Estados Unidos limitará el uso de software chinos en los vehículos inteligentes
El Departamento de Comercio de los Estados Unidos emitirá a lo largo de las próximas semanas una serie de reglas propuestas por los legisladores del país sobre vehículos inteligentes en las que incluirá una serie de límites a algunos programas informáticos fabricados en China.
Un alto funcionario del departamento comercial del país ha asegurado este miércoles que se está considerando delimitar el empleo de algunos componentes electrónicos en los vehículos de nueva matriculación, ciertos programas de software y datos en torno a la tecnología automovilística.
Los automóviles inteligentes cuentan con una red integrada a bordo para permitir el acceso a internet y la recolección de datos que comparte con el resto de dispositivos tanto dentro como fuera del vehículo.
“Esta es una amenaza muy grave”, ha declarado en las últimas horas el subsecretario de comercio de industria y seguridad y director de controles de exportación, Alan Estevez, durante la celebración de un foro sobre el sector en Colorado (Estados Unidos).
“Un coche moderno tiene mucho software. Toma muchas fotografías. Tiene un sistema de conducción. Está conectado a tu teléfono. Sabe a quién llamas. Sabe a dónde vas. Sabe mucho sobre ti”, ha admitido Estevez.
En mayo, la secretaria de Comercio, Gina Raimondo, aseguró durante una intervención pública que su departamento estudiaba la redacción de nuevas reglas sobre vehículos inteligentes con respecto a este otoño y avanzó que la administración de Joe Biden podría tomar “medidas extremas” y prohibir estos vehículos importados desde el gigante asiático o imponerles restricciones después de que en febrero se lanzara una investigación sobre si las exportaciones chinas planteaban riesgos para la seguridad nacional.
El Ministerio de Asuntos Exteriores chino ya ha instado a Estados Unidos a “respetar las leyes de la economía de mercado y los principios de la competencia leal”, y sostiene que los coches chinos han conseguido batir en ventas a ciertas marcas locales en todo el mundo porque tras una feroz competencia y advierte que son tecnológicamente innovadores.
La cifra de importación de vehículos chinos en Estados Unidos es mínima. Sin embargo, a pesar de ello, el Gobierno de Biden propuso una subida de los aranceles sobre la importación de los vehículos eléctricos del 25% al 100% y que se espera que entren en vigor el próximo 1 de agosto.
Un alto funcionario del departamento comercial del país ha asegurado este miércoles que se está considerando delimitar el empleo de algunos componentes electrónicos en los vehículos de nueva matriculación, ciertos programas de software y datos en torno a la tecnología automovilística.
Los automóviles inteligentes cuentan con una red integrada a bordo para permitir el acceso a internet y la recolección de datos que comparte con el resto de dispositivos tanto dentro como fuera del vehículo.
“Esta es una amenaza muy grave”, ha declarado en las últimas horas el subsecretario de comercio de industria y seguridad y director de controles de exportación, Alan Estevez, durante la celebración de un foro sobre el sector en Colorado (Estados Unidos).
“Un coche moderno tiene mucho software. Toma muchas fotografías. Tiene un sistema de conducción. Está conectado a tu teléfono. Sabe a quién llamas. Sabe a dónde vas. Sabe mucho sobre ti”, ha admitido Estevez.
En mayo, la secretaria de Comercio, Gina Raimondo, aseguró durante una intervención pública que su departamento estudiaba la redacción de nuevas reglas sobre vehículos inteligentes con respecto a este otoño y avanzó que la administración de Joe Biden podría tomar “medidas extremas” y prohibir estos vehículos importados desde el gigante asiático o imponerles restricciones después de que en febrero se lanzara una investigación sobre si las exportaciones chinas planteaban riesgos para la seguridad nacional.
El Ministerio de Asuntos Exteriores chino ya ha instado a Estados Unidos a “respetar las leyes de la economía de mercado y los principios de la competencia leal”, y sostiene que los coches chinos han conseguido batir en ventas a ciertas marcas locales en todo el mundo porque tras una feroz competencia y advierte que son tecnológicamente innovadores.
La cifra de importación de vehículos chinos en Estados Unidos es mínima. Sin embargo, a pesar de ello, el Gobierno de Biden propuso una subida de los aranceles sobre la importación de los vehículos eléctricos del 25% al 100% y que se espera que entren en vigor el próximo 1 de agosto.