Hábitos que disminuyen la vida útil de una moto
Conozca los errores más comunes y cuáles son las recomendaciones para alargar la vida útil de su motocicleta.
Si apenas está entrando al mundo de las motos, o si ya tiene una y quiere saber cuáles son las buenas prácticas que debe seguir para mantenerla en buen estado, este artículo es para usted. No se trata de un tema menor, realizar un mantenimiento adecuado permite no solo conocer a fondo la evolución de la motocicleta, sino que además ayuda a garantizar una experiencia más segura.
Pero primero comencemos por las malas prácticas. Uno de los errores más comunes entre los conductores, por ejemplo, es desarrollar hábitos poco recomendables en la conducción: movimientos errados al momento de realizar los cambios y malas posturas en los pies y espalda que además pueden desencadenar problemas en las articulaciones como codos y las muñecas. Corregir estas malas prácticas, iniciando con una posición de conducción correcta, mejorará la experiencia de manejo y contribuirá a eliminar fatigas.
Dicho esto, vamos con algunos consejos más de mecánica. Para Cesar Villamil, mecánico experto en motos del servicio técnico Universal de Motos, uno de los puntos más importantes está en el calentamiento de la moto. Asegura que hacerlo durante mucho tiempo puede resultar contraproducente y que si bien el motor necesita calor para los anillos y pistones, se sugiere permitir que la moto se caliente durante un máximo de dos minutos y luego acelerar gradualmente.
Otro punto clave para el cuidado de la moto es evitar realizar aceleraciones invasivas cuando la moto no está en movimiento, y dejar el embrague puesto cuando está detenida, por ejemplo cuando se frena en el semáforo. En la medida de lo posible es mejor llevar el cambio a neutro siempre. A eso se suma la recomendación de realizar un mantenimiento que incluya cambio de aceite, tanto en términos de nivel como de calidad, ya que es un riesgo latente en el momento de poner en marcha la motocicleta. Además, es importante adherirse a las recomendaciones del fabricante al seleccionar el líquido refrigerante adecuado para evitar la mezcla de productos con diferentes viscosidades.
También es fundamental estar atentos a la lubricación de la cadena, que experimenta considerables tensiones en el momento de la conducción. La cadena debe ser inspeccionada regularmente, manteniéndola bien lubricada y ajustada. Su descuido puede derivar no solo en averías costosas, sino también comprometer la seguridad a la hora de manejar.
A las prácticas preventivas indispensables para evitar posibles fallo se suman la revisión periódica de los frenos y la suspensión, vitales para garantizar una frenada efectiva; el cambio y revisión de las pastillas del freno según las indicaciones de cada fabricante y la limpieza de las suspensiones.
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Además de los riesgos de seguridad que implica, otra mala práctica de manejo es no prestar atención a los obstáculos o baches en la vía. Es importante anticiparse visualmente para prevenir situaciones altamente peligrosas y que puedan ocasionar daños significativos a la suspensión y neumáticos de la moto. Detener la moto con el freno trasero o delantero genera respuestas diferentes en la moto, ya que cada freno es para una maniobra distinta. En el manejo de las motos, la acción de frenado debe ser simultánea, es decir, aplicar presión a ambos frenos al mismo tiempo, permitiendo combinar de manera sincronizada la capacidad de giro, la estabilidad y la reducción de la velocidad.
De acuerdo con Villamil, es bueno mantener en óptimas condiciones el sistema eléctrico de una moto y su mantenimiento también debe ser prioridad para el óptimo funcionamiento de la misma. Al necesitar el reemplazo de componentes del sistema eléctrico (como la batería, fusiles, bombillas), es importante asegurarse de utilizar piezas de alta calidad. Cuando se planifique cambiar la batería, es importante verificar el amperaje y voltaje que coincidan con los requerimientos de la moto, para evitar sobrecargas que afectan el sistema eléctrico.
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La limpieza regular de la batería es esencial, ya que tiende a presentar fallos si no se hace adecuadamente. Si se observa acumulación de polvo blanco en las conexiones de la batería, retire con cuidado para evitar que estos restos de sulfato permanezcan en la zona, afectando el rendimiento de la batería. Se recomienda asegurarse de que la persona encargada del mantenimiento o revisión tenga la capacitación en electrónica automotriz que garantice la reparación al sistema eléctrico.
Y por último, pero no menos importante, es imperativo evaluar la moto correcta para usted. En este proceso de selección de una moto, es necesario considerar los factores de altura, la distancia al manubrio y elegir el peso adecuado, acorde a la contextura del conductor. Optar por una moto que no se ajuste adecuadamente a nuestras necesidades y capacidades físicas genera incomodidades o incluso situaciones peligrosas en el momento de manejar.
Si apenas está entrando al mundo de las motos, o si ya tiene una y quiere saber cuáles son las buenas prácticas que debe seguir para mantenerla en buen estado, este artículo es para usted. No se trata de un tema menor, realizar un mantenimiento adecuado permite no solo conocer a fondo la evolución de la motocicleta, sino que además ayuda a garantizar una experiencia más segura.
Pero primero comencemos por las malas prácticas. Uno de los errores más comunes entre los conductores, por ejemplo, es desarrollar hábitos poco recomendables en la conducción: movimientos errados al momento de realizar los cambios y malas posturas en los pies y espalda que además pueden desencadenar problemas en las articulaciones como codos y las muñecas. Corregir estas malas prácticas, iniciando con una posición de conducción correcta, mejorará la experiencia de manejo y contribuirá a eliminar fatigas.
Dicho esto, vamos con algunos consejos más de mecánica. Para Cesar Villamil, mecánico experto en motos del servicio técnico Universal de Motos, uno de los puntos más importantes está en el calentamiento de la moto. Asegura que hacerlo durante mucho tiempo puede resultar contraproducente y que si bien el motor necesita calor para los anillos y pistones, se sugiere permitir que la moto se caliente durante un máximo de dos minutos y luego acelerar gradualmente.
Otro punto clave para el cuidado de la moto es evitar realizar aceleraciones invasivas cuando la moto no está en movimiento, y dejar el embrague puesto cuando está detenida, por ejemplo cuando se frena en el semáforo. En la medida de lo posible es mejor llevar el cambio a neutro siempre. A eso se suma la recomendación de realizar un mantenimiento que incluya cambio de aceite, tanto en términos de nivel como de calidad, ya que es un riesgo latente en el momento de poner en marcha la motocicleta. Además, es importante adherirse a las recomendaciones del fabricante al seleccionar el líquido refrigerante adecuado para evitar la mezcla de productos con diferentes viscosidades.
También es fundamental estar atentos a la lubricación de la cadena, que experimenta considerables tensiones en el momento de la conducción. La cadena debe ser inspeccionada regularmente, manteniéndola bien lubricada y ajustada. Su descuido puede derivar no solo en averías costosas, sino también comprometer la seguridad a la hora de manejar.
A las prácticas preventivas indispensables para evitar posibles fallo se suman la revisión periódica de los frenos y la suspensión, vitales para garantizar una frenada efectiva; el cambio y revisión de las pastillas del freno según las indicaciones de cada fabricante y la limpieza de las suspensiones.
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Además de los riesgos de seguridad que implica, otra mala práctica de manejo es no prestar atención a los obstáculos o baches en la vía. Es importante anticiparse visualmente para prevenir situaciones altamente peligrosas y que puedan ocasionar daños significativos a la suspensión y neumáticos de la moto. Detener la moto con el freno trasero o delantero genera respuestas diferentes en la moto, ya que cada freno es para una maniobra distinta. En el manejo de las motos, la acción de frenado debe ser simultánea, es decir, aplicar presión a ambos frenos al mismo tiempo, permitiendo combinar de manera sincronizada la capacidad de giro, la estabilidad y la reducción de la velocidad.
De acuerdo con Villamil, es bueno mantener en óptimas condiciones el sistema eléctrico de una moto y su mantenimiento también debe ser prioridad para el óptimo funcionamiento de la misma. Al necesitar el reemplazo de componentes del sistema eléctrico (como la batería, fusiles, bombillas), es importante asegurarse de utilizar piezas de alta calidad. Cuando se planifique cambiar la batería, es importante verificar el amperaje y voltaje que coincidan con los requerimientos de la moto, para evitar sobrecargas que afectan el sistema eléctrico.
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La limpieza regular de la batería es esencial, ya que tiende a presentar fallos si no se hace adecuadamente. Si se observa acumulación de polvo blanco en las conexiones de la batería, retire con cuidado para evitar que estos restos de sulfato permanezcan en la zona, afectando el rendimiento de la batería. Se recomienda asegurarse de que la persona encargada del mantenimiento o revisión tenga la capacitación en electrónica automotriz que garantice la reparación al sistema eléctrico.
Y por último, pero no menos importante, es imperativo evaluar la moto correcta para usted. En este proceso de selección de una moto, es necesario considerar los factores de altura, la distancia al manubrio y elegir el peso adecuado, acorde a la contextura del conductor. Optar por una moto que no se ajuste adecuadamente a nuestras necesidades y capacidades físicas genera incomodidades o incluso situaciones peligrosas en el momento de manejar.