El mejor tercer año para el mercado automotor

 Para nadie es un secreto que desde hace un par de años el mercado automotor ya no presenta el mismo crecimiento que en ocasiones anteriores. Las cifras de ventas han venido disminuyendo poco a poco y, pese a que la oferta es cada vez más diversa, los números no se comportan de la misma manera que en 2011, cuando el país logró un récord histórico: se comercializaron 324.570 vehículos nuevos, lo que significó un crecimiento del 27,8% frente a 2010.
Desde entonces los dígitos se han reducido considerablemente: en 2012 se vendieron 316.000 y en 2013, si el mercado cierra como se calcula, se lograrán los 300.000 unidades. Hasta el momento los carros negociados suman 239.177.

Según Andrés Aguirre, director general de SKBergé, importadora de Chrysler en Colombia, entre los factores que han contribuido a tal reducción, se destacan “los nuevos jugadores en el mercado (importadores y retailers), cambios en la normatividad como la reforma tributaria y las pólizas de chatarrización, variaciones en las tasas de cambio que generan poca estabilidad comercial a las marcas, modificaciones en las tasas de interés del consumidor y un primer trimestre en el que el Banco de la República presionó para reducir la deuda de los colombianos y para que las financieras fuesen más responsables respecto a los desembolsos”.

A esto se suma la discusión que ha causado el Tratado de Libre Comercio con Corea del Sur, que se está debatiendo en el Congreso y que tiene enfrentados a los importadores y ensambladores porque, según la industria automotriz local, al eliminar el arancel del 35% que rige sobre esos productos, se ponen en peligro alrededor de 24.000 empleos directos.

Sin embargo, para Aguirre el 2013 es apenas un período de transición en el que no hay motivos para ser pesimistas.Por ejemplo, el segmento de lujo ha crecido significativamente. De acuerdo con Héctor Corredor, vicepresidente comercial de Daimler Colombia, mientras que las matrículas cayeron 6,5% de enero a septiembre, en general el sector premium aumentó 28,1% frente al mismo período de 2012.
De hecho, si se contrastan las ventas de este año con las de 2010 (258.548), cuando despegaron admirablemente al crecer casi un 43% en comparación a 2009 (donde sólo se comercializaron 181.065 vehículos), se observa que el balance, pese a lo anterior, es positivo. Todo indica que será el tercer mejor año para la industria.

Ya se sabe cuáles serán algunos de los modelos que llegarán a Colombia. BMW, por ejemplo, anunció el lanzamiento de la tercera generación de la X5 y de la nueva X4. Mercedes-Benz, por su parte, lanzará el GLA, con el propósito de renovar el segmento de los SUV compactos y Jeep se la jugará por una Grand Cherokee que brinda mayor economía de combustible.

Estos modelos reflejan la apuesta de la industria por aumentar la eficacia de los sistemas de seguridad, darle mayor protagonismo a la conectividad y recurrir a alternativas amigables con el ambiente.

 Para nadie es un secreto que desde hace un par de años el mercado automotor ya no presenta el mismo crecimiento que en ocasiones anteriores. Las cifras de ventas han venido disminuyendo poco a poco y, pese a que la oferta es cada vez más diversa, los números no se comportan de la misma manera que en 2011, cuando el país logró un récord histórico: se comercializaron 324.570 vehículos nuevos, lo que significó un crecimiento del 27,8% frente a 2010.
Desde entonces los dígitos se han reducido considerablemente: en 2012 se vendieron 316.000 y en 2013, si el mercado cierra como se calcula, se lograrán los 300.000 unidades. Hasta el momento los carros negociados suman 239.177.

Según Andrés Aguirre, director general de SKBergé, importadora de Chrysler en Colombia, entre los factores que han contribuido a tal reducción, se destacan “los nuevos jugadores en el mercado (importadores y retailers), cambios en la normatividad como la reforma tributaria y las pólizas de chatarrización, variaciones en las tasas de cambio que generan poca estabilidad comercial a las marcas, modificaciones en las tasas de interés del consumidor y un primer trimestre en el que el Banco de la República presionó para reducir la deuda de los colombianos y para que las financieras fuesen más responsables respecto a los desembolsos”.

A esto se suma la discusión que ha causado el Tratado de Libre Comercio con Corea del Sur, que se está debatiendo en el Congreso y que tiene enfrentados a los importadores y ensambladores porque, según la industria automotriz local, al eliminar el arancel del 35% que rige sobre esos productos, se ponen en peligro alrededor de 24.000 empleos directos.

Sin embargo, para Aguirre el 2013 es apenas un período de transición en el que no hay motivos para ser pesimistas.Por ejemplo, el segmento de lujo ha crecido significativamente. De acuerdo con Héctor Corredor, vicepresidente comercial de Daimler Colombia, mientras que las matrículas cayeron 6,5% de enero a septiembre, en general el sector premium aumentó 28,1% frente al mismo período de 2012.
De hecho, si se contrastan las ventas de este año con las de 2010 (258.548), cuando despegaron admirablemente al crecer casi un 43% en comparación a 2009 (donde sólo se comercializaron 181.065 vehículos), se observa que el balance, pese a lo anterior, es positivo. Todo indica que será el tercer mejor año para la industria.

Ya se sabe cuáles serán algunos de los modelos que llegarán a Colombia. BMW, por ejemplo, anunció el lanzamiento de la tercera generación de la X5 y de la nueva X4. Mercedes-Benz, por su parte, lanzará el GLA, con el propósito de renovar el segmento de los SUV compactos y Jeep se la jugará por una Grand Cherokee que brinda mayor economía de combustible.

Estos modelos reflejan la apuesta de la industria por aumentar la eficacia de los sistemas de seguridad, darle mayor protagonismo a la conectividad y recurrir a alternativas amigables con el ambiente.