El casco polarizado ha ganado popularidad entre los motociclistas debido a su diseño moderno y la protección que ofrece contra los rayos del sol. Sin embargo, su uso no está exento de controversia, ya que, a pesar de los beneficios estéticos y de confort que proporciona, también puede generar riesgos relacionados con la visibilidad, especialmente en condiciones de baja luminosidad. Es fundamental que los motociclistas conozcan las ventajas y desventajas de este tipo de cascos para tomar decisiones informadas que garanticen su seguridad en las vías.
De acuerdo con la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), el marco normativo vigente en Colombia en materia de tránsito, transporte y seguridad vial no contempla ninguna prohibición específica para el uso de visores polarizados en cascos protectores de motociclistas. Por tanto, no existe ninguna infracción vinculada a este aspecto, lo que permite a los conductores utilizar este tipo de visores sin incurrir en sanciones legales, siempre y cuando cumplan con el resto de las normas de seguridad vial.
La mayoría de los visores polarizados están diseñados para su uso exclusivo durante el día, ya que en estas condiciones ofrecen los mayores beneficios para la conducción, tales como:
- Reducción de reflejos: disminuyen los reflejos en superficies brillantes como el asfalto mojado, las carreteras y otros vehículos.
- Mejora de la visibilidad: proporcionan mayor claridad visual en situaciones de luz cambiante.
- Protección UV: bloquean los rayos ultravioleta, evitando daños oculares.
- Mayor comodidad: reducen la tensión ocular, el estrés y la fatiga visual causados por el deslumbramiento solar.
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Asimismo, no existe ninguna restricción en la comercialización de cascos protectores para motociclistas que incluyan visores polarizados. Las pruebas de laboratorio contempladas en los estándares normativos de la Resolución 1080 de 2019 evalúan aspectos como la resistencia, el ángulo de apertura del visor y la transmitancia luminosa, entre otros. Sin embargo, dicha normativa no establece requisitos específicos para los visores polarizados.
En materia de seguridad vial, la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) recomienda el uso de cascos protectores para motociclistas que incluyan un visor o que permitan el uso de gafas o goggles especiales. Estos elementos son fundamentales para proteger el rostro y los ojos del conductor de peligros como piedras, esquirlas, insectos o factores ambientales como la lluvia y el viento. La protección ocular es crucial, ya que el contacto directo con estos objetos puede generar distracciones o reacciones imprevistas, aumentando el riesgo de accidentes en la vía.
Además, la ANSV hace énfasis en la importancia de utilizar visores certificados que ofrezcan resistencia a impactos y garanticen una visión nítida y clara, con niveles mínimos de distorsión. Estos visores son esenciales para mejorar la visibilidad en diversas condiciones de luz, tanto de día como de noche, lo que contribuye significativamente a la seguridad del motociclista. “Un visor adecuado no solo protege contra elementos externos, sino que también optimiza la percepción visual, ayudando al conductor a tomar decisiones más precisas y rápidas en la carretera”, señalan los voceros de ANSV.
Algunos visores, como los de color amarillo o azul, han demostrado ser especialmente útiles durante la conducción nocturna. Estos visores reducen los destellos y reflejos causados por fuentes de luz tanto naturales como artificiales, mejorando la visibilidad en condiciones de poca luz. De esta manera, contribuyen a que los motociclistas se sientan más cómodos y seguros durante la conducción nocturna, disminuyendo el riesgo de siniestros viales.
Por su parte, Danny León Sogamoso, experto en movilidad de la academia de conducción CEA Autopiloto, subraya la importancia de utilizar cascos con la certificación adecuada exigida por cada país. Estas certificaciones garantizan que el casco cumpla con estrictos estándares de seguridad, probados para ofrecer la protección necesaria en caso de accidente.
Cada país establece sus propios requisitos y pruebas específicas, adaptados a las normativas y condiciones locales de seguridad vial. Elegir cascos certificados no solo asegura una protección óptima contra impactos y lesiones, sino que también brinda la tranquilidad de saber que el equipo cumple con las normativas vigentes para proteger al motociclista.
En Colombia, el uso de cascos que no cumplan con las normativas de seguridad puede conllevar sanciones económicas significativas. Los motociclistas que utilicen cascos no certificados se exponen a multas de hasta 15 Salarios Diarios Mínimos Legales Vigentes (SDMLV), aproximadamente $600.000. Esta medida tiene como objetivo garantizar que todos los usuarios de motocicletas utilicen equipos de protección que cumplan con los estándares de seguridad del país, protegiendo así su integridad en las vías.
¿Qué características debe tener un casco certificado?
Según José Luis Pérez, experto en accesorios de Tu Moto en la Web, en Colombia se aceptan cascos certificados por las normas ECE, SNELL y DOT, consideradas las más seguras a nivel internacional. La certificación ECE 2205 asegura un alto nivel de protección, mientras que la ECE 2206, vigente desde 2022, incluye pruebas adicionales que mejoran la seguridad del motociclista.
Para obtener la certificación, un casco debe contar con una estructura externa resistente, fabricada con materiales como policarbonato, fibra de vidrio o carbono, un sistema de retención seguro y un forro interior de absorción de impactos, generalmente de espuma EPS. Además, debe someterse a pruebas rigurosas que evalúan su capacidad de absorber impactos, resistir penetraciones, mantener su sistema de sujeción y proporcionar visibilidad periférica adecuada.
Las pruebas incluyen la capacidad del casco para absorber la energía de un impacto, su resistencia a objetos punzantes, la estabilidad del sistema de retención y la evaluación del campo de visión y ajuste, asegurando que el casco permanezca en su lugar en todo momento.
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Para verificar la autenticidad de la certificación DOT en un casco, Pérez señala los siguientes elementos:
- Nombre de la marca del fabricante en la parte superior.
- Referencia del casco debajo del nombre de la marca.
- La palabra “DOT”.
- Las siglas “FMVSS” seguidas del número 218.
- La palabra “Certified” o “Certificado”.
Es fundamental que estos detalles estén impresos directamente en la pintura del casco, no como adhesivos removibles, para asegurar su autenticidad.
Para cascos con certificación ECE 2205 o ECE 2206:
- La marca debe comenzar con la letra “E” seguida de un número, que indica el país de homologación.
- Debajo de la letra “E”, aparecerá una serie de dígitos que detallan la fabricación.
- Algunas veces, la certificación también está estampada en la parte posterior del casco.
La verificación principal debe realizarse en la correa del casco, donde se encuentra la información oficial de la homologación.
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