos de los procesos que implementa son contratados de manera externa.
Por supuesto que es una compañía real. Nuestro diseño, ingeniería, mercadeo, entre otros, se realizan en nuestros cuarteles de California, mientras que gran parte del trabajo, incluido el montaje del Karma, se hace por outsorcing. Hace poco compramos una planta en Delaware, donde vamos a empezar a producir automóviles en 2012. Si esto no es real, ¿entonces qué lo es?
La industria automotriz está llena de emprendedores, varios frustrados, ¿por qué usted sí tendrá éxito?
Porque los consumidores están adaptándose a la idea de que necesitan vivir de manera más responsable. Fisker Automotive les permite hacerlo sin sacrificar el estilo de vida. Contamos, además, con un equipo de veteranos de la industria quienes están verdaderamente apasionados por la creación de automóviles de alta gama con conciencia ecológica, además de haber tenido éxito con nuestra tecnología híbrida.
¿Quién financia su compañía?
Hemos conseguido casi mil millones de dólares en financiación, un préstamo de 528,7 millones dólares del Departamento de Energía de Estados Unidos y más de 320 millones de dólares de fondos de capital de riesgo como Kleiner Perkins y NEA.
¿Por qué el Karma es realmente diferente?
El Fisker Karma es el primer vehículo premium eléctrico híbrido del mundo. Combina un rendimiento de primera clase y lujo con una economía líder en la industria y casi cero emisiones. El Karma ofrece una alternativa responsable en el mercado para algo así como un BMW Serie 7 o un Maserati. Posee, entre otras cosas, el techo solar más grande del mundo para un vehículo de serie que carga las baterías y que regula el sistema de enfriamiento y calefacción dentro del vehículo.
¿Insiste en que es posible despachar su primer vehículo en tres años y llegar a producir más de 100.000 por año?
Sí. El Karma fue presentado como un prototipo en 2008 y está programado para estar en las calles en tres años con ventas de 15.000 unidades por año en todo el mundo a partir de 2011. De nuestra segunda generación de híbridos enchufables se producirán más de 100.000 por año.
¿Cuántos pedidos han recibido?
Hemos tomado más de 2.000 reservaciones del Fisker Karma.
¿Cuál es el mayor reto en materia de ingeniería de un automóvil eléctrico?
El mayor desafío es la integración de la tecnología en el vehículo para que la experiencia de conducción sea suave, sin esfuerzo y produzca más emoción que conducir un auto tradicional.
¿El Karma representa el siguiente paso en el diseño de automóviles?
Sí. El Karma es único, eterno y distinto. Su proporción y escultura es más radical que la de cualquier vehículo de cuatro puertas fabricado hasta entonces.
¿Cómo es la experiencia de conducir un auto eléctrico?
El nuestro es un automóvil híbrido enchufable (plug-in Hybrid) que consta de un motor a gasolina y motores eléctricos que entregan 403 caballos de fuerza. No hay nada como él. Es potente, silencioso y eficiente.
¿Cómo ve el futuro de la industria automotriz?
En rápida evolución para mejorar. La mayoría de los grandes fabricantes están desarrollando vehículos de tecnología avanzada. Es emocionante estar liderando este cambio. Así es que creo que Fisker Automotive será una marca muy reconocida por dedicarse a fabricar híbridos eléctricos enchufables.
¿Cómo describe a las personas que comprarán sus vehículos?
Son personas con conciencia ecológica que no quieren comprometer su estilo de vida o renunciar a su reconocimiento por el estilo, diseño y desempeño de sus automóviles. Nuestros clientes van a la vanguardia en una tendencia que está tomando la delantera en el lujo responsable.
Además del Karma, ¿cuál es su automóvil favorito?
El Aston Martin V8 Vantage, el último automóvil que diseñé.
¿Qué automóvil conduce?
Un Aston Martin V8 Vantage convertible, pero solo hasta que el Karma esté disponible, que será el próximo año.
No tendría causas para que su proyecto fracase, pero Henrik Fisker sabe que si no quiere convertirse en otro emprendedor en quiebra, deberá hacer la diferencia en el competido mercado de los automóviles eléctricos.
Se las verá con marcas de nicho como Tesla, que lleva siete años en el negocio, o gigantes como GM y Toyota; y una decena de fabricantes independientes regados por todos los continentes. Pero Fisker tiene con qué: posee liderazgo corporativo, dinero en el bolsillo y una buena idea en un mundo cambiante y más preocupado por la sustentabilidad del planeta. Su carta de presentación es amplia e incluye el diseño del Aston Martin V8 Vantage, del Aston Martin DB9 y del BMW Z8. "Fisker Automotive es un fabricante estadounidense de vehículos híbridos eléctricos con la misión de redefinir el automóvil de lujo con una dedicación inquebrantable por la sostenibilidad", expresa.
Para él, las sensuales líneas de un Aston Martin, la musculatura de un BMW Z8 o la agresividad de un Ferrari, nos mueven antes de encender el motor. Sucede, dice, porque más que medios de transporte, son objetos de deseo, y aunque su modelo Karma seguramente lo será, Fisker no planea convertirse en un jugador de nicho ni en un constructor de "juguetes" para los más ricos. El Karma es la punta de lanza de una compañía que, asegura, alejándose de la dependencia del petróleo y usando alta tecnología, muy pronto les disputará clientes a marcas como Porsche.
Según predicciones de los analistas, Estados Unidos será el mayor mercado de híbridos eléctricos del mundo en 2015, cuando deberán estar rodando más de 15 millones de vehículos de este tipo por calles y carreteras de la Nación; mientras que Alemania, que anhela tener un millón en 2020, o Japón, que espera que la mitad de los autos que se vendan en el mercado local para entonces sean eléctricos, también apuestan porque el futuro del transporte será verde.
Pero Fisker sabe que no es suficiente catalogarse como defensor del medio ambiente para convencer a los consumidores de que se suban en vehículos eléctricos. Por eso, apuesta por una fórmula que ha catalogado "ecochic", que se compone de un auto inspirador, poderoso, de alto desempeño, gran diseño y con mucha alma.
La fabricación del Karma, que combina un motor de gasolina tradicional con uno eléctrico, iniciará en 2012 y para 2014 la fábrica deberá estar en su capacidad máxima, calculada entre 75.000 y 100.000 vehículos por año con un precio que iniciará en 88.000 dólares.
Fantasía o realidad, Fisker resuelve las dudas en su oficina en Irvine (California).
¿Cuál es la filosofía de Fisker Automotive y los valores de la marca?
Nuestra filosofía no es otra que crear con pasión autos con conciencia ambiental, estilo y rendimiento. Lo más importante es que tenemos una pasión por el diseño y la ingeniería de vehículos hermosos que inspira a aquellos que con su propia pasión conducen coches sensuales y responsables. Integramos esta filosofía en todo el desarrollo de nuestros vehículos, así, por ejemplo, en su interior usamos madera recuperada, lo que significa que no se cortan los árboles.
¿Fisker es una compañía de verdad? Le pregunto porque muchos de los procesos que implementa son contratados de manera externa.
Por supuesto que es una compañía real. Nuestro diseño, ingeniería, mercadeo, entre otros, se realizan en nuestros cuarteles de California, mientras que gran parte del trabajo, incluido el montaje del Karma, se hace por outsorcing. Hace poco compramos una planta en Delaware, donde vamos a empezar a producir automóviles en 2012. Si esto no es real, ¿entonces qué lo es?
La industria automotriz está llena de emprendedores, varios frustrados, ¿por qué usted sí tendrá éxito?
Porque los consumidores están adaptándose a la idea de que necesitan vivir de manera más responsable. Fisker Automotive les permite hacerlo sin sacrificar el estilo de vida. Contamos, además, con un equipo de veteranos de la industria quienes están verdaderamente apasionados por la creación de automóviles de alta gama con conciencia ecológica, además de haber tenido éxito con nuestra tecnología híbrida.
¿Quién financia su compañía?
Hemos conseguido casi mil millones de dólares en financiación, un préstamo de 528,7 millones dólares del Departamento de Energía de Estados Unidos y más de 320 millones de dólares de fondos de capital de riesgo como Kleiner Perkins y NEA.
¿Por qué el Karma es realmente diferente?
El Fisker Karma es el primer vehículo premium eléctrico híbrido del mundo. Combina un rendimiento de primera clase y lujo con una economía líder en la industria y casi cero emisiones. El Karma ofrece una alternativa responsable en el mercado para algo así como un BMW Serie 7 o un Maserati. Posee, entre otras cosas, el techo solar más grande del mundo para un vehículo de serie que carga las baterías y que regula el sistema de enfriamiento y calefacción dentro del vehículo.
¿Insiste en que es posible despachar su primer vehículo en tres años y llegar a producir más de 100.000 por año?
Sí. El Karma fue presentado como un prototipo en 2008 y está programado para estar en las calles en tres años con ventas de 15.000 unidades por año en todo el mundo a partir de 2011. De nuestra segunda generación de híbridos enchufables se producirán más de 100.000 por año.
¿Cuántos pedidos han recibido?
Hemos tomado más de 2.000 reservaciones del Fisker Karma.
¿Cuál es el mayor reto en materia de ingeniería de un automóvil eléctrico?
El mayor desafío es la integración de la tecnología en el vehículo para que la experiencia de conducción sea suave, sin esfuerzo y produzca más emoción que conducir un auto tradicional.
¿El Karma representa el siguiente paso en el diseño de automóviles?
Sí. El Karma es único, eterno y distinto. Su proporción y escultura es más radical que la de cualquier vehículo de cuatro puertas fabricado hasta entonces.
¿Cómo es la experiencia de conducir un auto eléctrico?
El nuestro es un automóvil híbrido enchufable (plug-in Hybrid) que consta de un motor a gasolina y motores eléctricos que entregan 403 caballos de fuerza. No hay nada como él. Es potente, silencioso y eficiente.
¿Cómo ve el futuro de la industria automotriz?
En rápida evolución para mejorar. La mayoría de los grandes fabricantes están desarrollando vehículos de tecnología avanzada. Es emocionante estar liderando este cambio. Así es que creo que Fisker Automotive será una marca muy reconocida por dedicarse a fabricar híbridos eléctricos enchufables.
¿Cómo describe a las personas que comprarán sus vehículos?
Son personas con conciencia ecológica que no quieren comprometer su estilo de vida o renunciar a su reconocimiento por el estilo, diseño y desempeño de sus automóviles. Nuestros clientes van a la vanguardia en una tendencia que está tomando la delantera en el lujo responsable.
Además del Karma, ¿cuál es su automóvil favorito?
El Aston Martin V8 Vantage, el último automóvil que diseñé.
¿Qué automóvil conduce?
Un Aston Martin V8 Vantage convertible, pero solo hasta que el Karma esté disponible, que será el próximo año.