Guía completa de airbags en carros: seguridad, fallas y recomendaciones
Desde su introducción en la década de 1970, los airbags se han establecido como equipo estándar en la mayoría de los vehículos, abarcando tanto modelos de gama media como baja. Estos sistemas han demostrado capacidad para reducir hasta un 32% de las fatalidades en accidentes y hasta un 75% de las lesiones craneofaciales.
David Vásquez Herrera
En el panorama actual de la seguridad automotriz, los airbags juegan un papel fundamental como dispositivos diseñados para mitigar el impacto de colisiones y proteger a los ocupantes de vehículos. Desde su introducción, estos sistemas han evolucionado considerablemente en términos de tecnología y eficacia, convirtiéndose en un estándar de seguridad en la mayoría de los carros modernos. Sin embargo, a medida que la tecnología avanza, también surgen preguntas y preocupaciones sobre su funcionamiento y efectividad en diversas condiciones de accidente.
Andrés Nieto Ramírez, experto en seguridad vial y director del Observatorio de Seguridad y Convivencia de la Universidad Central, señala que los airbags o bolsas de aire son dispositivos cruciales en la seguridad vehicular, diseñados para reducir significativamente el riesgo de lesiones graves o fatales en accidentes de tránsito. Desde su masificación comercial en 1971, inicialmente en vehículos de alta gama como BMW y Mercedes-Benz, se han convertido en estándar en la mayoría de los automóviles, incluyendo modelos de gama media y baja. Estos sistemas pueden prevenir hasta un 32% de las muertes en accidentes y hasta un 75% de las lesiones cráneo-faciales.
A lo largo de las últimas décadas, han evolucionado desde sistemas mecánicos simples hasta complejos sistemas electrónicos con sensores integrados en el motor, el sistema eléctrico y el chasis del vehículo, permitiendo una activación rápida en menos de 3 segundos tras un impacto. Aunque su activación es automática, algunos vehículos permiten la desactivación selectiva de airbags para adaptarse a necesidades específicas, como el transporte de niños o personas con discapacidad.
Le puede interesar: Estos son los exámenes médicos y puntos autorizados para licencia de conducción
Tipos de Airbags
De acuerdo con Nieto, existen siete tipos de airbags, cada uno diseñado para proteger en diferentes áreas del vehículo y situaciones de accidente.
El más común es el airbag frontal, ubicado en el volante y la guantera, que protege al conductor y al pasajero delantero. Con el tiempo, se han desarrollado airbags traseros para golpes en la nuca -colocados en los apoyacabezas-, y airbags laterales, que aparecen entre las puertas o en el techo si el vehículo tiene solo dos puertas.
También están los airbags de rodilla y de cinturón de seguridad, enfocados en proteger estas zonas específicas. Inicialmente destinados a la protección craneofacial, estos sistemas han evolucionado incluyendo airbags de tipo cortina, que protegen a los ocupantes delanteros y traseros para prevenir lesiones en la caja torácica.
“En los últimos años, se ha popularizado el airbag externo, que despliega almohadillas para evitar colisiones con peatones y reducir el riesgo de fracturas en caso de impacto”, señala.
Seguridad de los Airbags
Para el experto, es importante destacar que los airbags no previenen el 100% de las lesiones; su objetivo principal es reducir la gravedad de estas y evitar muertes instantáneas. Aunque un choque a alta velocidad siempre causará algún tipo de lesión, los airbags ayudan a disminuir la fatalidad de las mismas.
Los airbags frontales, los más comunes, protegen contra golpes en la cabeza, rostro, pecho y cuello. Los vehículos más avanzados, equipados con varios tipos de airbags, pueden prevenir lesiones en las extremidades inferiores, columna y tórax.
Para que los airbags sean efectivos, es importante complementarlos con otras medidas de seguridad. El uso del cinturón de seguridad es crucial, y se recomienda mantener una distancia mínima de 25 cm entre el conductor y el volante, y 30 cm entre el pasajero y el tablero. Además, es vital que los cinturones de seguridad estén correctamente ajustados y que las sillas para niños y adultos mayores estén instaladas y posicionadas adecuadamente.
Fallas mecánicas de los Airbags
Aunque los airbags son uno de los dispositivos de seguridad vial más populares, en los últimos años se han emitido tres alertas importantes sobre fallas en su fabricación. Estas alertas, que ocurrieron en 2015, 2017 y 2021, señalaron problemas mecánicos, digitales y tecnológicos en los airbags, lo que ha llevado a incidentes graves: “Antes de la pandemia, se registraron aproximadamente 24 muertes y 290 heridos debido a airbags defectuosos solo en Latinoamérica. Se estima que alrededor de 900.000 vehículos en la región necesitaban revisión, y unos 213.000 requerían un cambio completo del sistema de airbags”, destaca Nieto.
La responsabilidad de los fabricantes y distribuidores es contactar a los propietarios de los vehículos afectados para realizar los cambios necesarios sin costo alguno. Según Nieto, en algunos países europeos cuando las fallas en los airbags resultan en fatalidades o lesiones graves, se han iniciado procesos penales y legales contra las marcas fabricantes, basándose en la confianza y la calidad de fabricación. La legislación y los procedimientos varían según el país, pero estos casos han generado disputas jurídicas sobre los daños y perjuicios causados por airbags de mala calidad.
Recomendaciones
Aunque la mayoría de los airbags son genéricos en términos técnicos, es decir, no se diseñan específicamente para diferentes edades, etapas de vida o discapacidades, hay cuatro recomendaciones generales importantes para garantizar su efectividad. Primero, es esencial conocer el diseño del vehículo y la gama a la que pertenece, ya que pueden incluir diferentes tipos de airbags, como los frontales y otros entre los siete tipos disponibles. Revisar el manual del vehículo para entender la activación y el uso seguro de los airbags es crucial.
Segundo, siempre se deben tomar medidas adicionales de seguridad, como el uso del cinturón de seguridad, la correcta posición del asiento, la inclinación adecuada del respaldo y la altura del mismo. En el caso de los niños, se deben seguir recomendaciones específicas sobre el uso de sillas infantiles y su anclaje correcto. Para personas con discapacidad, es fundamental realizar adecuaciones para asegurar que el airbag funcione de manera segura.
La tercera recomendación para el uso de airbags es realizar un mantenimiento y revisión constante. Los vehículos más recientes, equipados con sistemas de diagnóstico por computador, pueden detectar y alertar sobre problemas con los airbags o su posición.
Si el vehículo ha estado involucrado en una colisión y el airbag no se activó, es crucial que la marca, concesionario o taller autorizado revise el sistema para asegurarse de que los sensores y el airbag estén en buen estado y correctamente posicionados.
“Además, después de activarse, los airbags deben ser reemplazados completamente. Algunas personas intentan reducir costos reutilizando airbags desplegados, lo que implica replegarlos y reinstalarlos. Sin embargo, esta práctica reduce la efectividad del airbag hasta en un 62% y puede resultar en un mal funcionamiento en futuros accidentes, incluso impidiendo su activación”, enfatiza.
Le sugerimos: ¿Con cuántas multas de tránsito le pueden suspender la licencia de conducción?
Lesiones de los airbags al activarse
Según Claudia Guerrero, experta en automóviles y gerente de All Engine, las lesiones más comunes provocadas por el despliegue de un airbag incluyen daños en la cabeza y el cuello, como contusiones, conmociones cerebrales y latigazo cervical, que afectan músculos y ligamentos.
En el rostro, el impacto puede causar hematomas, cortes, fracturas en los huesos faciales, ruptura de tímpanos, pérdida temporal o permanente de audición, irritación ocular y posibles daños visuales debido a los químicos del airbag.
Las manos y muñecas pueden sufrir quemaduras, cortes, fracturas y dislocaciones debido a su cercanía con el punto de despliegue. En el pecho, la combinación del impacto del airbag y el cinturón de seguridad puede resultar en fracturas de costillas, hemorragias internas y afectaciones cardíacas.
Posturas seguras al activarse el airbag
A su vez, Nieto indica que, para garantizar la efectividad de los airbags y la seguridad vial, es crucial seguir ciertas recomendaciones durante la conducción.
En primer lugar, el asiento debe estar ajustado en un ángulo correcto, ni demasiado inclinado hacia atrás ni demasiado hacia adelante. Este ángulo varía según el vehículo y la inclinación del parabrisas, por lo que es esencial consultar el manual del propietario para obtener la configuración óptima.
Además, siempre se debe usar el cinturón de seguridad. Cumplir con estas recomendaciones, junto con las específicas de cada marca o modelo de vehículo, maximiza la seguridad del airbag. Ignorar estas prácticas puede reducir la efectividad del airbag e incluso provocar lesiones adicionales en caso de activación.
A su turno, Guerrero indica que, el conductor debe mantener una distancia mínima de 25 cm (10 pulgadas) del volante, ajustar la altura del asiento para una visión clara del camino y reclinar el respaldo entre 100 y 110 grados para un soporte adecuado.
Las manos deben ubicarse en la posición 10:10 en el volante. Las piernas deben estar ligeramente dobladas para alcanzar cómodamente los pedales, mientras que el cinturón de seguridad debe ajustarse correctamente, con la banda pélvica sobre las caderas y la diagonal sobre el pecho. Los pasajeros deben sentarse alejados del tablero, con el respaldo recto y el cinturón de seguridad bien colocado.
En el panorama actual de la seguridad automotriz, los airbags juegan un papel fundamental como dispositivos diseñados para mitigar el impacto de colisiones y proteger a los ocupantes de vehículos. Desde su introducción, estos sistemas han evolucionado considerablemente en términos de tecnología y eficacia, convirtiéndose en un estándar de seguridad en la mayoría de los carros modernos. Sin embargo, a medida que la tecnología avanza, también surgen preguntas y preocupaciones sobre su funcionamiento y efectividad en diversas condiciones de accidente.
Andrés Nieto Ramírez, experto en seguridad vial y director del Observatorio de Seguridad y Convivencia de la Universidad Central, señala que los airbags o bolsas de aire son dispositivos cruciales en la seguridad vehicular, diseñados para reducir significativamente el riesgo de lesiones graves o fatales en accidentes de tránsito. Desde su masificación comercial en 1971, inicialmente en vehículos de alta gama como BMW y Mercedes-Benz, se han convertido en estándar en la mayoría de los automóviles, incluyendo modelos de gama media y baja. Estos sistemas pueden prevenir hasta un 32% de las muertes en accidentes y hasta un 75% de las lesiones cráneo-faciales.
A lo largo de las últimas décadas, han evolucionado desde sistemas mecánicos simples hasta complejos sistemas electrónicos con sensores integrados en el motor, el sistema eléctrico y el chasis del vehículo, permitiendo una activación rápida en menos de 3 segundos tras un impacto. Aunque su activación es automática, algunos vehículos permiten la desactivación selectiva de airbags para adaptarse a necesidades específicas, como el transporte de niños o personas con discapacidad.
Le puede interesar: Estos son los exámenes médicos y puntos autorizados para licencia de conducción
Tipos de Airbags
De acuerdo con Nieto, existen siete tipos de airbags, cada uno diseñado para proteger en diferentes áreas del vehículo y situaciones de accidente.
El más común es el airbag frontal, ubicado en el volante y la guantera, que protege al conductor y al pasajero delantero. Con el tiempo, se han desarrollado airbags traseros para golpes en la nuca -colocados en los apoyacabezas-, y airbags laterales, que aparecen entre las puertas o en el techo si el vehículo tiene solo dos puertas.
También están los airbags de rodilla y de cinturón de seguridad, enfocados en proteger estas zonas específicas. Inicialmente destinados a la protección craneofacial, estos sistemas han evolucionado incluyendo airbags de tipo cortina, que protegen a los ocupantes delanteros y traseros para prevenir lesiones en la caja torácica.
“En los últimos años, se ha popularizado el airbag externo, que despliega almohadillas para evitar colisiones con peatones y reducir el riesgo de fracturas en caso de impacto”, señala.
Seguridad de los Airbags
Para el experto, es importante destacar que los airbags no previenen el 100% de las lesiones; su objetivo principal es reducir la gravedad de estas y evitar muertes instantáneas. Aunque un choque a alta velocidad siempre causará algún tipo de lesión, los airbags ayudan a disminuir la fatalidad de las mismas.
Los airbags frontales, los más comunes, protegen contra golpes en la cabeza, rostro, pecho y cuello. Los vehículos más avanzados, equipados con varios tipos de airbags, pueden prevenir lesiones en las extremidades inferiores, columna y tórax.
Para que los airbags sean efectivos, es importante complementarlos con otras medidas de seguridad. El uso del cinturón de seguridad es crucial, y se recomienda mantener una distancia mínima de 25 cm entre el conductor y el volante, y 30 cm entre el pasajero y el tablero. Además, es vital que los cinturones de seguridad estén correctamente ajustados y que las sillas para niños y adultos mayores estén instaladas y posicionadas adecuadamente.
Fallas mecánicas de los Airbags
Aunque los airbags son uno de los dispositivos de seguridad vial más populares, en los últimos años se han emitido tres alertas importantes sobre fallas en su fabricación. Estas alertas, que ocurrieron en 2015, 2017 y 2021, señalaron problemas mecánicos, digitales y tecnológicos en los airbags, lo que ha llevado a incidentes graves: “Antes de la pandemia, se registraron aproximadamente 24 muertes y 290 heridos debido a airbags defectuosos solo en Latinoamérica. Se estima que alrededor de 900.000 vehículos en la región necesitaban revisión, y unos 213.000 requerían un cambio completo del sistema de airbags”, destaca Nieto.
La responsabilidad de los fabricantes y distribuidores es contactar a los propietarios de los vehículos afectados para realizar los cambios necesarios sin costo alguno. Según Nieto, en algunos países europeos cuando las fallas en los airbags resultan en fatalidades o lesiones graves, se han iniciado procesos penales y legales contra las marcas fabricantes, basándose en la confianza y la calidad de fabricación. La legislación y los procedimientos varían según el país, pero estos casos han generado disputas jurídicas sobre los daños y perjuicios causados por airbags de mala calidad.
Recomendaciones
Aunque la mayoría de los airbags son genéricos en términos técnicos, es decir, no se diseñan específicamente para diferentes edades, etapas de vida o discapacidades, hay cuatro recomendaciones generales importantes para garantizar su efectividad. Primero, es esencial conocer el diseño del vehículo y la gama a la que pertenece, ya que pueden incluir diferentes tipos de airbags, como los frontales y otros entre los siete tipos disponibles. Revisar el manual del vehículo para entender la activación y el uso seguro de los airbags es crucial.
Segundo, siempre se deben tomar medidas adicionales de seguridad, como el uso del cinturón de seguridad, la correcta posición del asiento, la inclinación adecuada del respaldo y la altura del mismo. En el caso de los niños, se deben seguir recomendaciones específicas sobre el uso de sillas infantiles y su anclaje correcto. Para personas con discapacidad, es fundamental realizar adecuaciones para asegurar que el airbag funcione de manera segura.
La tercera recomendación para el uso de airbags es realizar un mantenimiento y revisión constante. Los vehículos más recientes, equipados con sistemas de diagnóstico por computador, pueden detectar y alertar sobre problemas con los airbags o su posición.
Si el vehículo ha estado involucrado en una colisión y el airbag no se activó, es crucial que la marca, concesionario o taller autorizado revise el sistema para asegurarse de que los sensores y el airbag estén en buen estado y correctamente posicionados.
“Además, después de activarse, los airbags deben ser reemplazados completamente. Algunas personas intentan reducir costos reutilizando airbags desplegados, lo que implica replegarlos y reinstalarlos. Sin embargo, esta práctica reduce la efectividad del airbag hasta en un 62% y puede resultar en un mal funcionamiento en futuros accidentes, incluso impidiendo su activación”, enfatiza.
Le sugerimos: ¿Con cuántas multas de tránsito le pueden suspender la licencia de conducción?
Lesiones de los airbags al activarse
Según Claudia Guerrero, experta en automóviles y gerente de All Engine, las lesiones más comunes provocadas por el despliegue de un airbag incluyen daños en la cabeza y el cuello, como contusiones, conmociones cerebrales y latigazo cervical, que afectan músculos y ligamentos.
En el rostro, el impacto puede causar hematomas, cortes, fracturas en los huesos faciales, ruptura de tímpanos, pérdida temporal o permanente de audición, irritación ocular y posibles daños visuales debido a los químicos del airbag.
Las manos y muñecas pueden sufrir quemaduras, cortes, fracturas y dislocaciones debido a su cercanía con el punto de despliegue. En el pecho, la combinación del impacto del airbag y el cinturón de seguridad puede resultar en fracturas de costillas, hemorragias internas y afectaciones cardíacas.
Posturas seguras al activarse el airbag
A su vez, Nieto indica que, para garantizar la efectividad de los airbags y la seguridad vial, es crucial seguir ciertas recomendaciones durante la conducción.
En primer lugar, el asiento debe estar ajustado en un ángulo correcto, ni demasiado inclinado hacia atrás ni demasiado hacia adelante. Este ángulo varía según el vehículo y la inclinación del parabrisas, por lo que es esencial consultar el manual del propietario para obtener la configuración óptima.
Además, siempre se debe usar el cinturón de seguridad. Cumplir con estas recomendaciones, junto con las específicas de cada marca o modelo de vehículo, maximiza la seguridad del airbag. Ignorar estas prácticas puede reducir la efectividad del airbag e incluso provocar lesiones adicionales en caso de activación.
A su turno, Guerrero indica que, el conductor debe mantener una distancia mínima de 25 cm (10 pulgadas) del volante, ajustar la altura del asiento para una visión clara del camino y reclinar el respaldo entre 100 y 110 grados para un soporte adecuado.
Las manos deben ubicarse en la posición 10:10 en el volante. Las piernas deben estar ligeramente dobladas para alcanzar cómodamente los pedales, mientras que el cinturón de seguridad debe ajustarse correctamente, con la banda pélvica sobre las caderas y la diagonal sobre el pecho. Los pasajeros deben sentarse alejados del tablero, con el respaldo recto y el cinturón de seguridad bien colocado.